Monseñor Faifer habló con los periodistas sobre su encuentro con el Papa Francisco
En una rueda de prensa celebrada en la curia del obispado de Goya, el obispo diocesano Monseñor Ricardo Oscar Faifer, contó detalles de su reciente encuentro en el Vaticano con el papa Francisco. Destacó que Jorge Bergoglio lo recibió con el buen humor que lo caracteriza, hasta le hizo algún comentario divertido, y que le agradeció que le haya designado un obispo coadjutor.
Monseñor Faifer señaló: “Me quedé tres días en Roma para participar de la audiencia pública con el Santo Padre Francisco. El miércoles 15 compartimos con muchísima gente de todo el mundo que a las 10 de la mañana llenaba por completo la plaza de San Pedro. Recé mucho por toda la diócesis, por cada uno de los hermanos que me encomendó el Señor. Como pastor trato de cuidar de mis ovejas; ojalá pudiese conocerlos más a todos, pero lo que compartió con el pueblo de Dios de esta diócesis lo tengo en el corazón y los llevé a todos”.
Al comentar cómo fue la reunión con el Papa Francisco, dijo: “Él sigue siendo la misma persona que en el encuentro personal, es muy agradable y no pierde el humor porque yo le di un beso en la mano, al anillo, sabiendo que en la persona del Papa está el sucesor de Pedro, desde el punto de vista de la fe es muy hermoso, un obispo que se encuentra con el sucesor de Pedro y detrás de mí toda la diócesis diciendo que queremos la unidad de la Iglesia”.
“Sin perder el humor me dijo: “¿Qué haces por acá?”. Él sabía el motivo por el cual yo andaba por Europa. “Ahora que tenés coadjutor podés salir”. “Precisamente -le digo yo- quiero agradecerle el coadjutor que nos envió”. Y con ese humor delicado que tiene, me dijo: “Les mandé un buen tipo”.
Fue una entrevista muy breve porque, lógicamente, hay muchos que están esperando. Nos dio la bendición y me retiré”, relató monseñor Faifer.
“Así que con esta actitud le manifesté el cariño que le tenemos y él dijo que nos recuerda con mucho cariño. Lógicamente, te queda un gusto por más, pero no faltará ocasión en la que podamos compartir con más tiempo”, dijo monseñor Faifer. “Eso fue todo -señaló el obispo-, pero fue intenso, hermoso. Lo importante es que tenemos que respaldar el magisterio del Papa con los compromisos cotidianos de nuestra vida cristiana para anunciar la alegría del Evangelio del Señor”.
Agregó que “yo recibí esta gracia hermosa tan grande, por una invitación de los Amigos del Camino Neocatecumenal que me pagaron el viaje para ir a hacer una experiencia a Tierra Santa en la semana de la Pascua. Había unos 170 obispos de todo el mundo con otros obispos compartiendo en una casa que tienen en el norte de la Galilea. Visitamos algunos de los lugares santos, no se puede ver todo en tan poco tiempo, y de regreso me quedé tres días en Roma para poder participar en la audiencia pública con el Papa Francisco”, publicó la Agencia Informativa Católica Argentina (AICA).
Al comentar cómo fue la reunión con el Papa Francisco, dijo: “Él sigue siendo la misma persona que en el encuentro personal, es muy agradable y no pierde el humor porque yo le di un beso en la mano, al anillo, sabiendo que en la persona del Papa está el sucesor de Pedro, desde el punto de vista de la fe es muy hermoso, un obispo que se encuentra con el sucesor de Pedro y detrás de mí toda la diócesis diciendo que queremos la unidad de la Iglesia”.
“Sin perder el humor me dijo: “¿Qué haces por acá?”. Él sabía el motivo por el cual yo andaba por Europa. “Ahora que tenés coadjutor podés salir”. “Precisamente -le digo yo- quiero agradecerle el coadjutor que nos envió”. Y con ese humor delicado que tiene, me dijo: “Les mandé un buen tipo”.
Fue una entrevista muy breve porque, lógicamente, hay muchos que están esperando. Nos dio la bendición y me retiré”, relató monseñor Faifer.
“Así que con esta actitud le manifesté el cariño que le tenemos y él dijo que nos recuerda con mucho cariño. Lógicamente, te queda un gusto por más, pero no faltará ocasión en la que podamos compartir con más tiempo”, dijo monseñor Faifer. “Eso fue todo -señaló el obispo-, pero fue intenso, hermoso. Lo importante es que tenemos que respaldar el magisterio del Papa con los compromisos cotidianos de nuestra vida cristiana para anunciar la alegría del Evangelio del Señor”.
Agregó que “yo recibí esta gracia hermosa tan grande, por una invitación de los Amigos del Camino Neocatecumenal que me pagaron el viaje para ir a hacer una experiencia a Tierra Santa en la semana de la Pascua. Había unos 170 obispos de todo el mundo con otros obispos compartiendo en una casa que tienen en el norte de la Galilea. Visitamos algunos de los lugares santos, no se puede ver todo en tan poco tiempo, y de regreso me quedé tres días en Roma para poder participar en la audiencia pública con el Papa Francisco”, publicó la Agencia Informativa Católica Argentina (AICA).
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