GRAVES INCIDENTES EN JUJUY
Partidarios de Milagro Sala ingresaron a la Legislatura, provocaron incendios y destrozaron automóviles
Partidarios de Milagro Sala, militantes del Polo Obrero e integrantes de otras organizaciones sociales realizaron un salvaje ataque a la Legislatura de la provincia de Jujuy luego de una sesión en la que participó el gobernador Gerardo Morales y durante la cual se juró por la nueva constitución que es resistida por el kirchnerismo. Como consecuencia, se reportaron decenas de heridos y al menos 35 detenidos. En la zona perdura la tensión.
Los incidentes empezaron minutos antes del mediodía. Los manifestantes arrojaron piedras, prendieron fuego y destrozaron vehículos. También dieron vuelta autos que estaban estacionados para ser usados como barricada. Un grupo logró entrar a oficinas de la Legislatura y causar un foco ígneo, qué rápidamente fue controlado por Bomberos y por personal policial.
Además, los atacantes rompieron vidrieras de locales y golpearon a policías y a profesionales que realizaban la cobertura periodística de los hechos. Por ejemplo, Santiago Martella, un periodista del canal de noticias TN, fue agredido mientras salía en vivo relatando lo ocurrido.
Si bien no hubo precisiones sobre el número de heridos, Pablo Jure, titular del SAME Jujuy, contó en horas de la tarde que estaban asistiendo “entre 50 y 70 pacientes”, la mayoría de ellos con lesiones a consecuencia “de las pedradas y las balas de goma”. “Hasta el momento, uno solo de los heridos está considerado de mayor gravedad, con traumatismo de cráneo”, agregó el médico y dijo que las personas afectadas fueron derivadas a los hospitales Pablo Soria (el principal de la ciudad capital) y San Roque (que se ubica frente a la Legislatura y “pudo hacer la mayor contención”, señaló Jure), además del Centro de Especialidades Norte, un nosocomio de tercer nivel y ambulatorio.
El gobernador Morales desistió antenoche de reformas en dos artículos (el 50 y el 36) que generaban el rechazo de comunidades originarias. Pese a ello, este martes se repitieron graves incidentes. El mandatario provincial culpó al gobierno nacional por incentivar y “financiar” las protestas.
“Hago responsable al presidente Alberto Fernández y a la vicepresidenta Cristina Kirchner de la extrema violencia que está viviendo la provincia de Jujuy”, aseguró Morales este mediodía en medio de las protestas violentas.
Y agregó: “Los violentos no nos van a torcer el brazo, a 40 años de democracia repudio y llamo a todos los argentinos a repudiar lo que está haciendo el kirchnerismo y el Frente de Izquierda en Jujuy”.
Alejandro Nieva, presidente de la Comisión Redactora de la Constitución, informó que los manifestantes llegaron a La Legislatura y tiraron las vallas de seguridad que habían sido dispuestas esta mañana. “Son grupos kirchneristas, incluso vinieron de otras provincias, para generar este caos que se está viviendo acá”, señaló.
Fuentes oficiales del gobierno local aseguraron que en los últimos días llegaron manifestantes de otras provincias e incluso desde Bolivia para sumarse a la ola de violencia. Por eso sospechan que hubo un plan orquestado para provocar los ataques. Dicen además que recientemente estuvo el avión oficial Tango 04 en Jujuy y realizan una sugestiva pregunta: “¿A quiénes transportó?”.
La nueva constitución jujeña, aprobada el 15 de junio e impulsada por Morales, es el eje de la controversia y de las movilizaciones de los últimos cuatro días. Mientras la atención se dirige al ejido urbano capitalino, en el interior jujeño los focos de protesta persistían.
El conflicto en Jujuy escaló al plano nacional, abandonando su impronta local. A Jujuy viajó el secretario de Derechos Humanos de la Nación, Horacio Pietragalla Corti, para denunciar casos de represión en las protestas de los últimos días y exigir la liberación de los detenidos.
La Iglesia llamó al diálogo
La Iglesia emitió un comunicado este martes ante los incidentes que se registraron en la provincia de Jujuy por la reforma de la Constitución, donde partidarios de Milagro Sala, militantes del Polo Obrero e integrantes de otras organizaciones sociales realizaron un salvaje ataque a la Legislatura de la provincia luego de una sesión en la que participó el gobernador Gerardo Morales y durante la cual se juró por la nueva constitución que es resistida por el kirchnerismo. Como consecuencia, se reportaron decenas de heridos y al menos 35 detenidos. “Pedimos la inmediata pacificación social y convocarse al diálogo”, expresó la Prelatura de Humahuaca.
En particular, la Prelatura de Humahuaca, por medio de la Pastoral Aborigen y la Pastoral Social, recordaron el acompañando que realizaron a “los reclamos de los distintos sectores de la sociedad, de un modo particular, de las Comunidades Originarias de nuestra zona”. “La Prelatura y sus áreas pastorales que acompañan el quehacer de la vida eclesial y social, han propuesto y expresado la importancia del diálogo, como mecanismo para buscar posibles soluciones a los distintos reclamos y problemas. De igual manera, no recurrir a la confrontación y la violencia, recursos y conductas que nunca llevan a buen término cuando se está buscando soluciones a un conflicto”, expresaron.
“Ante los hechos de violencia que están ocurriendo en nuestra provincia, nuevamente convocamos a todos los sectores de la sociedad, principalmente a nuestros gobernantes, dirigentes políticos y sociales, a apostar por la inmediata pacificación social y convocarse al diálogo, un diálogo donde no primen los intereses políticos, ideológicos, sectoriales, etc, sino que se tienda a establecer la convivencia y la paz social, un bien y un derecho de todos los ciudadanos”, agregaron.
En el mismo comunicado, repudiaron “toda confrontación y violencia, todo atropello a la libertad y la dignidad de las personas”. “En este momento crítico, seguimos creyendo y apostando por el diálogo, principio de solución a todo problema o conflicto. Apelamos no sólo a nuestros gobernantes y dirigentes políticos y sociales, sino a todo el pueblo jujeño, a aportar nuestro granito de arena al bien de la pacificación en nuestra provincia”, concluyeron.
También se sumó el padre obispo Daniel Fernández, quien publicó una carta titulada “Una jornada para olvidar”. “Es lo que estamos viviendo hoy como pueblo jujeño. Hace unos días invitábamos a tener en cuenta que debíamos escucharnos pacientemente para lograr los mayores consensos en la resolución de los problemas que nos conciernen a todos. Quizá habría que haber empleado más tiempo en el arte de dialogar y no haber llegado a la situación que se generó hoy”, expresó.
Según la visión del obispo, Jujuy está “en un punto crítico que nos parece que exige deponer toda actitud intransigente y como expresa el obispo de Humahuaca: ‘convocar a todos los sectores de la sociedad, principalmente a nuestros gobernantes, dirigentes políticos y sociales, a apostar por la inmediata pacificación social y convocarse a un diálogo donde no primen los intereses políticos, ideológicos, sectoriales, sino que se tienda a establecer la convivencia y la paz social, un bien y un derecho de todos los ciudadanos’”.
“No podemos estar unos contra otros, sino que todos debemos estar unidos en lo único que interesa que es el bien del pueblo jujeño. De modo particular, rechazamos toda violencia, venga del lado que venga porque atenta contra la dignidad de cada persona humana y lleva a un punto sin retorno o del que es muy difícil volver. Habrá que examinar muy detenidamente por qué hemos llegado a la situación que vivimos hoy para ponerle pronto remedio y recomenzar desde bases sólidas y desde consensos compartidos. Que cada uno haga su aporte con grandeza y generosidad”, concluyó.