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En los Ministerios Públicos de Entre Ríos trabajan 316 mujeres y 219 hombres
Los Ministerios Públicos Fiscal y de la Defensa de Entre Ríos dieron a conocer un informe vinculado a la paridad de género en los cargos de ambas reparticiones.
Al 1° de diciembre de este año el total de la planta de personal del Ministerio Público Fiscal, está integrado por un total de 186 mujeres y 140 varones. Mientras que en el Ministerio Público de la Defensa trabajan 130 mujeres y 79 varones.
En el documento queda plasmado que, desde el inicio de la gestión en la Procuración, se ha encaminado progresivamente garantizar la igualdad real de oportunidades para el acceso a los cargos dentro del Ministerio Público Fiscal (MPF).
Desde el organismo se destacó la importancia de informar al respecto, considerando que recientemente se sancionó la Ley de Paridad de Género Nº 10.844, que en su Artículo 18° refiere a la necesidad de adecuar los mecanismos y medidas de acción positiva para garantizar y adecuar de manera progresiva el cumplimiento del principio de paridad de género. “Dicha Ley fue inspirada en la idea contrarrestar normativamente los factores de discriminación cultural que han padecido las mujeres para el acceso a los cargos públicos, se destacó desde MPF.
Al 1° de diciembre de este año el total de la planta de personal del MPF, está integrado por un total de 186 mujeres y 140 varones.
Si se desagrega ese total, en relación con los cargos ejercidos, puede observarse que, en la planta de personal administrativo y técnico, cuya designación se realiza en la mayoría de los casos por concursos abiertos o de ascensos, y está a cargo de la Procuración general, se observa una disparidad algo mayor, contándose con un total de 130 mujeres (62 por ciento del total de empleados) y 79 varones.
En las instancias jerarquizadas de empleados también se observa una amplia mayoría de mujeres. Los cargos de fiscales, en todas sus jerarquías, está compuesto por un 52 por ciento de hombres (61) y un 48 por ciento de mujeres (56).
A su vez, la desagregación de los cargos de fiscales en las diversas jerarquías, se debe tener en consideración que el acceso a los cargos en calidad de titular, se realiza por concursos celebrados por el Consejo de la Magistratura de Entre Ríos, mientras que las designaciones de interinos y suplentes son realizadas por la Procuración General.
Los cargos de fiscales, de cualquier jerarquía, designados por la Procuración en calidad de interinos o suplentes, conforme a las facultades de superintendencia, hay un 56 por ciento de mujeres (30) y 44 por ciento de varones (24).
Ministerio Público de la Defensa
Desde el Ministerio Público de la Defensa (MPD) también se destacó que siempre se priorizó garantizar la igualdad real de oportunidades de para el acceso a los cargos.
Dicha panta de personal se compone por el personal administrativo y los cargos de defensores públicos, que, en su totalidad está integrado por 130 mujeres y 79 varones.
En lo que respecta al personal administrativo y técnico, cuya designación se realiza en la mayoría de los casos por concursos abiertos o de ascenso, y está a cargo de esa Defensoría General, los cargos están ejercidos por un total de 83 mujeres (69,70 por ciento) y 36 varones (30,30 por ciento).
Asimismo, los cargos de defensores públicos están compuestos por 38 varones (54,28 por ciento) y 32 mujeres (45,72 por ciento). La desagregación de los cargos de defensores en las diversas jerarquías, muestran que de los 28 defensores públicos interinos 14 son mujeres (50 por ciento) y 14 varones (50 por ciento); mientras que, de los 25 defensores auxiliares, 12 son mujeres (48 por ciento) y 13 son varones (52 por ciento).
Cabe destacar, que el acceso a los cargos de defensores en calidad de titular, se realiza por concursos celebrados por el Consejo de la Magistratura Ríos, mientras que las designaciones de interinos y auxiliares son realizadas por la Defensoría General.
El equipo técnico está compuesto por 15 mujeres (75 por ciento) y cinco varones (25 por ciento).
De estos datos resulta que las disparidades numéricas observables en favor de mujeres, no deberían generar mecanismos de compensación para el aumento de número de funcionarios hombres, dado que el espíritu de la ley sancionada es compensar las disparidades más perjudiciales para la mujer en el acceso a los cargos.