Barrientos pidió estar preso en la provincia, pero se lo negaron

El jefe de la barra brava de Patronato ya había solicitado que se lo devuelva a la provincia, pero la justicia entrerriana rechazó que el responsable de un doble homicidio vuelva a un penal entrerriano.

Gustavo Barrientos no se queda de brazos cruzados. Hace dos meses lo trasladaron de la comodidad de la Unidad Penal de Gualeguay hacia la cárcel de máxima seguridad de Ezeiza. Cumple una pena por un doble homicidio pero, en función de una causa por asociación ilícita, en la que se lo acusa de organizar delitos desde el encierro, decidieron enviarlo a Buenos Aires. El lunes sus nuevos abogados Andrés Carvajal y Horacio Barreto (los mismos que defienden a Néstor Pavón, imputado como coautor del femicidio de Micaela García) presentaron un hábeas corpus correctivo en Capital Federal, en el que cuestionan las condiciones de detención y los motivos de su traslado.

Entre los puntos planteados en el escrito “por infracciones a la Ley 24.660” del Régimen de Ejecución de Penas, los letrados sostuvieron que Barrientos “con el legajo que tiene debería estar tranquilamente en la unidad de régimen abierto y lo sacaron de Gualeguay donde estaba en el lavadero de autos, trabajando en la calle, y lo mandaron a una cárcel de máxima seguridad”.

Además, según señalaron al diario Uno de Paraná, que está “compartiendo un rancho con otros 15 internos”, en un espacio reducido para alojar a muchas menos personas.

Anteriormente, Barrientos había presentado un recurso similar ante un Juzgado de Lomas de Zamora, cuyo magistrado a cargo requirió al Juzgado de Paraná retirarlo del penal de Ezeiza. Pero desde la capital entrerriana, la Justicia dijo que lo enviaran a cualquier centro penitenciario del país, menos a alguna Unidad Penal de la provincia. En este caso, su destino podría ser, por ejemplo, la unidad carcelaria de Rawson o la de Chaco, establecimientos dependientes del Servicio Penitenciario Federal.