Hasta ahora Gualeguaychú es el único municipio de la provincia que pagará el bono de fin de año

El 24 de octubre pasado el secretario general del sindicato de Empleados Municipales, Mario López, rubricó el acta acuerdo con el intendente Juan José Bahillo y el secretario Jefe de Gabinete y Gobierno, Germán Grané, para dar por terminada las paritarias 2014.
En esa acta, se establecieron tres puntos: un incremento salarial del 8 por ciento remunerativo y bonificable a partir del mes de septiembre, a lo ya otorgado el 3 de abril, logrando un 35 por ciento de recomposición salarial este año.
Se estableció llevar el sueldo mínimo garantizado de 3600 a 4200 pesos y el tercer punto fue el compromiso del municipio para abonar por única vez un monto de 2 mil pesos en diciembre para la planta laboral de 1173 empleados, según lo establece la ordenanza del presupuesto general de gastos de la comuna para el 2015, que el jueves pasado fue votada por unanimidad por el HCD.
El tercer punto del acta acuerdo, fue el que molestó al Gobierno provincial, porque Gualeguaychú va en contra mano a la decisión del Ejecutivo provincial, quien mediante el ministro de Gobierno, Adán Bahl, comunicó que: "no se evalúa un bono de fin de año para los empleados públicos entrerrianos porque no estamos en condiciones de pagarlo".
Estas declaraciones realizadas por el ministro puso en estado de alerta a los gremios estatales, que vieron como la inflación prácticamente le licuó toda la recomposición salarial conseguida en el primer semestre del año, y encima cerrarán un 2014 con 12 puntos promedio por debajo de la inflación proyectada del 40 por ciento para este año.
Desde el poder aún no hay señales de austeridad. En septiembre, el gobernador Sergio Urribarri, para hacer realidad “el sueño de un entrerriano” y pelear su precandidatura presidencial en las PASO del 2015, contrató como su asesor de campaña al experto brasileño Duda Mendonça, y hasta ahora no está claro de dónde salen los recursos para pagarle. Además, para la Cumbre del MERCOSUR, que se desarrollará en Paraná los días 17 y 18 de diciembre se destinarán 120 millones de pesos.
El anuncio de que el Gobierno provincial no pagará un bono generó una cierta inquietud entre algunos empleados municipales. Hay temores de que el intendente Juan José Bahillo se vea en una encrucijada y en la obligación de incumplir con el acta acuerdo firmada el 24 de octubre, para estar en sintonía con los demás municipios y el propio gobierno provincial.
“Por ahí se está diciendo en la provincia que en Gualegueychú no se ha logrado este acuerdo”, dijo Mario López secretario general del Sindicato de Empleados Municipales.
“El acuerdo existe, el acta se firmó y si no se va a respetar por una cuestión netamente política, los trabajadores municipales de Gualeguaychú llamaríamos a una asamblea y las medidas a tomar serían drásticas. Pero también tenemos que decir que los empleados municipales vamos a respaldar a Bahillo para que cumpla el acuerdo, en caso de que se sienta con presiones del gobierno provincial para no pagar el bono”.

-¿Hay otros municipios que van a poder pagar el bono de fin de año? (se le preguntó a López)
-Me he comunicado con distintos secretarios generales de municipio de la provincia y hasta el momento ninguno logró un bono de fin de año, como tampoco lo pudieron lograr los compañeros de UPCN, ATE y AGMER. Los trabajadores estamos viviendo una situación grave a nivel nacional, el costo de la canasta básica familiar se disparó de forma estrepitosa y esto repercute en las familias de la clase media.

La receta del superávit

Al ser consultado por cómo se logró destinar más de dos millones de pesos adicionales para el pago de un bono de fin de año, ante una situación de crisis generalizada en la provincia, el secretario de Hacienda de la Municipalidad, Daniel Acuña explicó que: “Esto no es un trabajo puntual de un mes, sino que es un proceso en el cual se trabajó en estos siete años, en el sostenimiento de la recaudación impositivas a través de políticas impositivas que nos dieron resultados, y por el otro lado un control eficiente del uso de esos recursos, que pese al gasto en personal hemos podido mejorar la calidad de los servicios esenciales que se brindan a los vecinos”.
Esta mejora sustancial en los servicios de agua potable, barrido y recolección de residuos domiciliarios, atención primaria de la salud, entre otros generó más demanda de equipamiento, entre ellos la necesidad de maquinaria vial, vehículos logísticos y camiones compactadores, para atender la creciente demanda de servicio que genera la nueva incorporación de barrios de viviendas sociales. La mayor parte del equipamiento se compró con recursos propios. En 2009 se tomó deuda por 6 millones de pesos a 70 meses para la compra de equipamiento, “la última cuota la vamos a cancelar en marzo del 2015, y la próxima administración municipal recibirá el municipio prácticamente sin deuda”, agregó Acuña.
A su vez recordó que durante los ejercicios 2012 y 2013 “terminamos con superávit” y se espera que este año pese al bono de fin de año “también tengamos un superávit”.
Recordó que “en 2013 terminamos el ejercicio con un superávit de 20 millones de pesos y hay una decisión política de volcar ese superávit en mejorar los servicios. Un municipio no debe buscar ganancia sino que debe garantizar la sustentabilidad de la prestación de los servicios, porque ese superávit se invirtió en infraestructura y no en gastos corrientes”, concretó.
En el mismo periodo de siete años, el Gobierno provincial incorporó 18 mil empleados públicos más al Estado, debe más de 1.880 millones de pesos en concepto de compromisos vencidos por los bonos para financiar gastos corrientes, el déficit fiscal proyectado para 2014 es de 1.100 millones de pesos, con una Caja de Jubilaciones que acarrea un déficit mensual de 100 millones de pesos.