Industria turística: “Sabemos que el 2020 ya está perdido”, dijo Giachello

 

El sector turístico local se encamina a una quiebra generalizada y un contexto de alto endeudamiento. La mercadería se les venció, no pueden hacer frente al costo de los alquileres y pese a que algunos recibieron la ayuda del Gobierno Nacional para pagar parte de los sueldos, con suerte la industria turística comenzará a normalizarse lentamente a partir de la primavera.

 

El presidente  de la Asociación de Hoteleros y Gastronómicos de la ciudad, Marcelo Giachello, confirmó que entre hoy y mañana la Federación de Empresaria Hoteleros y Gastronómico de la República Argentina (FEHGRA) definirá el protocolo de bioseguridad para gestionar aperturas de hoteles y restaurantes.

“Una vez que lo tengamos lo vamos a presentar a los socios y luego nos sentaremos a discutirlo con el Municipio a través del COES”, expresó Giachello a EL ARGENTINO.

“Hoy es muy difícil para la actividad poder reactivarla, porque no sabemos cuántas mesas podrá tener disponible un restaurante con el fin de cumplir las medidas de distanciamiento,  y por otro lado tendremos que preguntarnos si será rentable para el empresario gastronómico poder trabajar con la mitad o menos de la mitad de la capacidad disponible. Lo mismo corre para los hoteles”, agregó.

Resaltó que hay mucha ansiedad entre los hoteleros de comenzar a trabajar, al ser el sector que fueron los primeros en cerrar y serán los últimos en lograr una reapertura definitiva, una vez que se el coronavirus quede definitivamente controlado.

“El Municipio recién el jueves permitió abrir los comercios, y calculamos que la semana que viene se va a sentar a dialogar con nosotros. Tenemos que reinventarnos, el delivery no está funcionando para los restaurantes, solo puede ser útil para un emprendimiento familiar donde sus propietarios sepan cocinar. Generalmente los empresarios gastronómicos no están en la cocina , para poder hacer delivery hay que tener dos empleados por lo menos y es costoso para la poca actividad que hay”, agregó.

“Todo el mundo me pregunta con qué herramienta nos vamos a sentar a hablar con el Municipio, hoy no tenemos ninguna, lo único que podemos pedirle es que nos refinancie la deuda impositiva o que no nos cobre, pero después no tenemos las medidas de bioseguridad establecidas para el sector, con el fin de comenzar una apertura gradual de hoteles y restaurantes en la ciudad”.

Giachello resaltó que: “El sector turístico genera miles de puestos de trabajo en la provincia, y hoy este sector no está en la mesa de debate del gobernador y el Presidente. Ni siquiera sabemos si los complejos termales se van a poder habilitar para la temporada de termas de invierno. Para nosotros el 2020 está perdido, desde FEHGRA estamos proyectando una apertura gradual a partir de septiembre, pero serán paliativos”.

El empresario gastronómico advirtió además, la dificultad que están viviendo las firmas que están alquilando locales en la Costanera, con alquileres que de por sí ya son altos, y hoy no pueden pagarlos porque no facturan desde la segunda quincena de marzo.

Una vez que el sector comience a normalizarse, va iniciar con deudas, impositivas, salariales, de alquiler y necesitad de contar con dinero líquido para poder hacerse de todos los insumos que se necesitarán para el funcionamiento de los restaurantes y los hoteles.

“Nuestra vista ahora está puesta en la provincia de Jujuy, que ya comenzó a funcionar su sector turístico, y para nosotros será algo ejemplificador hacia todo el país. Todos los gobernadores, tiene miedo y los intendentes también, pero con ese miedo frenaron el país  y volver a ponerlo en marcha llevará tiempo”, agregó.

 “Nosotros sabemos que vamos a terminar el año con muchas deudas y la ayuda crediticia tendría que ser a tasa cero, porque no vamos a poder pagar intereses”, resaltó.

“Lo único que tenemos para agradecer es que tuvimos una buena temporada estival y las primeras semanas de la cuarentena la pudimos financiar con nuestros ahorros, pero a esta altura ya no hay reservas y es por eso que el Gobierno Nacional tiene que comenzar a abrir la economía, de lo contrario se hará de hecho y los hoteleros correrán el riesgo de ser clausurados y que le abran una causa penal por violar la cuarentena si trabajan a escondidas. No queremos que eso pase, por los riesgos sanitarios que también puede ocasionar, además de las consecuencias judiciales que puede llegar a tener los propietarios”.