La Policía investiga el robo a un adulto mayor y se intenta identificar a los tres delincuentes
La Policía local continúa investigando el robo del adulto mayor de 78 años, identificado como Jorge Cherubini, quien el lunes alrededor de las 13:30 fue víctima de un violento hecho ocurrido en su domicilio ubicado en calle Bolívar al 1100 por al menos tres personas que se hicieron pasar por inspectores de la AFIP.
Con ese ardid los delincuentes lograron ingresar a la casa de Cherubini y lo esposaron sobre la baranda de una escalera, para luego revisar toda la vivienda y finalmente alzarse con una suma no precisada de moneda nacional y extranjera, para luego darse a la fuga.
La Policía investiga alguna pista, a través de las imágenes recolectadas por las cámaras de seguridad cercanas a la casa de Cherubini. El dispositivo de video vigilancia más cercano a la casa de la víctima, está en la vereda de un estudio contable ubicado en Ayacucho al 160 a media cuadra del domicilio de la víctima.
El barrio ayer por la mañana se mostraba aún conmocionado por lo sucedido, y los vecinos consultados por EL ARGENTINO dijeron “no saber nada” o no “haber sentido nada”.
Cherubini, de 78 años, vive en el barrio hace 25 años, es conocido por todos como un hombre reservado, que no suele andar mucho por la calle. Por la mañana sale de su domicilio a buscar el diario al kiosco de calle Bolívar y Rocamora, intercambia algunas conversaciones cotidianas con el agenciero de una tómbola que está frente a su casa, pero no más de eso.
“Nosotros sabíamos que vivía solo, por eso le decíamos que no atendiera a la gente por el zaguán, sino por el balcón para evitar cualquier entradera”, le dijo una vez uno de sus vecinos a Jorge, actitud que comenzó a implementar, aunque el lunes los delincuentes lograron burlar su confianza.
El vecindario se enteró de lo sucedido el martes a las 18:30 cuando comenzaron a llegar a ese domicilio patrulleros y el móvil de Criminalística.
“Tuvieron que romper la puerta para poder ingresar. La familia lo llamaba por teléfono y él no le contestaba. Entonces, vino la nieta, comenzó a golpear la puerta, y al sentir gritos de ayuda en el interior, enseguida avisó a su padre, quien vino y rompió la puerta para ingresar. Una vez dentro, se encontró con el panorama de que Jorge estaba atado con unas esposas a la baranda de una escalera”, explicó el vecino.
“Estuvo cerca de 30 horas sin comer y beber. Tuvo suerte de que ayer (por el martes) no hiciera mucho calor. Se lo llevaron para poder asistirlo y lo que vi es que tenía las muñecas hinchadas por haber estado esposado durante tanto tiempo”, remarcó.
Por otro lado, ayer personal de Investigaciones dialogó con la víctima, con el objetivo de poder acceder a más información sobre los tres delincuentes que robaron en este domicilio.
La investigación está orientada a detectar a alguien local que pudiera haber pasado algún dato, puesto que la Policía por el momento descree que se esté frente a un hecho al azar o al “boleo”, como se referencia los robos más casuísticos. Pero, “ingresar a un domicilio donde vive un adulto mayor solo; hacerse pasar por personal de la AFIP; maniatarlo para poder revisar la casa de arriba abajo, es un modus operandi que habla de una situación planificada con anterioridad”, describió uno de los investigadores.