La producción local de lana, una alternativa para fomentar
Las ovejas Pampinta y sus cruzamientos generan la posibilidad de incursionar en un nicho nuevo de producción: la lana.
Apenas nacidos los cuatrillizos de una oveja Pampinta el 20 de julio pasado, el productor Rodolfo Cassarino compartió la noticia con EL ARGENTINO.
En la ocasión, explicó que la Pampinta es la raza ovina diseñada por el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) de La Pampa que responde a los desafíos de escasez de agua por el cambio climático, con buena lana entrefina y productora de carne y leche.
A dos meses del alumbramiento, quedan tres corderos, a causa, seguramente,
cuando son nacimientos múltiples, siempre hay un animalito más débil.
“Siguen al pie de la madre, es decir, mamando -comentó, para agregar “estoy haciendo una serie de cruzamientos, y apuntando a la producción de lana. Para esto necesitaré el acompañamiento de hiladoras, para trabajar esta veta, apoyar este trabajo y todo lo que se pueda hacer en ese entorno”.
Cassarino apuesta a la producción de esta raza creada por el INTA de La Pampa (de allí su nombre) que aquí cruzó con un ternero Texel traído del Uruguay.
“En el caso de la carne, tengo la suerte de poder dársela a mis huéspedes, no obstante entiendo que deberíamos fomentar su consumo, ya que lentamente nos iremos quedando sin vacas a causa de las políticas actuales”, consideró, ampliando lo dicho al consumo de carne aviar y porcina.
“Pero mi función no es decir qué hay que hacer sino contar mi experiencia para que otros puedan sumarse, esto es generar trabajo y ampliar las posibilidades productivas”, se entusiasmó, agregando “la raza Pampinta y sus cruzamientos nos permitirían darle valor agregado a sus productos: carne, lana y cuero”.
“Una de las alternativas que veo es la de la lana. A la raza Pampinta se llegó buscando una productora de carne y leche y como derivado, de lana. Son animales muy magros, que no tienen desperdicio de grasa”.
“La oveja pampinta y sus cruzas -continuó- tiene como característica ser multípara, muy dócil, muy buna lecheras, por lo tanto puede criar muy bien a sus múltiples crías. Y la lana, que es muy fina (“más bien estoposa”, aclaró) se puede hilar”.
“Una vez hecha la esquila, comenzaremos las pruebas de hilado”, adelantó, para terminar la charla con una propuesta: “Para mantenerse en el mercado, no hay que esperar a que el estado diga qué debemos producir sino ser creativos para llevar adelante algo sustentable”.
Y en esto de producir con sustentabilidad, ahora incursionará en el hilado de esta lana, con lo que se entusiasma, se estará abriendo un nicho de importancia “por el desarrollo que esto puede tener”.
“En el caso de un pequeño productor que tenga una majadita, podrá sumar la producción de lana, que podría hilar su esposa”, propuso y agregó “así como se han potenciado otras, ¿por qué no pensar en nuevas alterativas de producción?”.
“Las posibilidades son enormes”, respondió al concluir la entrevista.
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