¿Qué hacemos con las pilas?
En la ciudad se está realizando la segunda campaña de acopio de aparatos electrónicos domiciliarios en desuso, la que continuará hasta el mes de abril.
El propósito es evitar la mala disposición de este tipo de residuos y minimizar el impacto que se puede generar en el ambiente.
De allí que se pida a los vecinos que lleven estos elementos a los galpones del Puerto, Nave 1 de lunes a viernes, de 8 a 12.
Vale recordar que no se recibirán monitores con el vidrio quebrado, fotocopiadoras, electrodomésticos, cartuchos y toners.
Con esta iniciativa en marcha, cabe preguntar qué se puede hacer con las pilas comunes, las que aún no han sido reemplazadas en su totalidad por el uso de las recargables.
Porque al momento de desecharlas, el vecino se enfrenta a una disyuntiva: ¿las descarta junto con su basura domiciliaria o la acopia de modo casero, a la espera de algún llamado comunal en este sentido?
Y el problema suele zanjarse despojándose de estos elementos porque además, no han faltado las voces sosteniendo que es mejor un descarte abierto que concentrar las pilas en un solo lugar.
Para completar el panorama y “progreso” mediante, hay un sinfín de artículos que sólo ofrecen esta posibilidad de carga para trabajar, a diferencia de cuando muchos venían provistos con su entrada para conectarlos a la red eléctrica.
En consecuencia, habrá que sumar una campaña más por el bien del medio ambiente y ésta deberá tener a las pilas comunes por elemento a concentrar.
El propósito es evitar la mala disposición de este tipo de residuos y minimizar el impacto que se puede generar en el ambiente.
De allí que se pida a los vecinos que lleven estos elementos a los galpones del Puerto, Nave 1 de lunes a viernes, de 8 a 12.
Vale recordar que no se recibirán monitores con el vidrio quebrado, fotocopiadoras, electrodomésticos, cartuchos y toners.
Con esta iniciativa en marcha, cabe preguntar qué se puede hacer con las pilas comunes, las que aún no han sido reemplazadas en su totalidad por el uso de las recargables.
Porque al momento de desecharlas, el vecino se enfrenta a una disyuntiva: ¿las descarta junto con su basura domiciliaria o la acopia de modo casero, a la espera de algún llamado comunal en este sentido?
Y el problema suele zanjarse despojándose de estos elementos porque además, no han faltado las voces sosteniendo que es mejor un descarte abierto que concentrar las pilas en un solo lugar.
Para completar el panorama y “progreso” mediante, hay un sinfín de artículos que sólo ofrecen esta posibilidad de carga para trabajar, a diferencia de cuando muchos venían provistos con su entrada para conectarlos a la red eléctrica.
En consecuencia, habrá que sumar una campaña más por el bien del medio ambiente y ésta deberá tener a las pilas comunes por elemento a concentrar.
Este contenido no está abierto a comentarios