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Diario El Argentinoviernes 29 de marzo de 2024
Deportes

TC: Aventín hizo lo que debía y se coronó campeón

TC: Aventín hizo lo que debía y se coronó campeón

Diego Aventín (Ford) finalmente hizo historia en Buenos Aires al obtener su primer campeonato de Turismo Carretera tras 14 años de trayectoria luego de terminar como escolta del chaqueño Juan Manuel Silva (Ford), que se impuso de punta a punta la carrera disputada en el Autódromo “Oscar y Juan Gálvez” de Buenos Aires.


En el marco de la última fecha de la temporada 2013, el “Pumita” de Morón fue el gran protagonista de una jornada que convocó una multitud al coliseo porteño y desató una fiesta entre lo hinchas de Ford.
De esta manera “El Pumita” cerró un círculo perfecto al convertirse en la tercera generación de la familia Aventín en lograr un campeonato de TC. Sumó su nombre a la lista de campeones del Tc en la que ya estaban su padre Oscar, bicampeón en las temporadas 1991-1992, y su tío Antonio, quien obtuvo el título en 1981.
“Hace 14 años que corro en Turismo Carretera y son 14 años que me persiguen las críticas, siempre trabajamos bien y no se nos venían dando los resultados, se lo dedico a toda mi familia a mi equipo, ellos resolvieron todo por mi, estoy muy feliz este año y es gracias a ellos”, expresó eufórico Aventín tras la carrera.
El piloto estuvo varias veces cerca de coronarse campeón del TC pero circunstancias diversas se lo impidieron. Estigmatizado por su apellido Diego debió morder varias veces el polvo antes de calzarse la corona por primera vez en la historia del TC .
El número 1 en las puertas de su auto era una materia pendiente desde el 2006 cuando un problema técnico en los aros del motor de su Ford le hizo añicos los sueños del campeonato tras aquella recordada carrera de La Plata.
Sin embargo siguió luchando para alcanzar el objetivo deseado el que alcanzó tras 16 carreras y tres victorias. Antes de coronarse Aventín ya había ganado en Paraná, San Luis y La Pampa, este último un triunfo clave para sus aspiraciones.
En esta ocasión, corrió en función del título y no se expuso más allá de los riesgos lógicos de una final. Tras marcar el camino en las tandas clasificatorias y quedarse con la primera serie, sabía que sólo una catástrofe deportiva lo iba a privar de tocar la gloria con las manos.
Si bien Silva se hizo dueño de la punta en la largada y no la soltó hasta la bandera a cuadros, Aventín se dedico a manejar procurando no cometer errores a lo largo de las 24 vueltas con que contó la final.
Así, como un espectador de lujo siguió de cerca los vaivenes propios de una final hasta terminar la prueba una vuelta antes por la inexplicable invasión del público. Durante el desarrollo de la final El Pumita siempre estuvo delante de sus rivales directos en todas las vueltas, algo que le permitió mantenerse tranquilo en pos de quedarse con la Copa de Oro.
Si bien él había anunciado que este sería el último año en las pistas, su futuro hoy está en duda, ya que si bien es vicepresidente de la ACTC, es evidente que aún tiene mucho hilo en el carretel.


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