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Por la pandemia, falta personal policial para controlar la circulación de motos
En las calles de la ciudad se nota un descenso de los controles de motos, y un crecimiento de la circulación irregular.
Desde hace días no se observan controles de motos en las calles. La falta de controles lleva a un relajamiento y violación de las leyes de tránsito y los vecinos muestran su preocupación ante el crecimiento de la circulación con conductores sin cascos, en otros con escapes libres generando innecesarios ruidos molestos, e incluso hasta corriendo “picadas”, poniendo en riesgo la vida propia y la de terceros.
El director de Tránsito Municipal, Oscar Navone, dialogó con EL ARGENTINO y explicó que en la actualidad los controles están en poder de la Policía; mientras que los agentes de Tránsito sólo cumplen la función de “apoyar” en los procedimientos.
Por su parte, el jefe Departamental de Policía, comisario mayor Cristian Alejandro Hormachea, explicó a EL ARGENTINO que las tareas de controles se realizan en conjunto, y que, si bien la policía realiza los controles, no pueden trabajar con toda su capacidad. “Tenemos personas de riesgo y algunas aisladas, por lo que no estamos trabajando con el 100 por ciento de la capacidad, como nos gustaría”.
Hormachea, que conoce el aislamiento por experiencia propia, comentó que los aislados de la Policía son cada vez más y que el personal se encuentra reducido. Además, agregó que, como policías, cumplen otras tareas que nada tienen que ver con los controles de vehículos y, por lo tanto, se les dificulta realizar todos los servicios que deben con el personal reducido.
Picadas ilegales
EL ARGENTINO recibe numerosas denuncias de los vecinos, advirtiendo la realización de “picadas” en la zona de Urquiza al Oeste, y el director de Tránsito reconoció que se trataron en conjunto con la policía.
Esto fue confirmado por Hormachea, quien informó que en los últimos días incrementaron la presencia policial en la zona en los horarios del mediodía. “Hicimos operativos en la zona de Urquiza, tratamos de tener más presencia policial en los horarios del mediodía”, expresó.
En agosto de 2008 se modificó el Código Penal a través de la Ley N° 26.362, en la cual a las “picadas” de motos se las considera en de la categoría de “peligro abstracto”, al hablar de delitos en los que no hace falta que se cometa un daño para que sean intervenidos.
La norma dictada por el Congreso castiga el simple hecho de "crear una situación de peligro" para la vida o la integridad física de las personas.
El decreto 2675
Hormachea recalcó que la policía está trabajando bajo el Decreto N° 2675, que da autorización a las fuerzas policiales a realizar operativos de control de motos desde 2014.
El decreto provincial se encuadra en la legislación de Seguridad Vial vigente y permite que la Policía pueda actuar ante cualquier infracción que atente contra la seguridad, así como también les otorga el poder de retener las motos que circulan en condiciones irregulares.
Al momento de la derogación del Decreto, el entonces ministro de Gobierno y actual intendente de Paraná, Adán Humberto Bahl, expresó a través de la prensa del Ministerio de Gobierno que: “hasta el momento, detener a un motociclista era potestad exclusiva de los gobiernos locales, de los municipios, y esto limitaba el accionar de la policía que es la que se encuentra efectivamente en la calle las 24hs, los 365 días del año, preparada para prevenir el delito y para actuar en distintas situaciones que suceden en la vía pública y que afectan la tranquilidad de los vecinos”.
Está estipulado que la Policía está facultada para detener a conductores que no lleven el casco puesto y ante la falta de documentación, como registros, tarjeta, seguro e irregularidades en las luces.
En esa línea, independientemente de un operativo específico, un móvil policial puede detener y demorar a un conductor que cometa una infracción o circule de manera incorrecta. Todo esto con el objetivo de evitar y disminuir la cantidad de accidentes.