Juventud sacó un triunfo desde el corazón y salió de la zona de descenso
Juventud Unida logró un triunfo gigante 2 a 1 sobre Instituto, con un golazo de Martín Prost sobre la hora, sumando tres puntos sumamente necesarios para poder salir nuevamente de la zona de descenso directo.
Cuando parecía que el partido se moría empatado y el “Juve” seguía en zona de descenso directo, cuando el juego no aparecía como en casi todo el partido, apareció el corazón, el coraje, la garra.
Primero de Paolo Impini para pelear una pelota imposible y sacar una falta sobre la derecha, después la “viveza” de algunos para armar un tumulto en el área que terminó desconcentrando al fondo de Instituto, enseguida la inteligencia de Narese que mandó el centro pasado porque los anteriores habían sido rechazados por la defensa y para cerrar la historia, una tijera sensacional de Prost para meterla junto al travesaño y darle al Decano un triunfo de película.
Antes jugaron noventa minutos discretos. En la primera avisó Instituto, con una pelota de Mainero para el pique de Diego Soda, que quedó solo ante De León, tocó suave y sobre la línea terminó salvando Juan Sánchez, en un llamado de atención para Juventud, que salió con la idea de poner el juego en campo adversario, pero dejó espacios defensivos.
El Decano, esta vez con Prost y Blanco como delanteros, mantuvo la idea de llegar por los costados, progresando en la cancha con Narese por derecha, juntándose con Ramírez por ese lugar, aunque sin llevar demasiado riesgo sobre de arco de la “Gloria”.
Hasta que a los 28 llegó la apertura, luego de una falta sobre Tesuri sobre izquierda, el propio Renzo metió un tiro libre que se desvió en la barrera y por el segundo palo entró solo Alexis Blanco para empujarla y hacer explotar “La Vía”.
El gol empujó a Juventud, que volvió a desequilibrar por medio de Tesuri por izquierda. Sin embargo, de una jugada aislada, Instituto metió un pelotazo para la corrida de Yabale, que entró al área y De León lo terminó bajando, saliendo lejos e impactando sobre el lateral cordobés. La falta la tomó Paulo Rosales, que con mucha clase le cruzó la pelota a De León y puso las cosas iguales cuando se jugaban 33 minutos.
En el segundo tiempo Juventud salió decidido a buscar el arco de enfrente, abrió la cancha con Narese y Tesuri por los costados, mientras que Instituto esperó replegado y buscó contragolpear con Castelli y Soda.
A los 9 minutos hubo una clara falta de Nizzo sobre Narese, el volante de Instituto tenía amarilla y correspondía su expulsión, pero el árbitro Mariano González amonestó al volante de Juventud en un error grosero del árbitro, que no mostró compromiso con el partido y trató de sacarlo sin sobresaltos.
Juventud buscó presionar, adelantó sus líneas pero chocó contra la firmeza del fondo de Instituto, donde Agüero y Víctor López sacaron todo lo que cayó dentro del cuadro mayor. De contra, con la experiencia de Rosales, la “Gloria” tuvo buenas opciones, de hecho un remate del “10” pasó cerca del ángulo de De León.
Juventud intentó siempre, aún con dificultades para poder progresar en el campo, pero sin dejar de intentarlo, con el ingreso de Ada por Blanco y Pombo por Martinich, tratando de adelantar a Tesuri casi de delantero. A los 33 Ramírez robó en mitad de cancha, avanzó y puso un gran pase filtrado para la entrada de Prost, que definió de derecha cruzado, pero la pelota se fue al lado del palo de Olivera que solamente miraba.
El partido se moría empatado, hasta que en la última pelota, ya en tiempo agregado, Impini corajeó y sacó una falta sobre un lateral, Narese puso un centro largo que encontró a Prost en el segundo palo, el goleador metió una tijera sensacional que venció la resistencia de Olivera y desató un loco festejo en “La Vía”.
No hubo tiempo para nada más. Con coraje, sin sobrarle nada y dejando la piel, Juventud logró tres puntos de enorme valor para salir de la zona de descenso directo y seguir soñando con la permanencia.
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