Opinión
La hora del planeta
La Argentina, con la participación de más de 50 municipios de 14 provincias distintas, se suma a esta iniciativa mundial para concientizar sobre el comportamiento ambiental.
Coordinada en nuestro país por la Fundación Vida Silvestre Argentina, esta campaña de la Organización Mundial de Conservación (WWF), invita a apagar las luces este sábado 25 de marzo, entre las 20:30 y 21:30, para demostrar que gobiernos, empresas e individuos, trabajando juntos, pueden hacer una diferencia en relación al cambio climático.
Tal vez los gualeguaychuenses no nos demos cuenta, cómo ya el cambio climático está afectando a nuestra economía y a nuestra comunidad. El mes de abril del año pasado, en donde llovieron 25 días en el mes, provocaron pérdidas millonarias en las cosechas, un gran deterioro en la red caminera de tierra departamental, enormes pérdidas en los complejos turísticos y familias que tuvieron que desplazarse de sus hogares a centros de refugiados.
Todos advierten que los fenómenos climáticos como el de abril, cada vez serán más frecuentes, agravados por la enorme deforestación que hubo en los campos de la cuenca del Río Gualeguaychú, que permitían que los suelos tuvieran una mayor capacidad de absorción, ralentizando la llegada del agua de lluvia de los campos al río evitando picos de crecida prolongados.
Para evitar que nuestro planeta se siga degradando, tendremos que cambiar nuestros hábitos de consumo y con una economía basada en un crecimiento constante, a la larga lo único que provoca es que los recursos naturales se agoten con mayor rapidez, condenando el futuro de las nuevas generaciones.
Tal vez los gualeguaychuenses no nos demos cuenta, cómo ya el cambio climático está afectando a nuestra economía y a nuestra comunidad. El mes de abril del año pasado, en donde llovieron 25 días en el mes, provocaron pérdidas millonarias en las cosechas, un gran deterioro en la red caminera de tierra departamental, enormes pérdidas en los complejos turísticos y familias que tuvieron que desplazarse de sus hogares a centros de refugiados.
Todos advierten que los fenómenos climáticos como el de abril, cada vez serán más frecuentes, agravados por la enorme deforestación que hubo en los campos de la cuenca del Río Gualeguaychú, que permitían que los suelos tuvieran una mayor capacidad de absorción, ralentizando la llegada del agua de lluvia de los campos al río evitando picos de crecida prolongados.
Para evitar que nuestro planeta se siga degradando, tendremos que cambiar nuestros hábitos de consumo y con una economía basada en un crecimiento constante, a la larga lo único que provoca es que los recursos naturales se agoten con mayor rapidez, condenando el futuro de las nuevas generaciones.
Este contenido no está abierto a comentarios