Un mural que da vida al Hogar de Ancianos y busca un cambio social

 

Flores en tonos naranjas amarronados y rojos oscuros, con ocres y un fondo azul brillante, están cambiando por completo el aspecto del frente del Hogar de Ancianos de la ciudad. La tarea es encabezada por el artista local "Gurí", tal y como firma sus obras,  en compañía de un grupo de jóvenes que comparten sus ideales y también su mano para el arte.

En diálogo con EL ARGENTINO, este joven que ha trascendido las fronteras de la ciudad con sus murales y a quien no le gusta darse a conocer si no es bajo el pseudónimo de Gurí, explicó que la iniciativa surgió de la mano de la agrupación Vientos de Cambio.

"Vengo trabajando en Gualeguaychú mucho con los niños, pero me di cuenta que hay dos sectores vulnerables en toda sociedad: los niños y los ancianos y a partir de eso es que nos unimos con Vientos de Cambio –agrupación que principalmente organiza el desfile a beneficio del Hogar- para cambiar el paisaje cotidiano a este edificio antiguo, que tiene un color gris y parece gastado".

"La idea es cambiar esa imagen y darle color. Pintar para los abuelos para que cuando lleguen tengan un recibimiento distinto", agregó. En principio pintarán el frente pero también lo harán en el patio interno y en otra pared exterior.   "La idea es poder transformar... en este sistema a los ancianos se los descarta, quedan para lo último, es algo de lo que no quieren hacerse cargo los gobiernos", dijo Gurí y agregó: "todos vamos a pasar por eso y no hay que olvidar que el tiempo trae la sabiduría, creo que hay que escucharse, participar y ayudar".

 

El mural

 

El artista explicó que para diseñar este mural estuvo en el lugar y lo planificó con tiempo, tratando "de no hacer algo tan saturado como es mi estilo. Es un desafío para mí también porque quise hacer algo más tranquilo y que transmita alegría y cierta calidez, por eso elegí flores y una paleta de tonos fríos y cálidos, tonos quebrados, en contraste para que den sensación de paz".

Este artista autodidacta indica que en parte aprendió lo que sabe de otros artistas, en sus viajes y en la calle, "me he nutrido mucho de grandes artistas", aseguró.

"Esto es algo que me llena el alma hacer. Yo veo el arte como una revolución que tenga su identidad y un mensaje.  Más allá de lo estético la profundidad en el arte es lograr un cambio social, por eso pinto en la calle. Para que el arte sea algo participativo y para el pueblo", sostuvo Gurí.

Todos son bienvenidos a Ituzaingó entre Rosario y 9 de Julio, se pueden acercar con mate, algunas galletitas, agua fresca y también se pueden donar esas pinturas que han quedado en desuso y que podrán ser utilizadas en las demás obras que Gurí y sus compañeros piensan plasmar en el Hogar de Ancianos de la ciudad.