El drama de los refugiados
Incapaz de respirar por el humo. Asustado por el ruido de los disparos. Empapado por el mar. Musa Khalifa, un nigeriano de 20 años, explica que también se arrojó ayer al mar Mediterráneo para llegar a la playa de Tarajal (Ceuta).
Pero fracasó. “Los guardias civiles (españoles) lanzaron gas lacrimógeno al agua, donde estábamos. Muchos de mis compañeros se desmayaron al inhalarlo. Los españoles los mataron”, subrayó el joven en referencia al menos a 14 subsaharianos que se calcula perdieron la vida ayer, cuando más de 300 trataron de cruzar la frontera con Marruecos.
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