Hasta el momento hay cuarenta casos confirmados de dengue

 

Se trabajó primero en la zona delimitada por las calles René Favaloro y Teresa Margalot y entre Bulevar Daneri y Roffo y luego en la delimitada por Urquiza y Bolívar y entre Sarmiento y Gualeguay.

 

Respecto de este trabajo, Juan Pablo Sack, responsable de la dirección de Veterinaria municipal, explicó a EL ARGENTINO que se hacía, en cada caso, en un radio de nueve manzanas alrededor del domicilio donde se ha detectado un caso positivo de dengue.

“Estas fumigaciones se hacen para cortar el ciclo de reproducción del Aedes y son complementarias de las acciones de los vecinos, que tienen a su cargo la eliminación de criaderos”, consignó, para agregar “lo más importante siempre es el control de las larvas, eliminar los criaderos para evitar el nacimiento de nuevos mosquitos, descartando  todos los lugares donde se junta agua”.

 En este punto EL ARGENTINO planteó que cuando se habla de descacharrización, se tiene en claro a qué se hace referencia. Pero ¿qué sucede con las plantas de interior y más precisamente, las acuáticas?

“El ideal es cambiar el agua cada dos días y cepillar los bordes, porque el Aedes es un mosquito domiciliario, que no encontramos en pastizales o zanjones, donde hay otras variedades de moquitos que compiten con él, que es más delicado. Y tiene la propiedad de pegar sus huevos en el envase, en la parte del borde del agua”.

“Por eso hay que prestar atención cuando hay una maceta con piedras debajo, o con un portamacetas y tenemos entre uno y otro, un espacio donde están naciendo mosquitos. Hay que tener mucho cuidado con todas estas cuestiones y tomar como práctica este control en casa porque los casos de dengue han tenido un avance importante, desde que comenzaron siendo importados por gente que viajó al norte, a lugares donde la enfermedad se presenta todo el año”.

“Nuestra ventaja es que nuestros inviernos son bastante fríos, momento en que mosquitos y larvas mueren, pero los huevos quedan y permanecen hasta la nueva primavera, a la espera de condiciones favorables para eclosionar”.

 

# Puertas y ventanas cerradas

Como cada vez que se informa de un bloqueo con fumigación se aconseja a los vecinos donde se hace, que cierren las ventanas durante una o dos horas, el médico veterinario explicó “esto es porque  se usa un equipo, una termofumigadora, que mezcla un insecticida -aprobado por la Anmat- con gas oíl, que provoca una nube de humo. Si algún vecino decide que el humo ingrese a su casa no tendrá problemas, siempre que no permanezca adentro en el momento de la fumigación”.

“Para estos casos se  recomienda que en esa hora que ingresa el insecticida no haya personas ni animales dentro del hogar, porque el humo puede producir alguna irritación respiratoria. De hecho, la gente que hace el trabajo tiene equipos de protección y máscaras con filtro, para evitar la aspiración del producto”.

 

# El Aedes tiene hábitos crepusculares

En cuanto a si al supermercado de la zona de la Plaza Belgrano, así como a otros negocios de alimentos que pudieran estar en el radio de las nueve manzanas, se les pidió que cierren durante la fumigación, el titular de Veterinaria municipal señaló “se les pide que lo hagan solamente cuando está la nube. Por eso la fumigación se hace temprano, cuando no hay movimiento de gente. Y   se hace a esa hora -destacó- porque es cuando el mosquito vuela. El horario del Aedes es crepuscular: entre las siete y las 8,30 y  9 de mañana y a la tardecita, entre las 18 y 19,30. Hay que buscar ese horario que es cuando más mosquitos adultos hay volando. Generalmente se arranca a las 7,30 para terminar a las 8,30. Y se avisa a los negocios y vecinos para que cuando pase el equipo mantengan cerrado”.

Siendo ayer un día con lluvia pronosticada, consultamos a Sack si el producto “se lava” con ella, a lo que respondió “no. Lo importante es que no llueva durante la fumigación y las próximas tres horas, porque se forma una microgota muy liviana que queda en suspensión, toma contacto con el mosquito y lo mata. Una vez que pasaron esas tres horas y esas microgotas caen al suelo, se inactivan”.

 Respecto de las posibles disposiciones especiales de la dirección de Tránsito para ayer, el funcionario consignó “en estos días se ha facilitado nuestro movimiento por la cuarentena, pero en general, se trabaja con operativos de tránsito para bloquear por donde pasa el equipo, para que los vehículos no obstaculicen su marcha y para evitar que algún auto quede en medio de la nube de humo”.

“También trabajamos con tránsito para cortar las calles porque a veces hay que circular a contramano, porque independiente del sentido de las calles, avanzamos haciendo un anillo de nueve manzanas y después se va cruzando la cuadrícula demarcada para completar el área”.

Con las fumigaciones municipales de ayer se avanzó en el control del vector del dengue, que hasta el momento de la entrevista sumaba 40 casos confirmados en Gualeguaychú, ya atendidos, así como bloqueadas y fumigadas las zonas de los respectivos enfermos.