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Diario El Argentinoviernes 29 de marzo de 2024
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Atilio De Angeli: “Hay una orden del Banco Central de no darnos un peso a los productores sojeros”

Atilio De Angeli: “Hay una orden  del Banco Central de no darnos un  peso a los productores sojeros”

Desde el Banco Central, se autoriza a prestar dinero para la compra de implemento agrícolas, pero no para financiar los insumos de cara a la próxima campaña sojera, cuando el Estado Nacional necesita más que nunca dólares para financiar el déficit energético hacer frente a sus compromisos de deuda y frenar la caída de las reservas. Ya hay un 20 por ciento menos de intención de siembra de soja comparado con la campaña pasada.


Será difícil que en el Departamento Gualeguaychú se vean las mismas escenas que algunos productores de la provincia de Buenos Aires y Córdoba sufrieron en los últimos tiempos, al encontrarse con los silos bolsas rotos y los granos de soja esparcidos por el campo.
“Aquí ya no queda nada, a la soja el pequeño y mediano productor la vendió, solo las agrandes empresas pueden llegar a tener algo, pero los demás la tuvieron que vender para cancelar deudas”, explicó Atilio De Angeli, presidente de la Federación Agraria “Gualeguaychú”.
Sin embargo el miedo al boicot, no es hoy la principal preocupación de los productores del departamento Gualeguaychú, su principal problema será encontrar una entidad financiera que le solvente la próxima campaña de granos gruesos.
“Muchos productores no van a sembrar por la fuerte caída que tuvo el precio de la soja a nivel internacional y el alto precio de los insumos. No nos dan los números, no hay rentabilidad y esto provoca que la caída de intención de siembra sea de un 20 por ciento menos que el año pasado. Hay productores que arrendaban campos que lo devolvieron y quedarán improductivos”, dijo.
La caída de los precios se dio en la mayoría de los granos, y son pocas las opciones, para el sector de pequeños y medianos productores, que cada vez le está costando más poder conseguir un crédito para la compra de semilla, fertilizantes y combustible, con el objetivo de encarar la próxima siembra, vender los granos en la próxima campaña y así cumplir con sus compromisos, entre ellos el impuesto inmobiliario rural.
“Hoy –por ayer- me comunicaron del Banco Nación que hay una orden del Banco Central de no darnos un peso a los productores sojeros, pero yo no soy un productor sojero únicamente, siembro 200 a 300 hectáreas, con soja, pero también hago maíz, no nos pueden meter todos en la misma bolsa, el productor grande no necesita de los bancos para financiarse, solo lo necesitan para concretar un negocio, pero nosotros necesitamos que el Banco Nación sea una entidad financiera de desarrollo y no de asistencialismo como están haciendo ahora”.
El dirigente de la Federación Agraria, se mostró preocupado por la manera en que esta falta de financiamiento, afectará a las economías regionales.
“Esto provocará que afecte a los pueblos en forma directa e indirecta, ya vemos que no hay movimiento económico en las ciudad”, agregó.
El empresario inmobiliario local, Fernando Dacal, proyectaba sembrar 2 mil hectáreas este año a través de su sistema de arrendamiento compartido con otros productores, pero poco a poco algunos víctima del desaliento, desistieron, y hoy solo podrá sembrar mil hectáreas.
“Con la baja de los precios de los granos, el aumento de los insumos, y los problemas climáticos no tendremos rentabilidad. Hoy sembrar una hectárea de soja es inviable y más aún lo es sembrar una hectárea de maíz y los que sembramos trigo directamente ya perdemos”.
En cuanto al sostenimiento del sistema de arrendamiento, Dacal, manifestó que: “Hoy no se puede pagar más de 6 quintales un arrendamiento. Si una persona tiene un campo de cien hectáreas y lo arrienda a esos valores, sacará 70 mil pesos por año y apenas le alcanzará para pagar el impuesto inmobiliario rural, y el contexto actual desalienta a la siembra, ya tenemos el 40 por ciento de los campos en la provincia sin producir”, concretó.
 

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