La mamá de Nahir expresó: “¡Perdón hija por no haberte cuidado!”

El debate se había reanudado a las 9:05, con el aporte de cinco testigos propuestos por la defensa técnica de la imputada, de los cuales los tres primeros no hicieron aportes sustanciales.
El primero en declarar fue Walter José Giménez, entrenador en el gimnasio donde concurría Nahir Galarza y su madre, Yamina Kroh.
A pedido de la defensa, confirmó Nahir presentaba una lesión en la pierna izquierda, similar a un raspón de color rojo y con líneas. Pero al momento de consultar a ambas sobre el origen de esa herida, ninguna de las dos le respondieron.
El segundo testigo fue Osvaldo Núñez, quien tiene veinte años de antigüedad en la Policía; de los estuvo dos años bajo el mando de Marcelo Galarza, padre de la imputada.
Su aporte fue el de confirmar que Galarza utilizaba su pistola reglamentaria 9 milímetros con un proyectil en recámara y sin seguro.
El tercer testigo fue el profesor de hockey del Club Sudamérica, Mariano Adolfo Bohl; quien confirmó que Nahir practicó esa disciplina durante octubre y noviembre.

La madre

El testimonio de Yamina Kroh; madre de Nahir, fue muy esperado en la audiencia de hoy.
Recordó con angustia que Nahir ese 29 de diciembre “no podía hablar y estaba como ida”, y luego llegó la Policía a su casa para notificarla que debía concurrir a Tribunales a pedido del fiscal Sergio Rondoni Caffa.
Recordó que una vez que regresaron a su hogar, Nahir pidió hablar con un abogado, pero que ellos como padres no sabían qué había pasado e incluso reconoció que tampoco pudieron preguntarle para acceder a algún detalle.
Fue más allá, porque Kroh le dijo al Tribunal que con su hija nunca habló sobre lo ocurrido en la madrugada del 29 de diciembre de 2017 cuando la visita en la Comisaría del Menor y la Familia. “Trato de no hablar del tema. Para qué la voy a torturar”, se justificó.
“¡Perdón hija por no haberte cuidado!”, repitió varias veces, ahogada en llanto.
La querella le hizo observar que tres o cuatro días previos al 29 de diciembre del año pasado, las comunicaciones entre madre e hija fueron muy escasas, una o dos veces por día. Pero, entre las 00:39 y las 1:32 de ese 29 de diciembre, se registraron 24 mensajes y 26 llamados. La madre de Nahir los adjudicó a una situación normal de una mamá preocupada cuando sale una hija.

El padre

Luego de un cuarto intermedio, el debate se reanudó con el testimonio de Marcelo Galarza, el padre de la imputada. Fue el último en declarar hoy.
Relató cómo le secuestraron el arma, que luego a través de peritajes se determinó que fue la utilizada para dar muerte a Fernando Pastorizzo.
Dijo que desde Fiscalía fue hasta su casa acompañado por dos policías, quienes buscaron a dos testigos civiles. Relató que mientras ellos se quedaron en la cocina, él se dirigió a su dormitorio solo a buscar su arma reglamentaria. En el dormitorio estaba solo, sacó el proyectil de la recámara, se lo puso en un bolsillo y luego sacó el cargador. Fue hasta la cocina y recién ahí entregó el arma y que se olvidó de entregar la bala que había guardado entre sus ropas.
El otro aporte que realizó fue que Nahir nunca le presentó un novio y que a Fernando lo conoció diez minutos antes de emprender el viaje de vacaciones a Brasil y luego no lo vio nunca más.
El debate se retomará el lunes a las 8:30 y se espera que declaren los últimos testigos propuestos por la defensa técnica. En esa misma jornada se realizarán los alegatos de clausura por parte del Ministerio Público Fiscal y de ambas querellas. Y el martes harán lo propio los abogados de Nahir Galarza. Con ese último acto, el Tribunal tendrá cinco días hábiles para dar a conocer el adelanto de su veredicto.