A pesar de los reclamos a Obras Públicas, los vecinos de Suburbio Sur no tienen respuestas
Cuando llueve demasiado el agua entra a los domicilios y la calle resulta intransitable. A pesar de las notas elevadas a municipalidad todavía no tienen una respuesta definitiva.
Al respecto, EL ARGENTINO conversó con Yanina que producto de las constantes lluvias, sobre todo las del viernes a la mañana, debió hacerle frente a una nueva inundación.
La vecina de calle Moussou contó que hace 27 años vive en el barrio y que ha pasado más de 10 inundaciones porque nunca les dan una respuesta definitiva a sus reclamos.
“Estamos siempre al borde, al límite, pero si llueve y para, da tiempo a que se desagote, pero hoy que cayó tanta agua junta no permitió que el agua drene y se metió adentro de mi casa”.
La que se dio cuenta de lo que pasaba fue una de sus hijas que al entrar al baño se encontró con mucha agua dentro. Yanina se encontraba sola por lo que tuvo que apañárselas para desagotar su casa.
“Toda la vida pasó y es porque no está abierto el desagüe, el zanjeo, y con el badén que hicieron se llena más. Antes teníamos un puentecito que cortaba para el campo de enfrente, tenía que llover mucho para que yo me inunde. Con el badén hicieron que el agua se volcara para el lado de las casas, porque enfrente no hay casas”.
En las múltiples inundaciones que sufrió la vecina, le tocó perder pertenencias materiales, de hecho señala que cada vez que ingresa el agua a su casa se arruinan los muebles, los cuales ha tenido que cambiar en varias ocasiones, así como también se estropean las puertas y el piso.
“Con mi marido levantamos la casa unos 20 centímetros pero a la calle también la fueron elevando, así que quedamos al mismo nivel. Hace unos años venimos ahorrando para ver si podemos construir algo más alto en el fondo de mi casa, pero está todo muy difícil. Yo no tengo otro lugar donde ir, esta es mi casa”, comenta Yanina.
Así mismo, menciona que lo único que hace Obras Públicas es sacar el barro que se acumula en el badén y lo amontona en el campo de enfrente, lo que obstaculiza que los vecinos puedan hacer un “zanjeo” para que el agua corra.
Por otra parte, Yanina señala que por cuatro años tuvieron un caño de la cloaca roto y que cada vez que llovía se volvía insoportable el olor, y recién cuando hicieron público el reclamo a través de los medios lo arreglaron.
Hace casi un año los vecinos hicieron el último reclamo mediático por la problemática que sufren los días de lluvia, sin embargo, todavía no tienen una respuesta definitiva a esta situación.
En tanto, otra vecina de suburbio sur, hace casi un mes que elevó un petitorio para la instalación de luminaria en la misma calle, ya que a la mañana temprano como a la tarde cuando comienza a anochecer, es una auténtica boca de lobos.
La nota fue firmada por la gente del barrio pero todavía no recibieron respuestas. Al respecto, Analía informa que la semana pasada se dirigió al municipio para averiguar en qué estado se encontraba el trámite y le dijeron que ya lo tenían en Obras Públicas pero que todavía no lo habían evaluado.
En este contexto, los vecinos decidieron presentar el proyecto a través del Presupuesto Participativo pero todavía no saben si podrá ser contemplado dentro de esta política pública. Mientras tanto, las pocas cuadras que piden alumbrar constituyen un peligro para aquellas personas que salen temprano a trabajar y deben transitar esos metros alumbrándose con el teléfono celular, lo mismo ocurre a la tarde cuando comienza a anochecer.
Incluso, en una entrevista anterior mantenida con este medio, Analía resaltaba el tema de la inseguridad que implica la falta de iluminación en esa zona, y cómo la gente aprovecha a tirar basura sin ninguna impunidad protegidos por la oscuridad del lugar.
En conclusión, son los vecinos quienes deben monitorear de cerca el curso de los trámites y disponer de su tiempo y medios de transporte para hacerlo, ya que de otra forma no son notificados sobre el estado de los reclamos.
Así como también, deben buscar las herramientas a su alcance para acelerar las respuestas, ya sea haciéndose presentes en el municipio para reclamar y acudiendo a los medios de comunicación locales.