Herederos de la misma violencia
El peronismo en distintos períodos de su historia permitió que en su seno nacieran y crecieran grupos residuales cuyo único objetivo era sostener el régimen ejerciendo la violencia sea como fuera. La metodología ni importaba, en la medida que fueran fuerzas encubiertas con la única misión de contener a los opositores sea como fuere.
Bajo las órdenes de Patricio Kelly, con el transcurrir de los años Tacuara se fue constituyendo es una fuerza afín al peronismo. pero sin dar la cara.
Fueron los primeros indicios de una subversión callejera que se transformaría después en brazo secundario de Montoneros, ERP, y demás alimañas subversivas.
Pero apenas se afirmó la llamada “Revolución Libertadora” (para mí simplemente “fusiladora” de Valle y de Tanco, entre otros dignos oficiales del Ejército Argentino) la sede de Tacuaras fue demolida a cañonazos limpios. Fue el principio del fin. Y para esto hay que tener memoria, memoria completa total, pero no de museo, tratando de hacernos creer que sólo hubo una guerra entre buenos y malos, que es lo que siempre quisieron hacer creer para que la verdad no viera la luz.
Después con el pasar de los años, en los tiempos en que Raúl Alfonsín procuraba afianzar a nuestra débil y casi enclenque democracia, hizo su irrupción el grupo Quebracho, que nunca se supo si era de derecha o de izquierda. Tampoco fue fácil precisar qué buscaba “Quebracho”, aunque siempre llamó la atención que no lograrse hacer baza en el interior del país, de modo que su campo de acción se redujo a la ciudad autónoma de Buenos Aires y en el Gran Buenos Aires, haciéndose evidente que el rápido encarcelamiento de algunos de sus jefes terminó con la lenta desaparición de algo que fue una simple secta ideológica que por falta de adherentes se ha ido diluyendo en las calles porteñas, a tal punto que ya no se los ve blandiendo sus amenazantes garrotes. Tampoco se los han vuelto a ver con sus caras encapuchadas detrás de misteriosos pasamontañas.
El tiempo de “La Cámpora”
No sé si su nombre intenta sacar del olvido colectivo el apellido de un Presidente que en una noche oscura de nuestra historia ordenó abrir las puertas de las cárceles que permitió que cientos y miles de delincuentes subversivos, habiendo recobrado su libertad, pasaran a formar parte de la criminal subversión que asoló a la República y cuyo nefasto accionar es todavía una herida lacerante en el corazón de todos.
Reitero, la Cámpora pretende homenajear a un ex presidente que inauguró el espanto nacional que dio lugar al terrorismo de Estado.
Pero sea lo que fuere, en los peores años de Néstor Kirchner se produjo la aparición de “La Cámpora” con la no confesa pretensión de ser una especie de “brazo armado” de un kirchnerismo que ya empezaba a hacer agua por los cuatro costados.
Se vio a sus miembros acompañar a Kirchner y a su esposa en la virulenta campaña contra los medios, sobre todo contra “Clarín” y “La Nación. Me olvidaba de decir que el cabecilla de “La Cámpora” es Máximo el único hijo varón del matrimonio presidencial.
La muerte del padre le ha dado nuevos vuelos a sus sueños políticos, mientras se recuerda que Máximo se la juró a Hugo Moyano cuando se enteró del grave entredicho de su padre con el capo camionero, a quien acusaría de la crisis cardíaca del santacruceño.
Pese a que el FPV no definió todavía ninguna candidatura, es por lo menos sospechoso que ya estén apareciendo enormes afiches en los que se lee “CRISTINA CON TODO” con un pie de imprenta que identifica a La Cámpora proclamando a un kirchnerismo peronista, por lo que cabe interpretar o inferir que existirían varios peronismos. Sería interesante que Máximo y sus seguidores digan cuáles son los otros peronismos.
Otra curiosidad: si la Cámpora carece de personería política, quién la provee de fondos para la incipiente campaña ¿serán de Rentas Generales?
No menos extraño es la ligera actitud de algunos comunicadores, apresurados en anunciar el anclaje de la Cámpora como dando a entender que la misma es ya una fuerza electoral de fuste.
Por mi parte prefiero ser cauto a la hora de pregonar la llegada de la Cámpora, la que, desde ya les anticipo, viene con la misión de emprender un salvaje hostigamiento a los que no comulgan con la “doctrina” del prócer.
Les prevengo que, salvo los genuflexos de siempre o los que reciben el “recibito” mensual por los servicios prestados a Olivos podrían ser incomodados con llamaditos o con la aparición de furtivos en autos sin patentes o vidrios polarizados, para darnos el siguiente mensajito “¡cuidado con lo que vas a escribir…”
¿Caerá en desgracia?
Dando razón o fundamento a lo que les he venido anticipando, en los últimos días, arreciaron las versiones o comentarios sobre inminentes cambios en el Gabinete, cuyo gran jefe estaría en la cuerda floja.
Sobre todo, luego de su exabrupto radial, la suerte de Aníbal Fernández estaría poco menos que echada, aunque su salida podría demorarse un poquito más por cuanto el Poder Ejecutivo siempre se abstuvo de prescindir de un ministro con la idea que se los reemplaza por presión de los medios.
Sin embargo el episodio del Jefe de Gabinete con Mauro Viale, cuando sin saber que estaba en el aire, y tras sostener que “¡a la botonera la sigo manejando yo” profirió un insulto que ningún funcionario de bien debería haber dicho: “QUE LOS PERIODISTAS ME CHUPEN LOS ……
Hacia un corralito “legal”
Sin necesidad de apelar a una resolución extraordinaria, diera toda la impresión que el país se encuentra prisionero de un “corralito virtual”. Ya no es necesario restringirle a la gente un normal acceso al dinero: ahora es el Estado el que impone el corralito virtual al estar “secando” los bancos y cajeros, sin que hasta el día de hoy se haya salido desde la Rosada a darle explicación a un fenómeno que jamás nadie pensó se produciría.
La única voz que se escuchó hasta ahora es la titular del BANCO CENTRAl: fiel a la estrategia de sus “superiores” (Cristina, Fernández, etc.), Marcó del Pont, muy suelta de cuerpo, salió a culpar por la falta de moneda a sus antecesores.
Estamos en presencia de una verdadera vergüenza nacional, como es la de tener que imprimir dinero en el exterior (Brasil, concretamente) pese a que el Estado posee su propia casa de la moneda…
Otra curiosidad contrariando su costumbre del bla bla que enferma, la Presidenta no utilizó esta vez Cadena Nacional para explicarle al país el por qué de la escasez de circulante, lo que hubiera evitado darle aire a lo del ”corralito” virtual. Ha preferido irse otra vez de paseo al exterior sin explicarnos nada. Es que a ella es difícil que le falte dinero.
Reedición de un reality a lo Guillermo
El nuevo portazo del campo no ha sido nada más que la consecuencia de otra trastada de Guillermito el terrible.
Es que mientras a la Mesa de Enlace se le informaba de las nuevas medidas implementadas para solucionar lo del trigo, en otro lugar de Buenos Aires el secretario de Comercio Interior lo negaba todo.
Conclusión: en el Gobierno coexisten dos poderes paralelos, uno más desalmado que el otro.
¡Pobre Argentina! ¡En qué manos ha caído…
El jueguito del juego
Entre Ríos se encuentra atrapado en un conflicto más que complicado que pone en riesgo la actividad de los casinos en toda la Provincia.
Pese a que Urribarri ha vuelto a desmentir que se piense privatizar el juego en la Provincia, muchos, y con sobradas razones, lo dudan: es que entre bambalinas está la presencia de Lázaro Báez (otro de los inventos del prócer) cuyo gran sueño es quedarse con todo el juego en la Argentina.
Siendo que nuestro Gobernador siempre fue un incondicional de los Kirchner, es lógico que la ATE desconfíe de él, dispuesto a no dejar que Lazarito, de la mano de Cristina, haya pensado en hacer de Entre Ríos una de sus grandes inversiones, a no ser que se le aparezca un nuevo Luis Juez en el camino, y que supo echarlo de Córdoba sin miramiento alguno.
Hasta el viernes
El vigía
Fueron los primeros indicios de una subversión callejera que se transformaría después en brazo secundario de Montoneros, ERP, y demás alimañas subversivas.
Pero apenas se afirmó la llamada “Revolución Libertadora” (para mí simplemente “fusiladora” de Valle y de Tanco, entre otros dignos oficiales del Ejército Argentino) la sede de Tacuaras fue demolida a cañonazos limpios. Fue el principio del fin. Y para esto hay que tener memoria, memoria completa total, pero no de museo, tratando de hacernos creer que sólo hubo una guerra entre buenos y malos, que es lo que siempre quisieron hacer creer para que la verdad no viera la luz.
Después con el pasar de los años, en los tiempos en que Raúl Alfonsín procuraba afianzar a nuestra débil y casi enclenque democracia, hizo su irrupción el grupo Quebracho, que nunca se supo si era de derecha o de izquierda. Tampoco fue fácil precisar qué buscaba “Quebracho”, aunque siempre llamó la atención que no lograrse hacer baza en el interior del país, de modo que su campo de acción se redujo a la ciudad autónoma de Buenos Aires y en el Gran Buenos Aires, haciéndose evidente que el rápido encarcelamiento de algunos de sus jefes terminó con la lenta desaparición de algo que fue una simple secta ideológica que por falta de adherentes se ha ido diluyendo en las calles porteñas, a tal punto que ya no se los ve blandiendo sus amenazantes garrotes. Tampoco se los han vuelto a ver con sus caras encapuchadas detrás de misteriosos pasamontañas.
El tiempo de “La Cámpora”
No sé si su nombre intenta sacar del olvido colectivo el apellido de un Presidente que en una noche oscura de nuestra historia ordenó abrir las puertas de las cárceles que permitió que cientos y miles de delincuentes subversivos, habiendo recobrado su libertad, pasaran a formar parte de la criminal subversión que asoló a la República y cuyo nefasto accionar es todavía una herida lacerante en el corazón de todos.
Reitero, la Cámpora pretende homenajear a un ex presidente que inauguró el espanto nacional que dio lugar al terrorismo de Estado.
Pero sea lo que fuere, en los peores años de Néstor Kirchner se produjo la aparición de “La Cámpora” con la no confesa pretensión de ser una especie de “brazo armado” de un kirchnerismo que ya empezaba a hacer agua por los cuatro costados.
Se vio a sus miembros acompañar a Kirchner y a su esposa en la virulenta campaña contra los medios, sobre todo contra “Clarín” y “La Nación. Me olvidaba de decir que el cabecilla de “La Cámpora” es Máximo el único hijo varón del matrimonio presidencial.
La muerte del padre le ha dado nuevos vuelos a sus sueños políticos, mientras se recuerda que Máximo se la juró a Hugo Moyano cuando se enteró del grave entredicho de su padre con el capo camionero, a quien acusaría de la crisis cardíaca del santacruceño.
Pese a que el FPV no definió todavía ninguna candidatura, es por lo menos sospechoso que ya estén apareciendo enormes afiches en los que se lee “CRISTINA CON TODO” con un pie de imprenta que identifica a La Cámpora proclamando a un kirchnerismo peronista, por lo que cabe interpretar o inferir que existirían varios peronismos. Sería interesante que Máximo y sus seguidores digan cuáles son los otros peronismos.
Otra curiosidad: si la Cámpora carece de personería política, quién la provee de fondos para la incipiente campaña ¿serán de Rentas Generales?
No menos extraño es la ligera actitud de algunos comunicadores, apresurados en anunciar el anclaje de la Cámpora como dando a entender que la misma es ya una fuerza electoral de fuste.
Por mi parte prefiero ser cauto a la hora de pregonar la llegada de la Cámpora, la que, desde ya les anticipo, viene con la misión de emprender un salvaje hostigamiento a los que no comulgan con la “doctrina” del prócer.
Les prevengo que, salvo los genuflexos de siempre o los que reciben el “recibito” mensual por los servicios prestados a Olivos podrían ser incomodados con llamaditos o con la aparición de furtivos en autos sin patentes o vidrios polarizados, para darnos el siguiente mensajito “¡cuidado con lo que vas a escribir…”
¿Caerá en desgracia?
Dando razón o fundamento a lo que les he venido anticipando, en los últimos días, arreciaron las versiones o comentarios sobre inminentes cambios en el Gabinete, cuyo gran jefe estaría en la cuerda floja.
Sobre todo, luego de su exabrupto radial, la suerte de Aníbal Fernández estaría poco menos que echada, aunque su salida podría demorarse un poquito más por cuanto el Poder Ejecutivo siempre se abstuvo de prescindir de un ministro con la idea que se los reemplaza por presión de los medios.
Sin embargo el episodio del Jefe de Gabinete con Mauro Viale, cuando sin saber que estaba en el aire, y tras sostener que “¡a la botonera la sigo manejando yo” profirió un insulto que ningún funcionario de bien debería haber dicho: “QUE LOS PERIODISTAS ME CHUPEN LOS ……
Hacia un corralito “legal”
Sin necesidad de apelar a una resolución extraordinaria, diera toda la impresión que el país se encuentra prisionero de un “corralito virtual”. Ya no es necesario restringirle a la gente un normal acceso al dinero: ahora es el Estado el que impone el corralito virtual al estar “secando” los bancos y cajeros, sin que hasta el día de hoy se haya salido desde la Rosada a darle explicación a un fenómeno que jamás nadie pensó se produciría.
La única voz que se escuchó hasta ahora es la titular del BANCO CENTRAl: fiel a la estrategia de sus “superiores” (Cristina, Fernández, etc.), Marcó del Pont, muy suelta de cuerpo, salió a culpar por la falta de moneda a sus antecesores.
Estamos en presencia de una verdadera vergüenza nacional, como es la de tener que imprimir dinero en el exterior (Brasil, concretamente) pese a que el Estado posee su propia casa de la moneda…
Otra curiosidad contrariando su costumbre del bla bla que enferma, la Presidenta no utilizó esta vez Cadena Nacional para explicarle al país el por qué de la escasez de circulante, lo que hubiera evitado darle aire a lo del ”corralito” virtual. Ha preferido irse otra vez de paseo al exterior sin explicarnos nada. Es que a ella es difícil que le falte dinero.
Reedición de un reality a lo Guillermo
El nuevo portazo del campo no ha sido nada más que la consecuencia de otra trastada de Guillermito el terrible.
Es que mientras a la Mesa de Enlace se le informaba de las nuevas medidas implementadas para solucionar lo del trigo, en otro lugar de Buenos Aires el secretario de Comercio Interior lo negaba todo.
Conclusión: en el Gobierno coexisten dos poderes paralelos, uno más desalmado que el otro.
¡Pobre Argentina! ¡En qué manos ha caído…
El jueguito del juego
Entre Ríos se encuentra atrapado en un conflicto más que complicado que pone en riesgo la actividad de los casinos en toda la Provincia.
Pese a que Urribarri ha vuelto a desmentir que se piense privatizar el juego en la Provincia, muchos, y con sobradas razones, lo dudan: es que entre bambalinas está la presencia de Lázaro Báez (otro de los inventos del prócer) cuyo gran sueño es quedarse con todo el juego en la Argentina.
Siendo que nuestro Gobernador siempre fue un incondicional de los Kirchner, es lógico que la ATE desconfíe de él, dispuesto a no dejar que Lazarito, de la mano de Cristina, haya pensado en hacer de Entre Ríos una de sus grandes inversiones, a no ser que se le aparezca un nuevo Luis Juez en el camino, y que supo echarlo de Córdoba sin miramiento alguno.
Hasta el viernes
El vigía
Este contenido no está abierto a comentarios