# Lluvia = problemas
Cada vez que llueve, en la mayoría de los barrios de Gualeguaychú y también en el centro, surgen diferentes problemas con desagües que se tapan, alcantarillas y bocas de tormenta que se salen de lugar y el agua cubriendo las calles de vereda a vereda.
Ya se vio el viernes cuando una tormenta azotó por momentos a la ciudad y también en zonas aledañas. Ayer, cuando desde el mediodía se desató una fuerte lluvia, otra vez algunos barrios de Gualeguaychú se trasformaron involuntariamente en una “mini Venecia”, con las calles totalmente cubiertas de agua y con los vecinos viéndoselas realmente complicadas para tratar que el agua no ingrese en las casas.
Bueno es preguntarse las causas de que esto suceda, porque no es solamente por la cantidad de lluvia. Tiene que ver con que algunos desagües claves para evacuar el agua de lluvia se encuentran tapados de suciedad, algunas obras en construcción impiden que el agua corra por los lugares que debe hacerlo, generando verdaderas lagunas en plena calle y otros aspectos más que generan complicaciones.
Queda la sensación que pese a las obras que oportunamente se realizaron, sobre todo en la Avenida Del Valle, que siempre fue uno de los puntos críticos los días de lluvia, ahora hay otros barrios de la ciudad y también la zona céntrica que necesitan urgentes trabajos en desagües y saneamiento pluvial.
Caso contrario, los vecinos seguirán implorando ante cada lluvia, que sus casas no se llenen de agua.
# Una medida valiente
El Departamento Ejecutivo Municipal emitió el Decreto N° 10.394/99 ad referéndum del Concejo Deliberante, por el cual prohíbe la instalación de wiskerías y similares dentro del ejido municipal.
La decisión es valiente, teniendo en cuenta los contextos que caracterizan a los negocios de la noche; y además es una medida más que oportuna para combatir diversos delitos como la trata de personas, la prostitución y el comercio ilegal de estupefacientes, entre otros.
La medida del DEM es más profunda que una prohibición, sino que apunta a una erradicación definitiva de estas actividades en la ciudad. Por eso en el mismo decreto se estableció que “las habilitaciones de locales de diversión nocturna vigentes a la fecha, caducarán automática y definitivamente a los veinticuatro meses contados a partir de la ratificación del presente por parte del Honorable Concejo Deliberante”.
En rigor, la medida se adoptó luego de analizar el Expediente Nº 6.202/09 caratulado “Dirección de Investigaciones Provincia de Entre Ríos a/análisis de factibilidad”, en que “el director de Investigaciones de la Policía de la Provincia de Entre Ríos, Comisario Mayor Alejandro Ricardo García, informa a esta Municipalidad sobre la creación de la División Trata de Personas, dependiente de la Dirección a su cargo, y solicita a la Municipalidad consensuar medidas sobre la problemática de la trata de personas en el marco de la Ley 26.364 de ‘Prevención y Sanción de la Trata de Personas y Asistencia a las Víctimas”.
Y es así que la propia Policía sugirió a los intendentes que adopten la medida de cerrar esta clase de negocios.
En su momento los intendentes no escucharon con debida responsabilidad este pedido. Por eso es elogiable la decisión del Ejecutivo local y debería servir de modelo para que se erradique de la provincia estos comercios que trafican con la vida.
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