Con 3 mil botones antipánico activos, buscan ampliar sus usos a emergencias vecinales

Por Mónica Farabello

El botón antipánico es un dispositivo otorgado por la Justicia a personas en situación de riesgo potencial. Mujeres víctimas de violencia de género o quienes hayan sufrido ataques de magnitud, cuentan con este sistema en su celular.

Con sólo apretar un botón, se dispara la alerta a la central de Policía, donde monitorean los llamados e inmediatamente geolocalizan la ubicación de la persona en riesgo.

Peor ¿qué pasa con las personas que no cuentan con un celular o tienen un teléfono con tecnología obsoleta? Para estos casos, desde la Policía de Gualeguaychú habían desarrollado un proyecto para “el botón antipánico sin celular”.

Se trata de un prototipo que es “solo un botón, que podría ir inserto en un collar, en una pulsera o hasta en un llavero”, explicó Vitasse en diálogo con EL ARGENTINO.

Lamentablemente, por cuestiones de costos, hasta el momento no ha podido avanzar la iniciativa, aunque el proyecto siempre sigue en pie. El mayor costo que implicaría “el botón antipánico sin celular”, sería la inversión inicial para la confección.

“Podría hacerse hasta con impresores 3D”, asegura Mario Vitasse, quien se mostró optimista de que en algún momento su idea podría llegar a tomar un camino hacia la concreción. Teniendo en cuenta que todo podría avanzar con una simple impresora 3D, tal vez el proyecto no esté tan alejado de conocer la realidad. 

En cuanto a lo tecnológico, Vitasse aclaró que la Fuerza no se dedica a hacer desarrollos de esta índole, aunque siempre están pensando en mejoras que puedan aportar a la sociedad. 

Tres mil botones activos

Actualmente son 3 mil los botones antipánico activos en la ciudad de Gualeguaychú. Vitasse explicó que “desde lo legal se otorgan con una orden por determinado tiempo. Después eso se va renovando en muchos casos, y en otros, no”.

Pero ¿es diaria la demanda de las víctimas? ¿Cómo se monitorean tantos casos? Explicaron que atienden “una acción por día o cada dos días”. La Fuerza Policial acude ante el llamado de la víctima, mientras que la situación es asistida desde el centro de monitoreo. 

Nuevos usos para el botón

El botón que emite una alarma en la central de Policía podría ampliar sus usos de manera significativa y muy útil. 

Su creador contó a EL ARGENTINO que están pensando en que pueda utilizarlo más gente: por ejemplo, “en una Escuela donde tengan una emergencia; o una persona mayor que se calló en el baño y necesita que alguien acuda a ayudarla. Teniendo el botón sea en su celular, en una pulsera o en un collar, puede activar y dar aviso”.

Además, también podría ser puesto en uso por “los vecinos en alerta”. En muchas cuadras, o barrios, los vecinos están en constante comunicación a través de grupos de Whatsapp. Al alertar algo fuera de la normalidad, un robo, un incendio, o cualquier eventualidad que requiera de la presencia de las autoridades, podrán activar el botón y solicitar ayuda.

“Es un proyecto que me interesa mucho. Me gustaría darles ese uso a las alarmas vecinales. Hay alarmas que se disparan con un llavero, que pueden tener una sirena con luces. La idea también es integrar eso a un sistema de seguridad más global y que suene no sólo en la cuadra, sino que lance la alerta”, explicó el funcionario policial.

EL DATO

En una zona específica de la ciudad de La Plata, el Ministerio de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires, pusieron en marcha en botón antipánico “para todos”. De esta manera, los vecinos interesados en recibir el dispositivo para la prevención del delito, debían inscribirse previamente para recibir el beneficio.

De acuerdo a lo informado oficialmente, los botones antipánico que se otorgarán, se utilizarán solo en situaciones de emergencia y permitirán a la persona que lo utiliza avisar de manera directa, desde su celular y con solo tocar la pantalla, que está en riesgo y necesita un móvil policial. Tras recibir la alerta, la central 911 recibe el pedido y envía de inmediato el patrullero más cercano al domicilio del denunciante.