Daniela Pavón y Gustavo Van Zandweghe: autores del retrato de Luis María Luján

El rostro sereno, apacible y cordial de Luis María Luján se encuentra realizado en una compleja técnica de papel. Parafraseando a los autores del cuadro: el papel es el material que lo identifica, ya que él fue entre muchas cosas: escritor.

EL ARGENTINO dialogó con Gustavo Van Zandweghe, quien relató íntimamente el trabajo que realizan con Daniela, cómo llegaron a realizar la obra y qué significa para ellos este trabajo.

 

Un poco sobre Daniela y Gustavo

“Somos oriundos de Rosario, nuestra familia se compone de nosotros dos y nuestros tres hijos. Nos surgió la oportunidad de venir por un traslado a  Gualeguaychú por la empresa en la que trabajaba, dos de nuestros hijos vinieron con nosotros y el mayor quedó en Rosario. Con el paso de los años nuestros hijos se hicieron de pareja y empezamos a pensar qué haríamos con esta nueva etapa de la vida” expresó.

 “Decidimos que saldría de la empresa y comenzaríamos con un proyecto de vida diferente, un poco más relajado, sin tantos horarios, presiones y un poco alejados del sistema.  Siempre hicimos cosas relacionadas al arte, siempre me gustó la madera, desde chico. Hacíamos objetos y los regalábamos en ocasiones especiales. Previo a tomar la determinación de salir de la empresa, hacia un año que participábamos de la Feria de Artesanos de Gualeguaychú. La experiencia fue bárbara, nos terminó de dar el empujón y nos dedicamos a lo que nos gustaba y disfrutábamos hacer. De un día para el otro, comenzamos a hacer nuestros propios ingresos, fue una experiencia realmente extraordinaria” relató.

Luego agregó: “Comenzamos a dedicarle todo el tiempo que queríamos a mejorar las técnicas de trabajo, a hacer experiencias con nuevos materiales. La verdad que nos encanta hacerlo.  Así fue que nos vinculamos con la Casa de la Cultura, Silvana preguntó en la Feria de Artesanos quién quería hacer algo relacionado a Luis. Nosotros dijimos que queríamos, que nos interesaba muchos, a pesar de que nuestro material es la madera, dijimos inmediatamente que sí”.

 

¿Por qué eligieron esta técnica?

-Luis no fue una persona relacionada con la madera, él fue escritor, vinculado estrechamente con la música por eso decidimos que el material que lo identifica, su fibra íntima es el papel. Empezamos a buscar, seguimos a una chica americana que hace este trabajo que es extraordinario. Nos animamos, encaramos con mucho entusiasmo, con temor por supuesto porque es grande y era la primera vez que realizamos esta técnica. Pero cuando uno hace las cosas con cariño, difícilmente fallen. Cuando caía el sol mi compañera, Daniela, y yo hacíamos el trabajo juntos. Los dos hacemos todos los trabajos a la par.

 

¿Cuánto tiempo tardaron en realizar el cuadro?

Lo hicimos en dos meses, queríamos terminarlo antes para que Silvana lo pueda ver y algunos referentes allegados a Luis para que den su aprobación. Una vez que la tuvimos, enmarcamos y dimos los últimos detalles.

 

¿Lo conocieron a Luis?

No lo conocimos, pero cuando llegó la propuesta no dudamos ni un instante en hacerlo. Una compañera, una amiga de trabajo me contó hace algún tiempo que Luis en el medio del cumpleaños hizo uno de sus actos y que generó un ambiente increíble. Ella  me decía e insistía que lo tenía que conocer. Lamentablemente ella enfermó un tiempito antes y de la misma manera que Luis. Se fue antes que él y eso me quedó en la cabeza dando vueltas. Cuando Silvana me comentó, me encantó poder honrar a las dos personas de maneras diferentes.

 

¿Qué significa para ustedes personal y profesionalmente?

Para nuestro proyecto es formidable, primero por la oportunidad generada a una persona que no es local. Sobre todo porque es una oportunidad para agradecer lo que nos  sucedió como familia, que los chicos formen sus propias familias y que hayan nacido nuestras dos nietas que fueron determinantes para quedarnos en Gualeguaychú. Todo lo que podamos hacer para devolverle algo a la ciudad estamos muy predispuestos.

 

¿Han hecho otros trabajos para la ciudad?

En este momento estamos haciendo un trabajo sobre un eucalipto enorme que se cayó frente a la Laguna de los Patos. Es un tronco grandísimo en el cual de un lado irán animales autóctonos, y en la medida de lo posible que se encuentren en el parque Unzué. Del otro lado, habrá un circuito donde los niños podrán jugar en unos anillos generados con el mismo tronco, entrarán por la raíz. Ese proyecto es a modo de prueba piloto, la idea es poder intervenir todos aquellos árboles que se han caído y abre una puerta hermosa que es convocar a otros artesanos a poder intervenir piezas y de alguna manera ir adornando con piezas artísticas de madera.