Nunca es tarde

A través de esta iniciativa municipal, muchos ciudadanos que por diferentes razones socioeconómicas y culturales no tuvieron la oportunidad de ser escolarizados, o que lo hicieron de manera parcial puedan dar los primeros pasos en el aprendizaje de la lectoescritura
Y cuando se habla de la inclusión a través de la educación no sólo se habla de los niños y jóvenes sino también de los adultos y adultos mayores que aún no han aprendido a leer y a escribir, teniendo en cuenta que estas herramientas son fundamentales para la inserción y el desarrollo del hombre en la sociedad.
Por eso esta acción que por el momento se lleva a cabo en los barrios Munilla y La Cuchilla, a través de las cuales el Estado llega de manera directa a los hogares de esas personas que tienen interés en ser alfabetizados, merece ser saludado y replicado en otras zonas de la ciudad.
Si bien la idea del programa Nunca es tarde es brindarles las herramientas básicas como para aprender a leer y escribir, no deja de ser una manera de incentivarlos y atraerlos a que ellos son capaces de completar sus estudios a través de los diferentes programas de educación de adultos formales que existen en la ciudad, a través de la Departamental del Escuelas.
También es importante destacar que de esta iniciativa forma parte el ISPED, sumando
alfabetizadores que son estudiantes de la carrera de Técnico Superior en Niñez, Adolescencia y Familia. Por lo que el enriquecimiento es mutuo.
“Nunca es tarde” es una manera de decir que siempre y cuando se tenga vivo el deseo de aprender, todo es posible.