Familias Misioneras Lourdes: “La fe cuando se comparte se multiplica”
Con esta frase que nos identifica, queremos contarles que los días 27, 28, 29 y 30 de abril, el grupo Familias Misioneras Lourdes, viajamos a Corpus Misiones, por sexta vez, para realizar en esta oportunidad, el cierre de nuestra misión.
Allí nos encontramos una vez más con los alumnos, el personal y las familias de la Escuela Nº 135 Santo de la Espada y la comunidad de 8 de Diciembre.
Luego de un abrazo que unió corazones, compartimos en comunidad numerosos y emotivos momentos: recordamos y revivimos la pasión de Cristo y el amor que Dios tiene con nosotros, en un viacrucis que realizamos desde la capilla hasta la escuela.
Jugamos, reímos, charlamos, rezamos…Dios estaba presente en cada momento…
El domingo, nos encontramos en la Eucaristía, en donde el Padre Julián de Corpus, realizó el envío de cinco nuevas misioneras: Stella, Josefa, María, Susana y Mirta. Ellas quedarán con la posta de mantener unida la comunidad, asistirla y acompañarla espiritualmente.
Luego nos encontramos para disfrutarnos…compartimos el almuerzo, el cumple de Dani, un baile preparado para la ocasión por los chicos de la escuela, el fútbol de grandes y chicos, juegos preparados por nuestros adolescentes y niños para todos.
Más tarde nos reunimos, en torno a un “Pirata” (cuenta cuentos), que nos mostró la importancia de la amistad, de compartir nuestro Tesoro, y que éste se multiplica y revaloriza si así lo hacemos.
Formamos un rompecabezas entre las familias de Corpus y Gualeguaychú, como símbolo de unión, y de remarcar la importancia de que todos formamos la comunidad y crecemos en ella, a pesar de nuestras diferencias. La imagen correspondía a Nuestra Señora de Lourdes, nuestra guía y fiel protectora en todo momento durante las misiones.
Y cuando nos alcanzó la noche… nos unimos en un círculo de amor frente al fogón, cuya llama parecía tocar el cielo…al menos las chispas, llegaban hasta él…Compartimos testimonios, vivencias, sentimientos de éstos seis años de misión. Todos, encendimos una vela del fuego mayor, todos, somos responsables a partir de ese momento, de mantener encendida la llama de nuestra Fe, la que se multiplicó y se revalorizó (como nos enseñó el "pirata") durante este pasado fin de semana.
Las familias misioneras, queremos agradecer a todos los que colaboraron para que esta misión fuese posible, a nuestras familias, amigos, nuestra querida comunidad de Lourdes, los sacerdotes que nos acompañaron, a los que nos fortalecen con sus oraciones, a todos, un Gracias enorme.
¡Gracias a todos! ¡Gracias a Dios!
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