El rol silencioso y fundamental del laboratorio de urgencias del Hospital Centenario

A fines de la década del 80 el Laboratorio Central, del cual depende el actual Laboratorio de Urgencias, trabajaba solamente de mañana y el resto del día se realizaban guardias pasivas. Es así que “todos los bioquímicos compartían esas guardias y en caso de urgencias se acercaban al Hospital o bien se les enviaban las muestras a sus laboratorios particulares”, contó la Bioquímica María Celeste Díaz.

Agregó que “en aquellos años y tras el transcurso del  tiempo se vio la necesidad de implementar una terapia intensiva dado el crecimiento que estaba teniendo el Hospital, y  con el trabajo de durante las 24 hs con pacientes internados y en situación crítica, era necesario que haya un laboratorio que asista permanentemente”.

“Así se conformó en 1996 la terapia intensiva y un laboratorio de guardia, como se llamó en ese momento y algunos de los que estábamos en laboratorio central cumpliendo funciones  de planta pasamos al de guardia”, especificó.

Asimismo, destacó la complejidad existente, ya que los equipos con los que se trabajaba en ese momento eran usados y eso traía continuos inconvenientes, además de los insumos que se debían importar. “Pero además nosotros tampoco estábamos preparados cien por ciento para manejar esas cuestiones, por lo que realizamos un curso intensivo de la SATI para laboratorios de urgencia haciendo un esfuerzo descomunal, trabajando y viajando a formarnos a Buenos Aires”, contó.

Así fue que el personal de laboratorio de guardia se especializó y  trabaja con profesionales altamente capacitados y comprometidos con su labor diaria.

 

El laboratorio actual

 

Bajo la dirección del Dr. Ghiglione Bocalandro, se realizó una redistribución de servicios y de sus lugares, y el Laboratorio de Guardia salió del espacio físico del Laboratorio Central y se trasladó a donde se encuentra actualmente.

“En este camino se han renovado equipos y ha crecido decididamente la demanda del laboratorio de guardia, siendo el único laboratorio público que trabaja las 24 hs y atiende a todo el departamento Gualeguaychú, recibiendo urgencias de todas las localidades adyacentes”, precisó Díaz.

Y añadió que: “Así como creció la ciudad creció la demanda ya que las patologías se han multiplicado pero también lo ha hecho la oferta de análisis que se hacen. En principio se hacían análisis clínicos básicos y de urgencias para colaborar en el diagnóstico de una patología o la intervención en diversas situaciones”.

También explicó que desde un primer momento se realizó el análisis Estado Ácido Base, que sirve para conocer la saturación en sangre, viéndose con el  tiempo que este mismo daba las certezas en los valores que se entregaban de una muestra arterial. “Este análisis se transformó en la estrella en la UTI COVID para conocer la saturación de oxígeno en pacientes críticos”, remarcó.

“Y en el último tiempo incorporamos otros análisis de alta complejidad, por sus costos que requieren una aparatología especial como fue la troponina para situaciones de infarto o cuando hay posible código rojo, procalcitonina, ferritina y dimero D,  que fue incorporado el año pasado”, relató.

 

Actualmente, en el laboratorio de urgencias trabajan los bioquímicos Juan José Razetto, María Belén Salvucci, María Celeste Díaz, Orlando Piaggio, María José Dellachiesa, Jorge Giunti y Sebastián Piñeyro.

 

Su preponderante rol en pandemia

 

Con la llegada del 2020 y el COVID-19, la Bioquímica Díaz destacó que tuvieron que especializarse y formarse para estar a la altura de las circunstancias que se les requerían. “Cambio mucho nuestra forma de trabajar, desde los protocolos que tuvimos que aprender y poner en funcionamiento, hasta el  distanciamiento y la higiene, que es permanente acá en el laboratorio”, recalcó.

Asimismo, agregó que también tuvieron que encargarse el año pasado del arreglo y mantenimiento de los equipos automatizados, ya que el servicio  técnico no podía viajar y eso les requirió hacerse cargo de cambiar lo necesario en bioingieniería para poder seguir utilizándolos.

“Además nos acompaña un grupo de técnicos que son de primera y han crecido junto a nosotros. Son los que mantienen toda la infraestructura respecto a que tengamos todos los insumos para  trabajar y que esté siempre a disposición”, agregó.

En este contexto, el Laboratorio de Urgencias se vio en la necesidad de incorporar un profesional más para la asistencia en las salas de aislamiento y en la nueva UTI COVID ya que un solo bioquímico no daba abasto para atender las demandas de las 24 hs.

Así fue que se incorporó el Bioquímico Iván Pérez Duarte a trabajar exclusivamente en la extracción de sangre y posterior procesamiento de los pacientes COVID. “El primer mes hubo que buscar una metodología adecuada entre paciente y paciente para disminuir los tiempos de extracción ya que las determinaciones que los médicos las necesitan lo más rápido posible, por ejemplo la de estado ácido base tiene un tiempo específico para ser procesada, y es una de las más importantes”, explicó Pérez Duarte.

“Actualmente los médicos tienen esos resultados subidos al sistema en menos de una hora, con lo cual pueden rápidamente desarrollan conjuntamente con todo el equipo la terapéutica de esos pacientes que se encuentran en estado moderado o crítico”, detalló.

Por último, destacó que el rol del bioquímico no solo se limita al diagnóstico de que si una persona está cursando o curso una patología por COVID, sino también en lo que respecta al  seguimiento de estas personas internadas en estado crítico y el trabajo del laboratorio en la precisión y rapidez de los resultados que se brindan al equipo médico para estabilizar al paciente y su pronta recuperación.

 

Al servicio de la comunidad

 

El Bioquímico Orlando Piaggio hace 29 años que trabaja en el Hospital y destacó  en referencia al contexto actual que: “estamos al nivel de cualquier hospital o clínica de Buenos Aires y los médicos terapistas cuentan con los parámetros necesarios para su trabajo, por eso para nosotros es un orgullo realizar este trabajo”.

Detalló que en el Laboratorio de Urgencias también se atiende a la terapia intensiva polivalente,  terapia de neonatología, pediatría, maternidad, oncología y todas las salas comunes que se encuentran en el Bicentenario.

“Es un trabajo que no se ve, pero estamos las 24 hs. y la ciudad puede dormir tranquila que si le pasa algo que en la parte publica va a esta atendida”, aseguró, y consideró que “es una labor que la hacemos a gusto, sabemos que estamos sirviendo a la comunidad”.

 

En este sentido, el Laboratorio de Urgencias destaca el trabajo de todos sus profesionales y agradece además al personal del resto de las salas del Hospital, que en repetidas ocasiones colaboran en el funcionamiento del mismo todas las especialidades.

Y concluyen en un pedido de solidaridad a toda la comunidad: “Acá estamos  trabajando con el barbijo las 24 hs, y  duele muchísimo que la gente no los utilice por un tiempo mucho menor, y no se lo ponga para contribuir con la prevención.  Es un llamado a seguir cuidándonos entre todos”.