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Diario El Argentinojueves 28 de marzo de 2024
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El comercio minorista vive una situación terminal, cientos podrían cerrar en junio

El comercio minorista vive una situación terminal, cientos podrían cerrar en junio

La crisis en el consumo por la pandemia, comienza a provocar cierres masivos de comercios en la ciudad.


 

En la mayor parte de los negocios de rubros no esenciales las ventas bajaron entre el 30 al 40 por ciento. Muchos de ellos no pudieron acceder a los beneficios financieros y programas de recuperación productiva (ATP). Aquellos locales que son atendidos por sus dueños prefieren cerrar antes de seguir endeudándose. Desde el Centro Comercial se proyecta que 500 locales quedarían fuera de la actividad.

 

El 4 de junio, se cumplió un mes desde que el COES local, finalmente autorizó (mediante decreto provincial) la reapertura de los rubros comerciales que estuvieron cerrados desde el 20 de marzo.

Para muchos fue un alivio, pero para otros fue su sentencia de muerte comercial al no poder hacer frente a sus costos, lo que eso significa pérdida de capital de trabajo y aumento del endeudamiento, con una actividad comercial que no supera el  30 por ciento en la mayoría de los casos.

El secretario del Centro Comercial el contador Federico Larelach, explicó a EL ARGENTINO que: “En enero de este año había 4 mil comercios inscriptos en el Área de Habilitaciones de la Municipalidad. Estamos hablando que peligra la existencia del 10 por ciento de los comercios que el año pasado estaban en funcionamiento a fines del 2019 y principio del 2020”.

Remarcó que: “En los meses de pandemia desde el Banco Estadístico del Centro Comercial hemos relevado datos sobre  las expectativas de lo que harán los comerciantes. Los datos que arrojó el relevamiento nos indica que hay muchos comerciantes que están evaluando el cierre de su comercio, dado que la carga indemnizatoria no es tan alta, por estar trabajando solo o con su familia en el comercio.

Si se tiene un local abierto, en el que no entra nadie, se comienza a evaluar si es conveniente seguir abierto, o se sigo endeudando con el alquiler, los demás costos fijos o cierra y espera regresar a la actividad cuando el mercado mejore”, expresó Larelach.

“Si uno recorre la zona comercial de Urquiza y 25 de Mayo, además de sus trasversales y se cuenta la cantidad de locales cerrados que hay, ese panorama nos da una idea del avance de esta decisión de ir cerrando los comercios.

También vemos que si bien hay gente en la calle,  no está consumiendo más allá de las cuestiones esenciales, lo cual es comprensible”.

 

Ayuda del Gobierno  nacional

 

Al consultarle qué es lo que sucederá cuando el Gobierno nacional no pueda seguir ayudando a las PyMES con fondos para la recuperación productiva  (ATP) la cual el Estado se hace cargo de la mitad del sueldo de los trabajadores, Larelach, dijo que: “Un empleado de comercio hoy le cuesta al empleador 70 mil pesos entre sueldo y leyes sociales, el ATP son 19 mil pesos, luego hay una prórroga en cuanto al pago de las leyes sociales, no obstante el comerciante tiene que abonar el resto del sueldo, pero si la caja del comercio sigue siendo cero porque la gente no está consumiendo, el comerciante no se  podrá sostener.

Hay algunos que me dicen que tiene stock de mercadería, pero no la pueden mover y si largan una liquidación tampoco se puede vender tan fácilmente.

La ayuda que otorgó el Gobierno nacional es importante, pero no es suficiente y muchas veces no está bien aplicada, porque supongamos que un comerciante logró vender a crédito, el pago lo recibirá el mes que viene, pero por esa facturación el gobierno va a detectar que el comerciante está trabajando y no podrá tramitar la ayuda financiera, cuando la realidad es que el vendedor logró cerrar la venta, facturó pero no tuvo ingresos, vendió a cuenta, tampoco recibió ayuda y tendrá que pagar la carga impositiva que es enorme. 

Es por eso que hay beneficios que están mal aplicados y lo mismo sucede con los créditos con tasas al 24 por ciento y los que tienen tasa cero. Hubo muchos monotributistas que facturaron, no lograron cobrar y encima quedaron afuera del beneficio que otorga el Gobierno nacional”.

 

Los rubros más afectados

Los rubros más afectados son de indumentaria, zapatería, marroquinería, en la que ya perdieron prácticamente la temporada otoño e invierno,  bisutería y juguetería.  

“Lo que hicimos fue una proyección de que en el actual contexto podrían cerrar 500 comercios, tal vez muchos puedan sostenerse, pero todo dependerá de a qué acuerdo lleguen con sus acreedores, desde el propietario del local si es que alquila, hasta los proveedores y si podrá acceder a las herramientas financieras como el crédito a tasa cero  o al 24 por ciento, pero si no hay ventas, el comerciante no se va a seguir endeudando, porque si no será tomar créditos para transferir el dinero a los acreedores. Si el comerciante no vende no podrá generar una supervivencia”, concluyó.

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