Argentino B
Juventud logró el objetivo de volver
Juventud Unida igualó sin goles ante Atlético Paraná y aseguró su retorno al Torneo Argentino B de la edición próxima, luego de salir victorioso de la serie por la Reválida, ya que en el partido de ida Juventud había ganado 1 a 0 en Paraná.
Fue un partido malo, de escasísimo nivel técnico y donde Juventud impresionó mucho mejor en el comienzo, porque se paró decididamente en el campo de su adversario y salió a buscar definir rápido la serie.
A los 3 minutos, tras un mal rechazo de Avila, Pedro Benítez le entró trabado por un defensor y la pelota se fue cerca del palo izquierdo del arquero Iván Baigorria, mientras que a la salida del corner, otra vez el ?Pequi? entrando por atrás, estuvo cerca de poder convertir el primer gol del partido.
Juventud era más ambicioso y proponía con las subidas de Salas por derecha y con la movilidad del ?Potro? Cerino que complicaba a una lenta defensa de Atlético Paraná. A los 6 minutos, hubo un penal enorme de Gallegos a Cerino que el árbitro Stevenot no vio, mientras que a los 8 minutos, otra vez a la salida de un corner, Iván Bonzi metió un balazo que el arquero Baigorria desvió con los puños hacia delante.
Juventud merecía el gol y tuvo una situación clarísima a los 9, cuando Iván Bonzi mandó un corner que Benítez bajó al medio y Gabriel Correa, entrando solo por el medio, la tiró muy alto cuando todos esperaban el gol.
Juventud siguió jugando mejor, mostrando seguridad en el fondo y tratando de buscar el gol que lo tranquilizara, pero chocó con su propia impericia a la hora de definir, aunque tampoco pasó sobresaltos en el fondo, porque atlético no lograba salir del asedio que proponía el equipo de Fullana y no inquietaba a Pablo Schab.
A los 13, Gabriel Correa definió sin convicción por arriba ante una floja salida de Baigorria, que había despejado con los puños hacia el centro, pero el volante proveniente de Patronato le dio con suavidad y sin dirección.
La primera llegada relativamente clara de la visita fue a los 21, cuando Pablo Schab se tuvo que revolcar para contener un tiro libre de Osvaldo Ramírez que iba bien colocado. Después, el visitante hizo muy poco para equilibrar el juego, aunque Juventud perdió la pelota y empezó a abusar de los pelotazos para buscar a Cerino y a un apagado Luis Núñez arriba.
La pelota no pasaba por los pies de Correa y Prono y por eso Juventud no tenía continuidad en el medio, teniendo como única opción el pelotazo largo desde el fondo para que los delanteros se arreglaran, pero pese a que la defensa visitante dio una permanente sensación de inseguridad, nunca más los jugadores de Juventud tuvieron una chance clara para poder convertir. En tiempo de descuento volvió a avisar Paraná, con un cabezazo de Carlos Avila que Pablo Schab manoteó para luego controlar.
En el segundo tiempo las cosas no cambiaron, porque Juventud siguió siendo el que buscaba pero volvió a carecer de conexión entre los del medio con los delanteros. Atlético no podía disimular sus enormes problemas para generar fútbol, porque solamente con la movilidad de Ramírez no alcanzaba y los dos delanteros quedaban absorbidos por la segura defensa de Juventud, donde Cardozo volvió a brillar y el resto daba seguridad en forma permanente.
Paraná se fue adelantando en el terreno pero sin generar peligro, dejando huecos que Juventud no supo aprovechar. Solamente con una corrida del ?Chucky? Núñez que terminó definiendo por arriba cuando estaban solos Bonzi por izquierda y Cerino por derecha, fue la aproximación que el equipo local hizo en los primeros minutos.
A partir del primer cuarto de hora el partido se tornó ordinario y empezó a picarse. Ya había habido un par de cruces fuertes durante el primer tiempo, pero una violenta entrada de Murgado a Guillermo Salas que motivó la roja directa de Stevenot para el volante visitante, provocó una airada reacción de los jugadores de Paraná, con manotazos y un par de intercambio de palabras y acusaciones con los jugadores de Juventud, que inexplicablemente entraron en la provocación.
Con un hombre de más, Juventud no pudo volver a recuperar el fútbol y Paraná empezó a ir, a los ?ponchazos? pero buscando con el juego aéreo a Goodfried y Marzo, quienes nunca tuvieron una situación clara para poder ganarle a los defensores del ?Juve?. Solamente una trepada de Ramírez por izquierda que terminó con un despeje de Clemente contra su propio arco y un remate por arriba de Diego Flematti, que reemplazó a Aguirre, fueron las chances que dispuso la visita para abrir el marcador, demasiado poco para un equipo que necesitaba ganar.
Juventud lo pudo liquidar a los 38, cuando el ?Petro? Cerino dio un remate en el palo tras un quite de Benítez que dejó al delantero mano a mano con Baigorria, pero tampoco hubo muchas más jugadas donde Juventud hubiera podido anotar.
Paraná se adelantó y Juventud empezó a jugar con la desesperación de su rival, especialmente con la experiencia de Cerino y Benítez para ?copar? situaciones difíciles y sacar del partido a los rivales. Cuando se jugaba tiempo de descuento y todos esperaban el final, Daniel Barcos agredió sin pelota a Cerino y vio la roja, provocándose un tumulto que donde tuvo que intervenir la Policía para separar.
Después no hubo tiempo para nada más, solamente para un enorme y contagioso festejo de Juventud, que cumplió con su objetivo y regresó al Argentino B. El premio para un grupo de jugadores que supo anteponerse a un descenso y a un apuesta grande de la dirigencia, que se la jugó con un nuevo técnico como Miguel Fullana y la apuesta le salió bien.
Gualeguaychú vuelve a tener representación a nivel nacional. En Juventud y en toda la gente que ayer acompañó al equipo está mantener la plaza y pelear por otros objetivos en el torneo que largará a principios de diciembre.
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