La Corte Suprema de Justicia dará tratamiento al caso Amarras

A mediados de febrero de este año, el caso Amarras llegó a la Corte Suprema por un Recurso de Queja presentado por el abogado Mariano Aguilar, de amplia versación en temas ambientales, junto a quien trabajó el abogado Luis Leissa, como destacó Majul en la entrevista con EL ARGENTINO.
Ahora, la Corte decidió ordenarle al Superior Tribunal de Justicia de la Provincia de Entre Ríos que remita todos los expedientes y actuaciones que se hayan dado en el marco de la causa, para intervenir en el caso.

Dos fallos, dos rechazos

Como se recuerda, en septiembre de 2015 el juez Marcelo Arnolfi, a cargo del Juzgado de Primera Instancia en lo Civil y Comercial Nº 2, ordenó a la empresa “Altos de Unzué” la paralización de las obras a orillas del río Gualeguaychú.

Arnolfi ordenó el 23 de septiembre “el cese definitivo de las obras civiles que se encuentra realizando Altos de Unzué SA por sí o a través de terceros en el predio denominado Amarras del Gualeguaychú”.
Además, dispuso otras medidas como la de recomposición, “para evitar cualquier posible impacto ambiental previo con la modificación de la obra en el estado en que se encuentra”.
Pero en noviembre de ese año, y apelación mediante, el Superior Tribunal de Justicia de Entre Ríos, por dos votos y una abstención, determinó dictar la nulidad del fallo.
Luego y casi al término de 2015 (23 de diciembre), la empresa Altos de Unzué, la Municipalidad de Pueblo General Belgrano y el gobierno provincial fueron condenados por el juez Leonardo Portela a cargo del juzgado Civil y Comercial N° 3 por sus responsabilidades en la construcción del barrio náutico Amarras del Gualeguaychú.
El juez Portela hizo lugar a la acción colectiva de amparo ambiental promovida por Julio Majul, ordenando “el cese de las obras que la firma Altos de Unzué SA lleva adelante en el inmueble de su propiedad y que se denomina proyecto Amarras del Gualeguaychú; condenando solidariamente a la firma Altos de Unzué, a la Municipalidad de Pueblo General Belgrano y al Superior Gobierno de Entre Ríos a recomponer el daño ambiental producido en el término de noventa días, con costas, bajo apercibimiento de transformar dicha obligación en una indemnizatoria”.
El abogado Julio Majul, iniciador del amparo ambiental, recordó estos
dos fallos y expresó “en dos oportunidades jueces de Gualeguaychú aceptaron la demanda entablada por más de dos mil vecinos. Sin embargo, en las dos ocasiones, el Superior Tribunal de Justicia de Entre Ríos ordenó rechazar los recursos de amparo por motivos de forma”.
Y consideró “la Corte hará lo que el Superior (Tribunal de Justicia de Entre Ríos) no quiso, o sea impedir que el dinero sea más importante que el bienestar de la gente”.
Luego, aclaró “el caso está en la Corte hace meses, lo que ocurrió ahora es que el STJ de Entre Ríos envió el expediente completo”.

Lo que se espera

Quedando claro que esta es la última instancia de apelación, Julio Majul dijo en la charla con EL ARGENTINO que ante el tribunal nacional “pedimos que anule el fallo del Superior tribunal de Entre Ríos, deje vigente el último fallo, el del Juez Portela y se impida que se construya este negocio inmobiliario”.

El recurso de queja interpuesto por los vecinos de Gualeguaychú está en la Vocalía 1 de la Corte Suprema de la Nación, a cargo de Ricardo Lorenzzetti.
Y esto alimenta el optimismo de Majul, ya que, como dijo “se ha mostrado muchas veces decidido a defender el medioambiente”.
Acerca de si puede suceder que la Corte haga también las observaciones que hizo el Superior Tribunal de la provincia, Majul dijo “No. Cuando la corte pide el expediente entero es para opinar sobre el expediente en sí, no sobre minucias”. Y agregó su esperanza de que “la Corte opinará sobre el fondo de la cuestión”.

# Mientras tanto

En cuanto a qué se debe esperar en el “mientras tanto”, respecto de la continuidad de las obras en el predio, Majul opinó “creo que hasta que la Corte se expida, los empresarios harán lo que tengan ganas”. 

Y recordó “la secretaria de ambiente de la provincia, Belén Estéves, ha intimado a la empresa a que se abstenga de seguir construyendo, pero la empresa sigue haciéndolo.
La municipalidad ha enviado un sinnúmero de informes a la secretaría provincial de ambiente denunciando la continuidad de las obras a pesar del Decreto del Gobernador y sólo se le cobra multas a la empresa, y de un monto irrisorio.”
“En su primer discurso ante la legislatura, Bordet dijo que para él lo más importante es el cuidado del medioambiente. Pero no ha cumplido. Emitió un decreto para paralizar las obras, pero ante el incumplimiento de los empresarios, no hace más que cobrar multas de montos ridículos”.
¿Qué debería hacer?, preguntó EL ARGENTINO.
“Prohibirles continuar”, dijo sin vueltas Majul y agregó “el expediente administrativo con la apelación de la Municipalidad de Gualeguaychú aún está abierto. Hace meses que se han cumplido todos los plazos y las medidas que había que formalizar, y Bordet sigue sin resolver el tema. Imagino que debe estar esperando el fallo de la Corte, pero es un error porque son dos cosas diferentes lo que resuelve la administración provincial de lo que pueda resolver la Corte Suprema”..

 El último capítulo

Este miércoles, apuntó EL ARGENTINO, se inició un nuevo capítulo en esta historia. Quizá el más importante, por lo definitorio.

¿Pensaste que ibas a llegar a la Corte Suprema con este recurso?
“Sí. Pensé hacer el recurso cuando el Superior Tribunal provincial anuló el fallo de Arnolfi, porque lo hizo sin sentido jurídico alguno. Y luego, cuando hicieron lo mismo con el caso Portela, ya no pudimos dejar de hacerlo.”
Y aclaró que hablaba en plural “porque no estoy solo en esto y de hecho, en este recurso ante la Corte, el que más trabajó fue Luis Leissa. Y para llegar a esta instancia contamos con un abogado especializado en temas ambientales, Mariano Aguilar”.

 

Silvina Esnaola