Vigilia y ceremonia a 33 años de la Guerra de Malvinas

El acto será presidido por el intendente y estarán presentes los veteranos de guerra, los familiares de los caídos en ella y como han pasado treinta y tres años, también los de quienes tras regresar vivos aquel junio de 1982, hoy no están junto a sus compañeros. Y por ser una fecha de la que debe aprenderse y tener memoria, también rodearán el monumento de la plazoleta de Sáenz Peña y Avenida Luis N. Palma directivos, abanderados y escoltas de establecimientos educativos, efectivos de las fuerzas armadas y de seguridad y se espera que a comunidad esté allí, participando como se la espera esta noche, en la vigilia abierta que harán los ex combatientes en el mismo lugar.
Héctor Mista adelantó que para esta noche se ha convocado a artistas locales para matizar el encuentro no obstante, a la medianoche se dispararán algunas salvas, se cantarán el Himno nacional y la Marcha de Las Malvinas, para luego desconcentrarse.
¿Cómo espera el jueves? , preguntó EL ARGENTINO al Presidente del Centro de Veteranos de guerra y Héctor Mista respondió “me emociona el hecho de que se acuerden de los que han caído en Malvinas y nosotros, y al mismo tiempo, pienso que somos nosotros los que hacemos valer esto, tratando que no se disipe el tema de Malvinas, porque si no fuera por los veteranos, esto habría pasado al olvido. Lo mío es una mezcla de alegría, dolor y cansancio”.
“Está bien que se conmemore la fecha, pero el problema es que hay gente que estuvo en el conflicto y a la que no se trata como corresponde.
Cuando se dijo que se haría un censo de veteranos para que todos pasáramos por una junta médica, que analizaría nuestras condiciones tras el regreso y demás, creímos que sería así”.
Al decir esto, Mista no renegó de los beneficios económicos, pero sí lamentó que el censo registre, por ejemplo, el doble de veteranos de los que realmente fueron a la guerra “muchos de los que siguen padeciendo por eso”, como dijo, reclamando una vez más atención profesional para estos casos.

Un lugar para la memoria

Mista también refirió que a causa de carecer de fondos, no han terminado la sede del Centro de veteranos, ubicado en el predio adquirido hace un tiempo.
“Tenemos la personería jurídica, con fondos propios pagamos el tinglado que levantamos en Rubén Darío, entre las calles Presidente Perón y Eva Perón, comprado con un subsidio que gestionó Guillermo Guastavino pero no podemos construir. Por eso, a medida que los vecinos levantan su medianera, nos cubren una parte a nosotros”, señaló.
Aquí lamentó la pérdida de documentación valiosísima, cuando debieron dejar la casa de Maestra Piccini -frente al corsodromo- y llevar todo a un stud, único espacio del que disponían en el momento.
“Estoy cansado”, dijo Mista, para agregar que esto no es sólo a causa de golpear puertas de oficinas y despachos sino también por lo que le sucede con sus pares, los integrantes del Centro de veteranos, desanimados a causa de la indiferencia que no repara en consecuencias y que los hace sentirse solos.
Mucho de lo que les pasa a los veteranos de Gualeguaychú será reseñado en el acto de mañana por Dionisio Petisco, uno de los que volvieron de Malvinas, que se referirá a la fecha y al dolor -siempre presente- de haber vivido una guerra.