Reclama a su obra social por tratamiento oncológico

EL ARGENTINO se comunicó con ella ayer, luego de ver lo que publicó este lunes en su muro de facebook, contando la odisea que vive a causa de la desidia de su obra social.

Después de un día largo, a las nueve y pico de la noche de este lunes, descargó su bronca, su impotencia, también su angustia y escribió en su muro “Soy Sofía Miranda, tengo 40 años y vivo en la Plata con mi hijo de 7 años.

Soy viuda.

Sin trabajo.

Tengo cáncer hace cinco años y he pasado por muchas terapias. La última fue inmunoterapia, y no resultó. Para poder conseguir esa medicación necesité presentar un recurso de amparo contra la obra social OSECAC que salió favorable...,  pero ellos siguieron sin cumplir, negándose a proveer las vías especiales (para el pasaje de la medicación) y los análisis de sangre, incumpliendo con el Plan Médico Obligatorio (PMO) que me ampara.”

“Ahora debo hacerme radioterapia -continúa relatando Sofía, dejando en claro “en La Plata hay dos centros donde puedo hacerlo,  pero me aprobaron el tratamiento en San Justo, porque el presupuesto de allá es más barato. Y no me pagan los traslados. Tengo que aplicarme 25 sesiones, una por día, de lunes a viernes.”

“Voy a ir por la vía judicial, pero no puedo demorar el tratamiento”, explica, como si hiciera falta, aunque quizá sí para quienes demoran la respuesta que debieron dar a comienzos de mes.

 El reclamo finaliza pidiendo “Me gustaría que se haga público el manoseo y la falta de respeto que tenemos los enfermos de cáncer por Osecac!!! Compartilo”, y como es fácil imaginar, mucha gente lo compartió.

También y a través de esta red, hubo comentarios, como  “Sería bueno conocer quién está al frente de la oficina de OSECAC donde lejos de brindarte un servicio, te destratan”.

 

# Derivaciones arbitrarias

 

En diálogo con EL ARGENTINO, Sofía amplió un poco lo que sintetizó para facebook.

“Luego que presenté la indicación médica para aplicarme radioterapia, en la oficina de La Plata me derivaron a San Justo, siendo que a cuatro cuadras de mi casa (el domicilio legal que figura en su documentación) funciona un centro médico especializado en tratamientos oncológicos”. 

“Y la derivación es verbal, por teléfono, sin un número de trámite. Me llamaron y me dijeron “tiene que ir ahí”.

“Al pedirle a quien hablaba un comprobante de esta derivación, me respondió que el trámite estaba en el área Legales de la obra social y que me iban a mandar una carta documento con esta información”.

“Estoy esperando todavía la carta documento, mientras se demora el comienzo de mi tratamiento”, afirmó.

La espera es desde comienzos de mes, lo que también es un destrato.

Porque con este documento en mano, Sofía no sólo podrá hacer el tratamiento que tiene indicado sino también, presentarse ante la Justicia, como ya hizo el año pasado, para recibir un tratamiento de inmunoterapia tras interponer un recurso de Amparo.

Con la nueva presentación, podrá no estar obligada a viajar a San Justo, que implica viajar todos los días tres horas y media. 

También beneficiarse con el cumplimiento, por parte de la obra social, de lo que establece el PMO.

 Las obras sociales deben, precisamente,  acatar ese cometido.

Aunque cada vez sean más los reclamos de diversa índole que salen a la luz, casos de personas que padecen a causa del juego de los que apuestan al desgaste.

“Le meto, pero llega un momento en que me canso”, dijo Sofía al terminar, para fundamentar su reclamo por las redes.

Reclamo en el que no habrá de cejar, como afirmó.