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Capturaron a una octava persona como consecuencia del golpe al narcotráfico
En el marco de los procedimientos ordenado por el Juzgado Federal, a cargo del juez Hernán Viri, respecto a la investigación que se viene desarrollando ante una supuesta infracción a la Ley Nacional N° 23.737, se realizaron en las últimas horas otros dos procedimientos por parte del personal policial, donde se logró una nueva detención y más secuestro de elementos de interés para la causa.
El primero de ellos tuvo lugar en la ciudad de Colón, donde personal de la División de Toxicología de esa Jefatura Departamental de Policía, logró la localización y detención de un hombre de 24 años, sobre el cual pesaba un pedido de detención emitido por la magistratura interviniente, a raíz de no haber sido hallado en su domicilio al momento de ejecutase las medidas de allanamiento, que tuvieron lugar el pasado jueves.
Esta persona fue trasladada por una comisión policial hasta la sede de la Jefatura Departamental de Gualeguaychú donde quedó alojado a disposición de la Justicia Federal.
El segundo procedimiento consistió en un allanamiento de un garaje ubicado en calle Perón al 400 aproximadamente, donde se efectivizó el secuestro de una embarcación, tipo lancha, para la cual persistía el requerimiento judicial donde estuviera depositada.
Allanamientos
En la edición del viernes pasado de EL ARGENTINO, se dio cuenta cómo la ciudad había amanecido el jueves 1° de julio agitada por un intenso movimiento de personal policial, quienes, por orden del Juzgado Federal de Primera Instancia de la jurisdicción, realizó varios allanamientos, produjo detenciones e incluso se ordenaron procedimientos en la Provincia de Buenos Aires, como consecuencia de un estado de investigación que permitió desbaratar a una peligrosa banda de narcotraficantes que operaba en Gualeguaychú.
Las actuaciones fueron ordenadas por el juez Federal de Primera Instancia de Gualeguaychú, Hernán Viri, canalizadas a través de la Secretaría Penal a cargo de Juan Francisco Grego e impulsada por el personal de la Jefatura Departamental de Policía a cargo del comisario mayor Cristian Alejandro Hormachea; enmarcadas en una causa que en principio es por tráfico y venta de estupefacientes.
El estado de sospecha era investigado por la Policía Departamental desde hace varios meses, y se pudo identificar y establecer los vínculos que varias personas tenían con la actividad ilícita de comercialización de estupefacientes.
Los primeros movimientos –según pudo recrear EL ARGENTINO en base a fuentes de la investigación- comenzaron minutos antes de las 4. Como es de rigor en estos casos, al personal policial convocado se les retiraron los celulares para evitar cualquier filtración de la información, se los puso en estado de situación y se dieron las directivas a quienes iban a estar en el primer cordón de las actuaciones y un segundo grupo se los informó a medida que iba desarrollándose los procedimientos; y dos horas más tarde se estaban realizando de manera simultánea nueve allanamientos y requisas domiciliarias en la ciudad (el décimo allanamiento se produjo en hora de la tarde de ayer) más otros cuatro en la Provincia de Buenos Aires.
Para estas tareas se convocaron a un centenar de policiales, muchos de ellos con experiencia en el campo de la narcocriminalidad como los de la División de Toxicología. Del mismo modo se convocó al Cuerpo Especial para dar seguridad al personal que era el encargado de ejecutar las órdenes del Juzgado Federal. En ese marco, y dada la envergadura de los procedimientos, se solicitó colaboración a otras Jefaturas Departamentales como así también se contó con el apreciable aporte de personal de Gendarmería Nacional; además de destinarse casi cuarenta funcionarios a la Provincia de Buenos Aires para orientar los allanamientos en esa jurisdicción.
Golpe al narcotráfico
Si bien las tareas investigativas prosiguen luego de los procedimientos del jueves, justamente porque se reunió información que derivó en otras acciones como la informada en este artículo relacionada con el secuestro de una embarcación, en principio se detuvieron a siete personas y se reconoció que hay un volumen de información que permitirá continuar con la investigación. De hecho, en Colón se detuvo a una octava persona que se encontraba con pedido de captura.
Además de las detenciones, se secuestraron importante cantidad de dinero en efectivo tanto en moneda nacional como extranjera, drogas, balanzas, casi veinte vehículos, docenas de teléfonos celulares, varias notebooks, chip de celulares y otros elementos de corte de estupefaciente que son de interés para la causa federal.
Los allanamientos en la ciudad comprendieron viviendas ubicadas en el Barrio Molinari, en calle Las Tropas y bulevar Martínez, en el Barrio Florida, en bulevar Daneri y La Rioja, y en un comercio de calle Ayacucho -entre Bolívar y San Martín-, adonde se cree que llegaba la droga y se utilizaba como “pantalla” para simular los movimientos de ingreso y egreso de personas.
Lo otro que se ha destacado es el trabajo de inteligencia de la Jefatura Departamental, que durante varios meses venía reuniendo elementos para señalar los domicilios que luego terminaron siendo allanados e incluso una Unidad Penal de la Provincia de Buenos Aires.
Para evaluar la importancia de este golpe al narcotráfico, esta organización se hacía traer la droga desde Buenos Aires, a un promedio de tres a cuatro kilos por semana. De los siete detenidos, cinco son locales y dos bonaerenses y como consecuencia de estas actuaciones, ahora se accedió a una información por demás sensible para continuar con los procedimientos para desbaratar a esta peligrosa banda.