Hospitalito Baggio: casi el 50% de los pacientes no cuentan con obra social
El importante trabajo que el Hospitalito Baggio viene realizando hace algunos años por fuera de la institución es crucial para, entre otras cosas, tener un panorama certero de la realidad que viven las familias que componen los ocho barrios de la zona programática contemplada por el efector público provincial.
Según los primeros datos arrojados por la primera etapa del Proyecto de Abordaje Integral del Desarrollo Infantil (Abidin), en la que se censaron 323 viviendas y 1202 personas, el 26% de la población se encuentra desocupada o tiene un trabajo inestable. Además, más de la mitad no cuenta con obra social y asiste al sistema público de salud.
Esta realidad hace cada vez más necesaria la función del Centro de Salud que recibe al 75% de la totalidad de encuestados, mientras que el 15% asiste al Centro de Salud Municipal Villa María y el resto se reparte entre el Hospital Centenario, otros centros de salud y médicos particulares.
“Somos un centro regional de referencia, el objetivo principal de la institución es tratar de promocionar la salud y prevenir las enfermedades. De ahí la importancia que tiene conocer fehacientemente qué es lo que ocurre en nuestro área de responsabilidad. Y para saber lo que pasa la única manera es saliendo a terreno, a visitar casa por casa”, expresó el director del Hospitalito, Jorge Roko.
Del 26% de desempleados que viven en el área programática (la conforman los barrios Yapeyú, 20 viviendas, Esperanza, Trinidad, Cover, San Cayetano, La tablada, Zabalet y el asentamiento sur, y suman 481 casas) el 7% está inactiva y el 19% realiza “changas”. Mientras que del 48% laboralmente activo el 33% son empleados y el 15% tiene un trabajo independiente. Los jubilados (14%) y los pensionados (12%) completan el cuadro de situación.
Cristina Pérez, responsable del relevamiento del que forman parte las áreas de Nutrición, Odontología, Obstetricia y los agentes sanitarios, se refirió a la importancia del censo. “Los números obtenidos en la primera etapa del relevamiento muestran la situación, que en buena proporción es crítica. Ahora comenzamos la segunda etapa, para completar el mapa de la realidad, no sólo en lo que hace a la salud de las familias sino también la situación socioeconómica en general por la que atraviesan”, indicó.
Abidin se puso en marcha a principios del 2014, con la intención de generar, primero, los datos integrales de las familias de los barrios que conforman la zona programática de la institución. A estos se llegó a través de encuestas domiciliarias (se censaron 323 casas de 481), que incluyeron, además de la cobertura médica, el nivel de estudio de los encuestados y la alimentación de los niños durante los primeros años de vida, entre los datos de mayor relevancia.
En este sentido, los resultados destacan: el 30% terminó los estudios primarios y el 24% no lo hizo; el 23% no terminó la secundaria, mientras que el 18% sí lo hizo y el 3% tiene estudios terciarios o universitarios.
Asimismo, el informe del Hospitalito destaca que “la mayor parte de la población menor a los 14 años tiene completo el calendario de vacunación”, mientras que “sólo el 11% no ha completado el esquema”. Y “casi la totalidad de los niños menores a 6 años realiza periódicamente los controles antropométricos”.
En este sentido, el documento remarca que “la mayoría de los niños presenta estado nutricional normal” y discrimina: el 76% presenta peso normal y el 84% talla normal; un 15% tiene talla baja, y prevalece la malnutrición por déficit (13%) por sobre el exceso (11%).
“Este trabajo nos sirve, primero, para invitar a quien no viene al Hospitalito a que lo haga. Segundo, para planificar actividades o campañas enfocadas particularmente en los problemas que vamos encontrando. Las capacitaciones y talleres, por ejemplo, o los controles antropométricos y las consejerías nutricionales se profundizaron luego de contar con estos datos estadísticos”, destacó Roko.
Esta realidad hace cada vez más necesaria la función del Centro de Salud que recibe al 75% de la totalidad de encuestados, mientras que el 15% asiste al Centro de Salud Municipal Villa María y el resto se reparte entre el Hospital Centenario, otros centros de salud y médicos particulares.
“Somos un centro regional de referencia, el objetivo principal de la institución es tratar de promocionar la salud y prevenir las enfermedades. De ahí la importancia que tiene conocer fehacientemente qué es lo que ocurre en nuestro área de responsabilidad. Y para saber lo que pasa la única manera es saliendo a terreno, a visitar casa por casa”, expresó el director del Hospitalito, Jorge Roko.
Del 26% de desempleados que viven en el área programática (la conforman los barrios Yapeyú, 20 viviendas, Esperanza, Trinidad, Cover, San Cayetano, La tablada, Zabalet y el asentamiento sur, y suman 481 casas) el 7% está inactiva y el 19% realiza “changas”. Mientras que del 48% laboralmente activo el 33% son empleados y el 15% tiene un trabajo independiente. Los jubilados (14%) y los pensionados (12%) completan el cuadro de situación.
Cristina Pérez, responsable del relevamiento del que forman parte las áreas de Nutrición, Odontología, Obstetricia y los agentes sanitarios, se refirió a la importancia del censo. “Los números obtenidos en la primera etapa del relevamiento muestran la situación, que en buena proporción es crítica. Ahora comenzamos la segunda etapa, para completar el mapa de la realidad, no sólo en lo que hace a la salud de las familias sino también la situación socioeconómica en general por la que atraviesan”, indicó.
Abidin se puso en marcha a principios del 2014, con la intención de generar, primero, los datos integrales de las familias de los barrios que conforman la zona programática de la institución. A estos se llegó a través de encuestas domiciliarias (se censaron 323 casas de 481), que incluyeron, además de la cobertura médica, el nivel de estudio de los encuestados y la alimentación de los niños durante los primeros años de vida, entre los datos de mayor relevancia.
En este sentido, los resultados destacan: el 30% terminó los estudios primarios y el 24% no lo hizo; el 23% no terminó la secundaria, mientras que el 18% sí lo hizo y el 3% tiene estudios terciarios o universitarios.
Asimismo, el informe del Hospitalito destaca que “la mayor parte de la población menor a los 14 años tiene completo el calendario de vacunación”, mientras que “sólo el 11% no ha completado el esquema”. Y “casi la totalidad de los niños menores a 6 años realiza periódicamente los controles antropométricos”.
En este sentido, el documento remarca que “la mayoría de los niños presenta estado nutricional normal” y discrimina: el 76% presenta peso normal y el 84% talla normal; un 15% tiene talla baja, y prevalece la malnutrición por déficit (13%) por sobre el exceso (11%).
“Este trabajo nos sirve, primero, para invitar a quien no viene al Hospitalito a que lo haga. Segundo, para planificar actividades o campañas enfocadas particularmente en los problemas que vamos encontrando. Las capacitaciones y talleres, por ejemplo, o los controles antropométricos y las consejerías nutricionales se profundizaron luego de contar con estos datos estadísticos”, destacó Roko.
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