El nuevo caño de impulsión entraría en servicio en enero
Desde el municipio se gestionó una ampliación presupuestaria ante el Ente Nacional de Obras Hídricas de Saneamiento, para empalmar al nuevo caño madre de impulsión de agua cruda con los decantadores de la planta potabilizadora. Se espera que la nueva cañería entre en servicio en enero.
La obra del tendido de la nueva cañería de impulsión de agua cruda ya fue terminada por la empresa José Eleuterio Pitton y antes de ser entregada a la municipalidad se realizó la prueba hidráulica de la cañería; no obstante hasta que no se termine la conexión de la nueva cañería con los decantadores el nuevo tendido no podrá llevar agua hasta la planta potabilizadora.
El mes pasado finalmente el Ente Nacional de Obras Hídricas de Saneamiento (ENHOSA) destrabó la partida de 1,5 millones de pesos para la ejecución de este adicional, cuyos trabajos estarían terminados en enero del año que viene.
El director de Obras Sanitarias Federico Villanueva, explicó que: “La cañería nueva se conecta a una cámara distribuidora que conduce el agua cruda a los distintos decantadores”.
No obstante la nueva línea de impulsión que representa la primera etapa del plan maestro de Obras Sanitarias, no tendrá un significativo impacto en mejorar la presión de agua en los barrios, pero si traerá tranquilidad a la Municipalidad y los técnicos de Obras Sanitarias, al evitar futuras fisuras en los caños, producto de un corte de luz o golpe de ariete, que podría llegar a interrumpir el servicio por horas.
Otras de las ventajas del nuevo sistema es que contará con un dispositivo de telecontrol y contra golpe de ariete en la toma de agua, que tantos problemas causó en la cañería vieja, cada vez que la electricidad se cortaba en la ciudad.
Además un sistema de telemetría, le permitirá al laboratorio de la planta, contar con información periódica del PH , la turbiedad, caudal y color del agua cruda que ingresa a los decantadores.
“Por más que subamos el caudal de agua cruda que llegue a la planta, no tenemos capacidad de potabilizarla, porque en este momento tenemos tres decantadores y además en la distribución de agua no se puede levantar mucha presión porque hay caños muy viejos. Esto nos va a permitir ricamente poder transportar en forma segura el agua a la planta”.
La vieja cañería, que fue colocada en la década del 70, quedará como un sistema auxiliar, para ser empleada cuando la nueva línea tenga que ser limpiada o se le tenga que hacer mantenimiento.
La nueva cañería está construida con polietileno de alta densidad, preparado para soportar alta presión. Los caños en el sector de la toma de agua, son de 800 mm de diámetro y se reduce a 710 mm al llegar a la planta potabilizadora.
En tanto Villanueva, desestimó que se pueda terminar de concretar en el transcurso de la actual administración municipal por faltas de fondos en el ENHOSA la modernización de la planta potabilizadora. La segunda etapa del plan maestro de Obras Sanitarias, comprende la total automatización de la planta y la construcción de una cisterna subterránea de 6 millones de litros y la red de distribución de la ciudad.
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