Básquet Femenino
Central pegó un grito de campeón
Central Entrerriano sufrió y mucho, pero finalmente se quedó con una gran final ante Vélez, por 74 a 57. Galé y Tamburini fueron las abanderadas de este logro para el cuadro entrerriano, que tuvo que batallar hasta el final para doblegar al que hasta hace unas horas era el bicampeón del certamen.
Fue Vélez el que golpeó de arranque, mostrándose acertado con sus lanzamientos exteriores, y plantado en una defensa hombre a hombre que le complicó las cosas al dueño de casa. Prácticamente desde los primeros segundos las chicas de Capital Federal se encontraron arriba 7-0, y Bertoni necesitó mover el banco para despertar a su equipo.
Con Mendoza anulada por Budini, el juego ofensivo de Central Entrerriano recayó en Galé, quien en principio aprovechó los centímetros de más en relación a su defensora (Gatti), y después, ya con Bachinni encima, distribuyó bien la pelota en los metros finales del ataque de su equipo, siendo esta la principal causa por la cual las anfitrionas cerraron arriba el primer chico 16 a 14.
Ya en el segundo periodo las mesopotámicas se potenciaron con el ingreso a escena de Tamburini, quien aportó un par de triples que le sirvieron para despegar a su equipo. Mendoza siguió cercada (ahora por Rosset y Reggiardo), y salvo hacer circular el balón o forzar situaciones de tiro no pudo hacer mucho más.
Central Entrerriano se vio encausado, a pesar de las limitaciones con que se encontró la perimetral de la selección, y cuando pareció que se encaminaba a cerrar la primera mitad de gran forma, una ráfaga de Pavón (gol y falta más triple) bien apuntalada por un par de defensas eficaces dejaron a las del barrio de Liniers a un paso de igualar el marcador (29 a 30) con menos de dos minutos por jugarse. Las de Gualeguaychú lograron sobrevivir a la tormenta, y se fueron al descanso largo arriba por dos, 32 a 30.
La vuelta de vestuarios le terminó de dar paridad al juego. Sobre la mitad de este las chicas de la ?V? igualaron las acciones en 38, y a partir de allí el encuentro subió un escalón más en emotividad. El banco de Vélez mantuvo a su equipo en pie, mientras que la dupla Galé-Tamburini se cargó el equipo al hombro. Luego de que las visitantes pasaran al frente 40 a 39, las dueñas de casa realizaron dos buenas defensas y las coronaron con sendas conversiones en ataque con lo cual volvieron a tomar el liderazgo (43 a 40).
Una bomba de Reggiardo mantuvo al cuadro de Liniers a uno (44 a 43), pero en el cierre fueron las anfitrionas las que hicieron mejor las cosas y por eso encararon el epílogo con una ventaja de cuatro a su favor, 47 a 43.
Como los anteriores periodos, el último cuarto no se quedó atrás con la paridad. Si bien las locales esbozaron en un par de oportunidades un intento de despegue, rápidamente las capitalinas se encargaban de romperles la ilusión. Esto, hasta el minuto cuatro de disputado el cierre, donde las dueñas de casa, para su beneficio, se distanciaron de forma definitiva.
En poco más de dos minutos Central Entrerriano marcó un parcial de 14 a 0, con el cual se catapultó 65 a 48 arriba. Este quiebre en el partido respondió a la salida por faltas de Cava y al destape de Mendoza, quien encontró grietas en la defensa velezana y no perdonó. Hasta ahí llegó el corazón y la garra de Vélez, que batalló hasta donde pudo y vendió cara su derrota, dejando atrás la posibilidad de tricampeonar.
Para las de Gualeguaychú fue la coronación de una temporada espléndida, con solo una caída en toda la fase regular y un tridente compuesto por Tamburini-Galé-Mendoza, que al menos en esta temporada, mostraron estar un escalón por encima de cualquier otro tándem. El resultado final fue de 74 a 57.
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