Condenaron a perpetua a José Giardino por la muerte de Mara Torales
Los jueces de la Cámara del Crimen de Concordia condenaron a la pena de cadena perpetua José Giardino por el asesinato y descuartizamiento en noviembre de 2002 de la niña Mara Torales, de 14 años y madre de una beba de 2 meses.
Si bien -estrictamente- por el caso Torales recibió una condena de 15 años (homicidio simple) los jueces decidieron aumentar la pena por ser reincidente.
El fallo fue leído ante una sala fuertemente custodiada por efectivos de la Policía, atendiendo la posibilidad de que Giardino volviera a ser agredido por los familiares de la joven asesinada, lo cual fue igualmente intentado cuando el condenado era retirado del segundo piso de los tribunales de Concordia.
# Los crímenes de Giardino
Gracias a un permiso de salida transitoria firmado por el juez Adalberto Polti, José Humberto Giardino se fugó de la justicia el 17 de enero de 2002, cuando exactamente cumplía 33 años.
En ese entonces estaba encerrado a perpetua en la Unidad Penal Nº 19 de Ezeiza por violación y homicidio, ya que en 1991 fue condenado por el crimen de la joven Andrea Fabiana Mugrabi, ocurrido en 1988.
Tras 15 años de encierro logró su polémica salida transitoria para ‘festejar su cumpleaños’, de la cual jamás regresó.
. Con el nombre de Carlos José Verón se lo conoció en Concordia donde estuvo realizando las más diversas actividades: vendedor de frutas, panadero y pintor en el hipermercado Norte.
Pero a los pocos meses, su capacidad para pasar desapercibido se terminaría, cuando el 25 de noviembre de 2002 desapareció la joven Mara Torales. Sus extremidades, parte de su torso y su cabeza fueron encontrados en diversas partes de Concordia, entre otros sitios, en un departamento alquilado por Giardino (alias Verón).
Cuando la Policía comenzó a cerrar el cerco el sospechoso desapareció de Concordia.
Con el alias de Carlos Botín reapareció Giardino trabajando en un comedor de Goya, Corrientes, donde uno de los clientes lo denunció luego de ver su foto en un canal de noticias.
Es que la madre de Lucía Yaconis, de 16 años, había distribuido fotografías en medios capitalinos porque sospechaba del perfil de Giardino y la posibilidad de que tuviera vinculación con el asesinato de su hija, ocurrido en 2003 en Buenos Aires.
De Goya fue trasladado a Concordia, donde se lo juzgó y condenó como para que nunca más pueda volver a las calles.
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