San Lorenzo tuvo una ráfaga para poder quebrar a Quilmes
Sin brillar pero con mucho tesón para entrarle a un rival que se defendió con mucha gente, San Lorenzo venció 3 a 0 a Quilmes en el estadio Pedro Bidegain y alcanzó en la punta del torneo de Primera División a Boca Juniors.
En un duelo válido por la decimoséptima fecha, Ezequiel Cerutti y Ezequiel Ávila, a los 31 y 33 del segundo tiempo, liquidaron el pleito ante un “Cervecero” que sólo se dedicó a cuidar el cero en su arco.
En el segundo minuto de tiempo adicionado, Nicolás Blandi cerró la historia tras un muy buen pase del propio Ávila, clave con su ingreso. Quilmes, por su parte, terminó con diez hombres por la expulsión de Matías Sarulyte, quien vio la segunda amarilla a los 12 del complemento.
Sin Néstor Ortigoza, Matías Caruzzo, Paulo Díaz y Mathías Corujo en sus respectivas selecciones, Diego Aguirre armó el equipo que pudo y no el que quiso. Ante un adversario que aglutinó gente en defensa, San Lorenzo intentó contrarrestar esa situación con varios hombres llegando desde el mediocampo.
Sin embargo, esa línea compuesta por Cerutti, Belluschi, Merlini y Botta careció casi siempre de cambio de ritmo y tampoco se vio alguna variante como remate desde afuera del área para abrir el pleito. Con este escenario, San Lorenzo atacó mucho con sus laterales Rojas y Angeleri, pero sus centros no encontraron nadie que los terminara. Así las cosas, el local sólo tuvo una chance clara a través de un cabezazo que Rigamonti le tapó al propio Angeleri.
En el complemento, el local mostró mayor agresividad y un mayor cambio de ritmo, pero aun así le costaba romper el cerrojo de Quilmes. Pese a que habían crecido Belluschi y Botta en su juego, San Lorenzo no estaba fino en la definición y por eso no logró marcar en tres ocasiones que tuvieron el ex Tigre, Blandi y Mussis.
Justo cuando la gente ya comenzaba a corear el nombre de Leandro Romagnoli, el ingresado Ávila tuvo una situación clara después de un nuevo centro de Romagnoli, pero su definición se fue por arriba. No obstante, un desborde de Rojas por izquierda terminó en un centro que se “ensució”, Botta asistió de derecha a Cerutti y el “Pocho”, que no había tenido una buena jornada, definió cruzado para abrir el marcador.
Con la ventaja ya a su favor, San Lorenzo aprovechó las ventajas de un rival que tuvo que salir del fondo y terminó mostrando que, sin tanta gente en esa zona, no se defendía bien. Un pase largo de Botta y una magistral corrida de Ávila desde mitad de cancha llevaron a que el “Chimi” definiera a un palo para liquidar la historia. Luego, el ex Tiro Federal asistió a Blandi para que éste sellara un abultado resultado, que poco tuvo que ver con las complicaciones que mostró el “Ciclón” para romper el cero.
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