Liga Entrerriana
La “Academia” volvió a ganar de forma agónica y forzó un quinto punto
En un partido emocionante y con un final para el infarto, Racing superó anoche como local a Neptunia 92-91, igualó la serie en dos y forzó la definición a un quinto y decisivo juego. El sábado, en el José María Bértora, se disputará el partido que determinará el campeón.
Por Pablo Díaz.
Foto: Ricardo Santellán.
Racing logró el objetivo de ganar sus dos partidos en el “Giusto” para forzar un quinto y definitivo juego, tras arrancar la serie 2-0 abajo. El triunfo de ayer para los Académicos contó con el aliciente que tuvo que cerrar obligatoriamente el partido con tres pibes sub 17, lo que activó todavía más el festejo por la victoria.
En el inicio del juego, Neptunia marcó diferencias desde su intensidad en la defensa, que le permitió hacer lo que mejor sabe: correr la cancha. Pero la principal arma del Tricolor en ese parcial no fueron los ataques rápidos sino los tiros a distancia (6 triples), con un Cristian Linares demoledor en esa faceta (3), para cerrar el primer cuarto con 12 puntos y colectivamente con una ventaja de 13.
En el segundo capítulo, el local ajustó en defensa para disminuirle el goleo a su rival, mientras que en ataque comenzó a emerger la figura de Matías Novello en la pintura (9 tantos en el parcial) y también encontró buenos pasajes de los perimetrales Gauna, Díaz y Fabricius, quienes aportaron a la causa con rompimientos a la canasta y con un triple cada uno. La bomba de Gauna permitió al local pasar al frente por primera vez en el juego (47-48) e irse al descanso arriba en el marcador.
A la vuelta de los vestuarios, Racing continuó con el buen trabajo demostrado en el cuarto anterior y logró el primer quiebre del encuentro a su favor (61-51), con un triple de Emanuel Beltrán, quien jugó su primer partido en esta final, la consistencia de Novello en el poste bajo (9), el aporte goleador de Brian Díaz y la sólida labor de Fabricio Gauna en la conducción.
Al mismo tiempo, los jugadores académicos se cargaron de faltas y fue el motivo del sufrimiento que padecería en el final. Por el lado de Neptunia, Maximiliano Morel con un par de conversiones a distancia y algunas acciones de corte al aro, fue lo más claro de la visita en el parcial. El dueño de casa llegó al último capítulo con 13 de luz.
En el inicio del cierre, Morel continúo con la buena puntería y lastimó detrás de 6,75, pero Beltrán respondió por la misma vía. Pablo Mander aportó lo suyo en la pintura y el local sostuvo la ventaja de dos dígitos (78-66).
Pero comenzó a perder jugadores por acumulación de faltas (primero Fabricius, luego Mander) y comenzó a sentir la diferencia en la rotación. La visita aprovechó el desgate de su rival y fue acortando distancia con un Linares decisivo cada vez que rompió al canasto para que su equipo achique a tres con un parcial de 14-4, ante un Racing que seguía perdiendo jugadores por faltas (Beltrán por dos antideportivas y Pennacino).
Esto obligó a Narbay a empezar a darle acción a los pibes que completan la planilla en un contexto caliente del juego y con la tensión a flor de piel. Gauna le dio algo de respiro a su equipo con un triple desde la esquina derecha, después de varias intentos sin convertir, pero en la reposición del rival perdió al “Oso” Díaz por faltas.
Panorama negro para el local que debía jugarse el futuro en esta final con sólo dos mayores (Matías Novello y Fabricio Gauna) y con todo el piberío menores de 17 años. Neptunia aprovechó la inexperiencia de su rival y se puso a tiro con un triple de Schaaf a falta de 1:11 (76-74), ante un Racing que dependía única y exclusivamente de Novello y Gauna en un momento caliente y tenso del juego.
Neptunia tuvo la posibilidad de igualar las acciones o pasar al frente, pero Grutzky perdió una pelota increíble en ataque, que permitió a Gauna correr y asistir a Novello, para que el “10” anote en bandeja y saque cuatro de ventaja (88-84) a 28 segundos para el cierre.
El entrenador visitante pidió minuto y a la vuelta de las acciones (con reposición en pista delantera) Morel en tres segundos respondió con una bomba y volvió a poner a uno a la visita.
En la reanudación, el Tricolor cortó con falta y Gauna anotó los dos lanzamientos libres para ponerse 90-87, con 21 segundos en el reloj. En el siguiente avance, la Academia también cometió falta y mandó a Sánchez a la línea, quien convirtió uno de los dos tiros (90-88).
Gauna tuvo que ir nuevamente a la zona de libres y convirtió sus dos lanzamientos, pero Linares metió un triple a falta de 13 segundos para dejar nuevamente a su equipo a tiro (92-91). Increíblemente, Racing perdió la pelota en una reposición en mitad de cancha, después de un minuto pedido por Narbay y a Neptunia le quedó la última bola para llevarse la victoria y el título.
La visita tuvo que reponer también desde el costado y Linares falló un doble inesperado, luego en el rebote tampoco pudo Sánchez, en una acción polémica donde pareció haber un contacto sobre el “7” tricolor, y la Academia -con el piberío en cancha- se terminó llevando un triunfo agónico que le permitió igualar la serie y forzar el deseado quinto juego en esta infartante final.
Ficha
Racing 92: F. Gauna 17, B. Díaz 11, M. Pennacino 4, M. Novello 26, P. Mander 13 (fi), T. Fabricius 9, E. Beltrán 12, B. Bentancourt 0, F. Kreick 0, M. Vela 0, M. Navone 0. DT: G. Narbay.
Neptunia 91: M. Lado 2, A. Pascual 0, C. Linares 28, F. Grutzky 14, A. Sánchez 12 (fi) M. Morel 19, J. Schaaf 16, F. Grattarola 0, A. Díaz 0. DT: F. Garciarena.
Parciales: 14-27, 48-47, 72-59.
Árbitros: G. Delsart, F. Giorello, D. Bernachi.
Estadio: A. Giusto.