Turismo en Semana Santa: Entre el jueves y el viernes ingresaron 10 mil personas a la ciudad

De acuerdo a datos preliminares relevados por la Asociación de Hoteleros y Gastronómicos de la ciudad estima que entre el jueves y el viernes ingresaron 10 mil turistas, los hoteles están al 80 por ciento de ocupación y los dos complejos termales al cien por ciento de su capacidad.

 

Para la industria turística local es todo un logro haber podido llegar a Semana Santa, en un contexto de crecimiento de contagios diarios de Covid en el país, y a sabiendas que la mayor cantidad de visitantes provienen de provincia de Buenos Aires y Capital Federal, los territorios con mayor circulación viral del país.

Con todo el entrenamiento y el éxito de la implementación de los protocolos de bioseguridad que se implementaron durante el verano, los hoteleros y gastronómicos comenzaron esta Semana Santa con una buena rotación de mesas y buen nivel de ocupación, en el marco de esta nueva normalidad. 

En las últimas 48 horas ingresaron 10 mil turistas a la ciudad, la ocupación hotelera está en un 80 por ciento, ambos complejos termales el de Gualeyán y Pueblo Belgrano están al máximo de su ocupación permitida para poder respetar los protocolos de bioseguridad y en Ñandubaysal ayer a la tarde había más de 60 unidades de acampe.

Agustín Rosado empresario gastronómico local e integrante de la  Asociación de Hoteleros y Gastronómico de la ciudad, explicó a EL ARGENTINO que: “El jueves a la noche se vio un lindo movimiento y el viernes comenzaron a ingresar muchos vehículos. Semana Santa siempre arranca el viernes para el turismo”.

En tanto resaltó que: “No podemos compararlo con el fin de semana largo del Carnaval, es como si fuera un fin de semana de febrero, Semana Santa ya no son cuatro días de vacaciones, hay gente que trabaja el jueves y el sábado en Buenos Aires y se hace una escapada. Esperamos un buen sábado a la noche y el domingo al mediodía”.

El hecho de que la veda comience a las 2 de la mañana, el sector gastronómico podría tener más tiempo para rotar las mesas, “pero con este clima donde comienza a hacer un poco de frio a la noche, la verdad es que no vale la pena cerrar a esa hora, ya para la 1 de la mañana la mayor parte de los espacios gastronómicos cierran, no así las cervecerías artesanales”, agregó.

Rosado se mostró preocupado por el futuro de la actividad tras Semana Santa.

“Luego tenemos que enfrentar lo que acontecerá el lunes, cuáles serán las nuevas medidas el Gobierno Nacional para ponerle un freno al incremento de los contagios diarios en todo el país.

“La adrenalina y la angustia que esto genera entre los empresarios del sector es muy grande. Terminamos la temporada estival con un 40 por ciento por debajo de las ventas con relación al verano 201920/2020, pero de todos modos debemos reconocer que pudimos trabajar y hubiera podido ser peor. Es por eso que hay una conformidad y con Semana Santa podemos decir que firmamos el empate.

Pudimos pasar la temporada, no fue tan mala después de todo. La gente se quedó contenta, y podemos decir que en el medio de la nueva normalidad fue una temporada exitosa y al haber llegado hasta Semana Santa también fue todo un logro para el sector gastronómico. No así para los hoteleros que terminaron muy complicados y lo estarán más aún”.

Al finalizar Rosado resaltó que: “Este año quedó más a la vista que nunca que el turismo es una verdadera industria. Al no haber estado el Carnaval cuánta gente quedó sin trabajar, por las playas que no abrieron cuántas personas no pudieron rebuscársela, como también afectó al comercio minorista. El turismo desparrama dinero por todos lados”, concretó.