Juventud ganó y sigue mandando en soledad

Ayer, a diferencia de lo sucedido el pasado domingo en el clásico ante Central, a Juventud le costó muchísimo ganarle a un duro Defensores, que tuvo situaciones para complicar al elenco de Silvio Márquez. De entrada se prestaron el balón y las primeras situaciones las tuvo el visitante, pero sus delanteros no consiguieron definir ante el juvenil arquero Crisnejo, por eso Juventud aprovechó sus momentos y poco a poco fue mejorando en el juego. Así fue como a los 36 minutos, a la salida de un tiro libre, el volante central Esteban Paiz anticipó a todos en el primer palo y colocó la apertura del marcador, para el delirio de la buena cantidad de hinchas que acompañó a Juventud en su cancha. El local con la ventaja siguió teniendo la pelota y justificó la diferencia, llegando al descanso con la ventaja mínima en su favor. En el segundo tiempo mejoró Defensores, que tuvo más el balón, buscó con mayor asiduidad a Daniel Salva y Modesto Valenzuela en ofensiva y fue generando. Así fue como en una corrida de Leonardo Lenciza, Matías Lonardi se lo ?llevó puesto? y el árbitro Hugo Núñez marcó penal sin dudar. El defensor de Juventud se excedió en la protesta y el árbitro lo expulsó, generando así otra complicación para los locales. El penal lo ejecutó Fernando Rodríguez, que con tiro suave al medio del arco estampó la igualdad que era merecida por lo hecho por uno y otro. Pero había tiempo para más, porque Juventud lo fue a buscar, con una guapeada de Víctor Fiorotto, que ganó una pelota que parecía perdida, enfiló hacia el parea y Arellano lo bajó cometiéndole penal. Otra vez Núñez acertó con la decisión de marcar la pena máxima, que el propio Fiorotto ejecutó para darle el triunfo final a Juventud. A la luz de lo hecho por los dos, un empate le hubiera quedado mejor al partido, pero como el fútbol no sabe de merecimientos, Juventud aprovechó su momento y se quedó con tres puntos de enorme valor. El ?Decano? sigue ganando, manda en su zona y es el único equipo con puntaje ideal luego de tres fechas. Sus jugadores, cuerpo técnico y simpatizantes tienen motivos sobrados para ilusionarse con ser protagonistas y pelear por la clasificación a semifinales.