El Registro Civil necesita ser arreglado
Las oficinas del Registro Civil de Gualeguaychú presentan un aspecto realmente muy feo para los cientos y cientos de personas que asisten diariamente a dicha repartición. Se trata de un edificio de muchos años que desde hace un muy buen tiempo viene necesitando un importante trabajo de reparación, pero que vaya a saberse por qué causa, todavía no se ha hecho.
El dato sería anecdótico si no se agrega a la información que desde hace algunos días funciona en el Registro Civil el nuevo sistema informático para obtener el Documento Nacional de Identidad, que está equipado por máquinas de alta tecnología que aceleran un trámite que históricamente fue engorroso y demandaba muchísimo tiempo.
La lógica indica que ese tipo de máquinas, que requiere tener instalaciones acordes a la modernidad de las mismas, no podrían funcionar en oficinas como las de nuestro Registro Civil, sin embargo la orden que llegó desde los estamentos superiores fue que el sistema de documentación tenía que implementarse y así se hizo, pero en condiciones que distan mucho de ser las ideales.
Los empleados de la repartición deben hacer “malabares” para no deteriorar aún más el pobre estado de sus oficinas, en tanto que los vecinos que deben concurrir a hacer trámites, también deben poner cuidado porque los pisos están rotos, algunas mamposterías se han desprendido y los días de lluvia, hay lugares en donde las goteras abundan.
Ya es tiempo que desde las áreas competencias inicien un plan de obras para arreglar el Registro Civil. Solo quienes allí trabajan o bien algún conocedor profundo de la realidad de dicha repartición, sabe de la importancia de estas refacciones.
La lógica indica que ese tipo de máquinas, que requiere tener instalaciones acordes a la modernidad de las mismas, no podrían funcionar en oficinas como las de nuestro Registro Civil, sin embargo la orden que llegó desde los estamentos superiores fue que el sistema de documentación tenía que implementarse y así se hizo, pero en condiciones que distan mucho de ser las ideales.
Los empleados de la repartición deben hacer “malabares” para no deteriorar aún más el pobre estado de sus oficinas, en tanto que los vecinos que deben concurrir a hacer trámites, también deben poner cuidado porque los pisos están rotos, algunas mamposterías se han desprendido y los días de lluvia, hay lugares en donde las goteras abundan.
Ya es tiempo que desde las áreas competencias inicien un plan de obras para arreglar el Registro Civil. Solo quienes allí trabajan o bien algún conocedor profundo de la realidad de dicha repartición, sabe de la importancia de estas refacciones.
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