La Policía Rural realizó procedimientos contra la venta irregular de carne
Como se ha venido informando, efectivos de las distintas brigadas departamentales dependientes de la Dirección de Prevención de Delitos Rurales, casi diariamente llevan adelante procedimientos vinculados con irregularidades sobre la venta ilegal de cortes cárnicos en clara contraposición a la Ley Provincial de Carne Nº 7292, poniendo en riesgo la salud pública.
En una carnicería de Colón los policías constataron cortes de carne vacuna debajo de una heladera, en clara intención de ocultarlos ante la presunción de una inspección brigadista. La carne –más de 15 kilos- estaba en mal estado y despedía olor nauseabundo.
Igual operativo se hizo en una carnicería de San José, donde al inspeccionarse la mercadería en la cámara de refrigeración se verificó la existencia de dos cuartos de carne bovina que tenían estampados con tinta azul el kilaje de las medias res a las que pertenecían, no concordando el peso de estos cortes cárnicos con los detallados en la documentación presentada por el comerciante. Aquí se decomisaron 45 kilos de carne vacuna que fue desnaturalizada por desconocer su origen.
La Brigada Villaguay, por su parte, detecto carne clandestina en mal estado que estaba lista para su comercialización.
Fue en una carnicería ubicada sobre calle Zaburlin, donde se procedió a inspeccionar los equipos de frío, constatando 15 kilos de carne bovina putrefacta, en estado de riesgo humano en caso de su potencial consumo. La carne mostraba signos evidentes de ser de procedencia clandestina.
Brigada Móvil
Otro procedimiento fue llevado adelante por la Brigada de Abigeato Móvil con asiento en la ciudad de La Paz, pero que es utilizada para recorrer la provincia realizando operativos sorpresas e itinerantes en puntos estratégicos en prevención del delito y detección de contravenciones.
Esta Brigada, en conjunto con personal de Fiscalización General de la Provincia, interceptó un camión Volkswagen 3180 de una empresa distribuidora de fiambres y chacinados de Paraná, en el que se transportaba para su comercialización varios embutidos.
En este caso se detectó que todo el movimiento de origen a destino, era clandestino, puesto que sin bien la unidad automotor tenia habilitación de SENASA, la mercadería no llevaba certificado sanitario, por ende su desconocida procedencia y calidad en cuanto a su sanidad.
Se procedió al decomiso de 70 kilogramos de chorizos que estaban fuera de las reglamentaciones vigentes por la Ley Provincial de Carnes.
Igual operativo se hizo en una carnicería de San José, donde al inspeccionarse la mercadería en la cámara de refrigeración se verificó la existencia de dos cuartos de carne bovina que tenían estampados con tinta azul el kilaje de las medias res a las que pertenecían, no concordando el peso de estos cortes cárnicos con los detallados en la documentación presentada por el comerciante. Aquí se decomisaron 45 kilos de carne vacuna que fue desnaturalizada por desconocer su origen.
La Brigada Villaguay, por su parte, detecto carne clandestina en mal estado que estaba lista para su comercialización.
Fue en una carnicería ubicada sobre calle Zaburlin, donde se procedió a inspeccionar los equipos de frío, constatando 15 kilos de carne bovina putrefacta, en estado de riesgo humano en caso de su potencial consumo. La carne mostraba signos evidentes de ser de procedencia clandestina.
Brigada Móvil
Otro procedimiento fue llevado adelante por la Brigada de Abigeato Móvil con asiento en la ciudad de La Paz, pero que es utilizada para recorrer la provincia realizando operativos sorpresas e itinerantes en puntos estratégicos en prevención del delito y detección de contravenciones.
Esta Brigada, en conjunto con personal de Fiscalización General de la Provincia, interceptó un camión Volkswagen 3180 de una empresa distribuidora de fiambres y chacinados de Paraná, en el que se transportaba para su comercialización varios embutidos.
En este caso se detectó que todo el movimiento de origen a destino, era clandestino, puesto que sin bien la unidad automotor tenia habilitación de SENASA, la mercadería no llevaba certificado sanitario, por ende su desconocida procedencia y calidad en cuanto a su sanidad.
Se procedió al decomiso de 70 kilogramos de chorizos que estaban fuera de las reglamentaciones vigentes por la Ley Provincial de Carnes.
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