El paro docente y de ATE tuvo un dispar acatamiento, y los gremios marcharon a Casa de Gobierno

Las centrales de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer), y la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) se concentraron en la intersección de calles Buenos Aires y Alameda de la Federación; mientras que los sectores disidentes y que se autodefinen “críticos con la relación que mantienen las centrales y el gobierno” como Agmer Paraná y ATE municipal -entre otros-, lo hicieron en la Plaza 1° de Mayo. Ambas manifestaciones estuvieron pasadas las 11 en la explanada de Casa Gris, donde reclamaron reapertura de la discusión salarial. Allí hablaron Miguel Pelandino, secretario General de ATE Entre Ríos; y Fabián Peccín de Agmer, con la presencia del sector opositor interno; en tanto que cuando Luis Gálligo de la CTA Entre Ríos tomó el micrófono, la manifestación detractora se retiró del lugar, publicó Análisis Digital.
“Hay compañeros que no se bancan algunas cosas”. Así se despachó Miguel Pelandino (ATE) en medio de su discurso, cuando los sectores opositores internos de Agmer y ese gremio, presentes en el lugar, no lo escuchaban, agitaban banderas y cantaban. “Eso es real y lo tenemos que sufrir”, acotó Pelandino y abogó por “la unidad que tiene que estar por encima de todas las diferencias”.
El eje de su discurso estuvo centrado en los resultados de la Reforma Tributaria, “herramienta” alcanzada por las centrales sindicales al gobierno de Sergio Urribarri para mejorar la recaudación provincial, y que debía ser, teóricamente, destinada a recomponer el salario de los trabajadores. “En diciembre peligraba la paz social y por eso hubo decisiones políticas que mejoraron los salarios de un sector -la Policía-. En ese contexto, nosotros alcanzamos la Reforma Tributaria al gobierno como una herramienta para mejorar los salarios. Hoy queremos rediscutir esa herramienta pero no hemos sido escuchados”, justificó.
Advirtió que no pueden “llegar a la próxima paritaria si no hay una convocatoria antes” y sumó: “Valiero (Diego, ministro de Economía) dice que es imposible una recomposición, pero los ingresos alcanzan. Pasa que los destinan para otras cosas”, esbozó y completó: “Los trabajadores no nos vamos a resignar con el salario actual hasta abril. Creemos que si el gobernador toma la decisión política de mejorar los salarios, lo puede hacer”.
A su turno, el secretario General de Agmer, Fabián Peccín, le pidió al gobierno que “apure” las reformas necesarias para ser “progresista como pretende”. Sin embargo, hace más de diez años que gobierna el mismo partido político y además ya se está yendo.
“La devaluación de enero y la inflación ponen en jaque nuestras conquistas”, aseveró Peccín y solicitó identificar a los verdaderos “enemigos”.
“Hay que ver quiénes son nuestros enemigos”, instó. Dijo también que “en la Argentina de hoy hay una divisoria insoslayable: Patria o buitre”.