Secciones
Diario El Argentino
Secciones
Diario El Argentinojueves 28 de marzo de 2024
La Mujer

Para ella, malvinizar es la tarea

Para ella, malvinizar es la tarea

Se dedica de lleno a su familia -tiene seis hijos- su casa, la escuela, sus alumnos particulares, a la causa Malvinas (que definió “es un sentimiento”), que para ella implica integrar la Comisión nacional de familiares de caídos en las islas, así como la delegación Gualeguaychú que está en formación y fusiona los centros de veteranos, soldados y familiares, que tuvimos antes. Además conduce “Voces de héroes -



Maestra de primaria, hoy vicedirectora de la escuela 105 “Islas Malvinas”, se define Malvinera y se ha propuesto la tarea de malvinizar.
Y le disgustó, como a otros familiares de caídos en la guerra, el viaje hecho el 10 de marzo pasado por una delegación encabezada por el premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel, junto a Nora Cortiñas ( Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora) y el sacerdote José María Di Paola, porque como sostuvo, “ocuparon un viaje que no es económico y que nosotros estamos reclamando al Estado hace mucho para que nuestras mamás y papás de Malvinas, personas de entre 80 y 86 años puedan ir a despedirse de los hijos que tienen allá. Y todavía no hemos logrado que se nos conceda ese viaje que gestionamos con respeto y esperanza”.
“Y de pronto, de la nada, aparece un grupo de personas que no nos representa, no invitó ni consultó a nadie de nosotros, esgrimiendo esos carteles pidiendo “identidad a los 123 NN - memoria, verdad, justicia, soberanía”.
“Cuando vimos esa imagen que recorrió el mundo, que se replicó en las redes sociales, ese pedido de “identidad a los NN” sentimos un dolor enorme porque esos cuerpos que están en Malvinas son nuestros hermanos. Y no precisamos identidad. Este reclamo no es nuestro porque los caídos son 649 y tienen nombre y familias. La historia Malvinas no tiene NN. En todo caso, hay que reclamar la localización de los cuerpos, como varias mamás, que lo piden, pero no es lo mismo localizarlos que identificarlos”, enfatizó.
Con la misma firmeza, agregó después de una pausa “nos preocupa que hayan usado nuestros muertos, que son los muertos de la Patria, para reclamar algo que nosotros no queremos y no les compete”.
“Además, cuando regresaron a Buenos Aires, fuimos a esperarlos la Comisión nacional de familiares, la confederación nacional de veteranos y muchos veteranos de guerra que se sintieron heridos. En ese momento, Pérez Esquivel prometió llamarnos, y estamos esperando todavía que lo haga para sentarnos a conversar”.
Más aquí en el tiempo, el domingo pasado, la Comisión de familiares de caídos en Malvinas se reunió con el Presidente Macri.
“Yo no fui porque opté por el acto en Gualeguaychú. Fue una reunión esperanzadora. Al menos, logramos cambiar el término de identificación por el de localización”, relató, adelantando “queremos que una vez localizados los cuerpos, no se toquen. Que queden en Malvinas. Porque sabemos que Inglaterra quiere sacárselos de encima y una vez que lo haga, de Argentina no quedará nada”.
“Por eso en cada acto digo Malvinas tiene héroes que están custodiando las islas”, agregó y entonces preguntamos ¿por qué fue tan importante este acto del 2 de abril? y Nora compartió “estamos trabajando en la unión de los grupos de veteranos y este domingo se los pudo ver a todos juntos posando para la foto. Para mí eso fue una caricia en el alma, y me da fuerzas para seguir. Por eso nos propusimos integrar una comisión de veteranos de guerra de Malvinas y familiares de caídos donde todos se sientan representados. Esa es la propuesta”.
¿Qué tan duro caló la desmalvinización?, le preguntamos y Nora dijo “creo que nos urge revisar la historia. La desmalvinización la cambió, mezclando todo.
Y ya como la maestra y la hermana que confluyen en la malvinera, enseñó “era necesario hacer el izamiento de la bandera argentina en las islas para no perderlas definitivamente. En algún momento de ese año había que hacerlo, con el gobierno que fuera. Las recuperamos y volvimos a perderlas...”
“No ganamos la guerra. Perdimos la batalla. Los ingleses nos superaron en tecnología, poder, eran profesionales pagos, que venían por un sueldo. Pero no nos ganaron en el amor a la Patria. Eso lo define bien la canción de Raúl Prochetto, Reina madre, (“Pero madre, ¿qué está pasando acá? Son igual a mí y aman este lugar, tan lejos de casa, que ni el nombre recuerdo. ¿Por qué estoy luchando? ¿Por qué estoy matando?”) y los argentinos peleaban por ese pedacito de soberanía, con un amor a la Patria enorme”.
“Obviamente -consideró- la guerra destruye a los pueblos, por eso creo que el camino es el diálogo, la concientización y el amor a la Patria”.
Y Nora está dispuesta a trabajar por esto, mientras como dijo, “Dios me lo permita”.

 

Silvina Esnaola






Este contenido no está abierto a comentarios