La actualidad de las librerías locales

Con bajas en ventas, las librerías de Gualeguaychú están transitando un momento difícil.

 

En medio del contexto de pandemia, al igual que los demás comercios, las librerías se vieron forzadas a cerrar sus puertas por un período de tiempo que fue perjudicial para su economía.

Sobre esto, EL ARGENTINO dialogó con las tres librerías más reconocidas de la ciudad.

Gustavo Risso, de la librería "Fray Mocho" expresó: "Venimos mal, las ventas cayeron un  60 por ciento aproximadamente".

"Esta época del año nunca fue buena para el rubro, pero ahora más que nunca se nota muchísimo la poca cantidad de gente que anda en la calle", sumó y detalló: "Cuando no estamos en época de demanda, como lo es la escolar, dependemos mucho de que la gente circule y también del  poder adquisitivo que tengan. Actualmente, ninguna de las dos cosas está funcionando, así que venimos bastante mal, vendemos un 35 o 40 por ciento de libros con respecto a los años anteriores".

Por su parte, Ana García, de la librería "Entre libros", coincidió: "Nuestra actualidad es muy mala y con poco movimiento", y asumió que esto afectó "bastante" en términos económicos.

Incluso, Risso afirmó que si bien Fray Mocho tiene muy buenas ventas en la primera parte del año, ya que se junta el turismo y el comienzo de las clases, este año fue muy distinto. “Con el turismo anda mucha gente que compra libros para el verano, tanto los que salen de la ciudad como los que vienen; y después seguimos con la época escolar”. Si bien este año recibieron compras de parte del turismo, no sucedió así con las ventas de manuales y libros para estudiantes: “Fue un año malísimo y el pronóstico para el que viene, si no hay turismo o se demoran las clases, lamentablemente se ve igual de malo”.

En otra línea, Juan Selva, dueño de “Rayuela”, declaró que las ventas no fueron negativas en su librería y que, al contrario, en algunos casos, hasta subió la cantidad de lectores. “El panorama no es de caída sino de sostenimiento e incluso en algunos casos con un ascenso de nuevos lectores”.

“Rayuela tiene 28 años ya, y la situación actual en la pandemia es que mucha gente está leyendo más porque, a mi parecer, tienen más tiempo para hacerlo; por lo que mientras uno tenga los recursos para comprar libros, lo hacen”, profundizó.

A pesar de esto, Selva asumió que cuando cerraron sus puertas a principio de año, la situación fue diferente: “Cuando tuvimos la librería cerrada se complicó muchísimo, pero mientras estuvimos abiertos al público sí vendimos bastante”, e incluso, comentó que se activaron las consultas por redes sociales: “Antes casi no existían pero ahora el tema redes se tornó muy fuerte para consultas y pedidos”.

 

Los hábitos de lectura

 

En cuanto a cambios en los hábitos de lectura de la población, Risso afirmó: “No creo que se hayan cambiado los hábitos, tengo muchos clientes adolescentes y pre adolescentes que vienen a buscar el papel. Lo que sí cambió es el poder adquisitivo”.

“El lector siempre es el mismo pero no hay plata para comprar los libros, entonces por ahí recurren a archivos digitales en formato ‘pdf’, pero todos conocemos la incomodidad de leer en una pantalla, así sea un dispositivo de último modelo. Cuando tenemos un libro no necesitás batería ni conexión a nada, simplemente lo agarrás y te vas abajo de un árbol en el medio del campo y lo leés”, ahondó.

Incluso, comentó que en tiempos anteriores, uno de cada cuatro personas que consultaban precios compraba el libro, mientras que en la actualidad lo hace solo uno de cada diez. “No es que les parezca caro sino que no tienen el dinero porque los sueldos rinden cada vez menos”, se sinceró.

 

La suba de precios

 

En tanto, García aseguró: “Los precios aumentaron un 25 o quizás un 30 por ciento con respecto a febrero”, y Selva coincidió: “Es permanente la suba de precios de los libros”.

Para Risso, el aspecto de los aumentos depende desde qué lado se lo mire: “Los libros van acompañando la inflación pero depende de cómo lo veamos: históricamente cualquier libro costó, si lo pasamos a dólares, entre 15 y 20; sin embargo, hoy en día cualquier novela de moda ronda entre los 6 y 9 dólares. Entonces no es que el libro sea caro, el problema es nuestro poder adquisitivo, porque cualquier persona que venga de otro lugar va a encontrar todo regalado acá”.

 

Los géneros más vendidos

 

En cuanto a los libros que la gente más adquiere en esta pandemia, Selva detalló: “He verificado que se vendieron muchos de entretenimiento, para hacer actividades, tanto para chicos como para adultos, sobre todo crucigramas, y también novelas. En este rubro, Rayuela no tuvo una caída en las ventas”.

En la librería Fray Mocho, los libros más vendidos fueron las novelas: “De suspenso, románticas, históricas y románticas, y libros de autoayuda y superación personal. Y después todos los que están de moda y van saliendo, como los de psicología de Rolón, o libros de actualidad política y revisión histórica”.

Y para concluir, Risso informó: “Además se reactivó de manera sorprendente la venta de los libros de Harry Potter, que estuvieron muy de moda hace 10 o 15 años, hasta que se terminó toda la saga, pero ahora se reactivó nuevamente como en los primeros tiempos”.