En la ciudad siguen los problemas de distribución de la garrafa económica
Las distribuidoras tienen un 30 por ciento menos de garrafas de 10 Kg para la venta que el año pasado y se redujeron a la mitad los comercios que comercializan la garrafa para todos. Hay retrasos de hasta seis meses en el pago de los subsidios por parte de la Secretaría de Energía de la Nación. El gas butano que produce el país no alcanza para abastecer el mercado nacional.
Desde el 2008 cuando el Gobierno Nacional implementó el programa “garrafas para todos”, los combustibles sufrieron fuertes incrementos por la constante inflación y poco a poco el mercado del gas butano comienza a sincerarse.
Para los sectores más bajos de la población, conseguir una garrafa de 10 Kg a 16 pesos, le significa un esfuerzo cada vez mayor. A partir de las 5:30 de la mañana la gente comienza a llegar cada día a Extra Gas en Acceso Sur y Lisandro de La Torre para obtener el tan preciado combustible, pero solo doscientos serán los afortunados.
El año pasado había seis distribuidoras que comercializaban esta garrafa en la ciudad, pero este invierno solo quedan tres, Total Gas, Extra Gas y Flama Gas, esta última está en la Ruta 14 a la altura de Sarandí, un lugar que para los sectores populares sin medio de movilidad es difícil de llegar.
Al ver el retraso en el pago del subsidio por la Secretaría de Energía de la Nación, y las dificultades que las distribuidoras tenían en conseguir gas butano, algunos comercios locales decidieron borrarse de la lista de comercios de garrafas para todos y renunciar al subsidio.
Hoy pasaron a vender el envase de 10 kg a 45 pesos y 60 pesos si es con envío a domicilio. Aunque todo indica que será difícil mantener esta tarifa, nuevos aumentos se esperan para los próximos días.
El subsidio que paga la Secretaría de Energía de la Nación a los fraccionadores y distribuidores sale de un fondo fiduciario que se financia mediante el incremento de la tarifa del metro cúbico de gas natural en boca de pozo y con eso se sustenta el programa “garrafas para todos”, que en su momento tuvo un objetivo de equidad, dado que fue pensado para compensar de alguna forma a las familias que no tenían el beneficio de contar con gas natural, cuya tarifa hoy sigue siendo baja con relación a lo que cuesta un tubo de 45 Kg de propano, que en el mercado local se comercializa a 550 pesos.
“Me están debiendo el subsidio desde agosto del año pasado, y tampoco lo actualizan y no podemos seguir trabajando a pérdida”, explicó Julio de la distribuidora El Abuelo, que dejó de comercializar la garrafa económica el último verano.
La crisis de Ucrania, agrega más incertidumbre al mercado, debido a que Argentina debe importar gas de Europa para poder hacer frente a la creciente demanda de gas butano en el invierno, porque la producción nacional no alcanza y la inestabilidad política que se vive entre Ucrania y Rusia, quienes proveen 84% del gas que consume Europa central, hace que el precio internacional se incremente.
“Nosotros estábamos recibiendo gas butano de Europa porque la producción nacional no alcanza para abastecer las necesidades del país durante el pico de consumo, así que esperamos nuevos aumentos”, agregó Julio.
Otro indicativo que genera más presión sobre la garrafa de 10 Kg es el fuerte incremento que sufrió el tubo de propano de 45 Kg. Esto hizo que mucha gente se volcara a la garrafa de 10 Kg. “El mercado de propano se hizo de butano”, agrega Walter de Extra Gas.
“El año pasado todas las distribuidoras vendían la garrafa a 16 pesos, y no había faltante, pero hoy la garrafa de 10 kg sigue estando a 16 pesos pero son pocos los que siguen vendiendo porque el panorama económico cambió. El año pasado no tenía una cola de doscientas personas como tengo ahora, a veces hay hasta cincuenta autos estacionados esperando por una garrafa”, explicó el comerciante.
“Yo no puedo abastecer de garrafas económicas a toda la ciudad, vendo hasta que se me termina y generalmente son doscientas por día y siempre me queda gente sin atender”.
A su vez reconoció que: “Estamos trabajando con 30 por ciento menos de las garrafas disponibles para la venta que el año pasado, porque la falta de gas es a nivel nacional, hoy tengo envases vacios en el depósito sin poder llenarlos porque no hay gas”.
Al ser consultado por si hay quejas de los consumidores el director municipal de Defensa de Consumidor, Pablo Luciano, dijo que: “Nosotros lo que hacemos es darle el 0800 para que se quejen al Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas), pero a reclamar a la oficina no viene nadie. Independientemente de eso hemos notificado del inconveniente tanto a Enargas como a la Secretaría de Energía de la Provincia que elevó el reclamo a la Secretaría de Energía de la Nación”.
En tanto aclaró que: “No tenemos competencia sobre esa cuestión porque en virtud de la ley que regula la comercialización de gas licuado y petróleo que es la 26.020 la competencia del control la tiene la Secretaría de Energía de la Nación”.
El futuro de la garrafa para todos divide las aguas en el Gobierno. El Ministerio de Economía de la Nación estuvo dispuesto a aumentar el precio para asumir una parte de la devaluación, pero también intentar establecer mecanismos para que las garrafas lleguen a los sectores de menores recursos, pero el Ministerio de Planificación no quiere hacer cambios. Mientras tanto los usuarios en la ciudad tendrán que seguir madrugando para conseguir su garrafa económica.
POR DIEGO ELGART
EL ARGENTINO
Para los sectores más bajos de la población, conseguir una garrafa de 10 Kg a 16 pesos, le significa un esfuerzo cada vez mayor. A partir de las 5:30 de la mañana la gente comienza a llegar cada día a Extra Gas en Acceso Sur y Lisandro de La Torre para obtener el tan preciado combustible, pero solo doscientos serán los afortunados.
El año pasado había seis distribuidoras que comercializaban esta garrafa en la ciudad, pero este invierno solo quedan tres, Total Gas, Extra Gas y Flama Gas, esta última está en la Ruta 14 a la altura de Sarandí, un lugar que para los sectores populares sin medio de movilidad es difícil de llegar.
Al ver el retraso en el pago del subsidio por la Secretaría de Energía de la Nación, y las dificultades que las distribuidoras tenían en conseguir gas butano, algunos comercios locales decidieron borrarse de la lista de comercios de garrafas para todos y renunciar al subsidio.
Hoy pasaron a vender el envase de 10 kg a 45 pesos y 60 pesos si es con envío a domicilio. Aunque todo indica que será difícil mantener esta tarifa, nuevos aumentos se esperan para los próximos días.
El subsidio que paga la Secretaría de Energía de la Nación a los fraccionadores y distribuidores sale de un fondo fiduciario que se financia mediante el incremento de la tarifa del metro cúbico de gas natural en boca de pozo y con eso se sustenta el programa “garrafas para todos”, que en su momento tuvo un objetivo de equidad, dado que fue pensado para compensar de alguna forma a las familias que no tenían el beneficio de contar con gas natural, cuya tarifa hoy sigue siendo baja con relación a lo que cuesta un tubo de 45 Kg de propano, que en el mercado local se comercializa a 550 pesos.
“Me están debiendo el subsidio desde agosto del año pasado, y tampoco lo actualizan y no podemos seguir trabajando a pérdida”, explicó Julio de la distribuidora El Abuelo, que dejó de comercializar la garrafa económica el último verano.
La crisis de Ucrania, agrega más incertidumbre al mercado, debido a que Argentina debe importar gas de Europa para poder hacer frente a la creciente demanda de gas butano en el invierno, porque la producción nacional no alcanza y la inestabilidad política que se vive entre Ucrania y Rusia, quienes proveen 84% del gas que consume Europa central, hace que el precio internacional se incremente.
“Nosotros estábamos recibiendo gas butano de Europa porque la producción nacional no alcanza para abastecer las necesidades del país durante el pico de consumo, así que esperamos nuevos aumentos”, agregó Julio.
Otro indicativo que genera más presión sobre la garrafa de 10 Kg es el fuerte incremento que sufrió el tubo de propano de 45 Kg. Esto hizo que mucha gente se volcara a la garrafa de 10 Kg. “El mercado de propano se hizo de butano”, agrega Walter de Extra Gas.
“El año pasado todas las distribuidoras vendían la garrafa a 16 pesos, y no había faltante, pero hoy la garrafa de 10 kg sigue estando a 16 pesos pero son pocos los que siguen vendiendo porque el panorama económico cambió. El año pasado no tenía una cola de doscientas personas como tengo ahora, a veces hay hasta cincuenta autos estacionados esperando por una garrafa”, explicó el comerciante.
“Yo no puedo abastecer de garrafas económicas a toda la ciudad, vendo hasta que se me termina y generalmente son doscientas por día y siempre me queda gente sin atender”.
A su vez reconoció que: “Estamos trabajando con 30 por ciento menos de las garrafas disponibles para la venta que el año pasado, porque la falta de gas es a nivel nacional, hoy tengo envases vacios en el depósito sin poder llenarlos porque no hay gas”.
Al ser consultado por si hay quejas de los consumidores el director municipal de Defensa de Consumidor, Pablo Luciano, dijo que: “Nosotros lo que hacemos es darle el 0800 para que se quejen al Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas), pero a reclamar a la oficina no viene nadie. Independientemente de eso hemos notificado del inconveniente tanto a Enargas como a la Secretaría de Energía de la Provincia que elevó el reclamo a la Secretaría de Energía de la Nación”.
En tanto aclaró que: “No tenemos competencia sobre esa cuestión porque en virtud de la ley que regula la comercialización de gas licuado y petróleo que es la 26.020 la competencia del control la tiene la Secretaría de Energía de la Nación”.
El futuro de la garrafa para todos divide las aguas en el Gobierno. El Ministerio de Economía de la Nación estuvo dispuesto a aumentar el precio para asumir una parte de la devaluación, pero también intentar establecer mecanismos para que las garrafas lleguen a los sectores de menores recursos, pero el Ministerio de Planificación no quiere hacer cambios. Mientras tanto los usuarios en la ciudad tendrán que seguir madrugando para conseguir su garrafa económica.
POR DIEGO ELGART
EL ARGENTINO
Este contenido no está abierto a comentarios