El TOF de Paraná condenó a un hombre por traficar ciudadanos chinos

El condenado facilitó el ingreso al país de tres jóvenes de nacionalidad china de 21, 16 y 15 años para obtener de ellos un beneficio, mientras que dice la ley argentina que el ingreso al país se debe realizar exclusivamente por lugares habilitados y que quien lo hiciera por un sitio no habilitado o eludiendo los controles migratorios podría ser expulsado, será pasible de expulsión. No obstante, la misma norma establece una diferencia entre la entrada ilegal y el tráfico ilícito de personas, y no penaliza al migrante, sino que persigue a quien pretende su explotación.
En todo caso, los jueces no tuvieron en cuenta el agravante que implicaba el hecho de que dos de los migrantes eran menores de edad, por eso Scagliola recibió una pena de 3 años –en lugar de los 5 que había solicitado el fiscal José Ignacio Candioti– y quedó en libertad condicional, puesto que llevaba un 1 año y siete meses detenido.

Lo que sucedió

El caso se conoció a partir de que el 6 de abril de 2013 efectivos de Gendarmería que realizaban un procedimiento de rutina en la localidad de Paraná Guazú, sobre la RN 12, detectaron la presencia de tres ciudadanos chinos a bordo de un colectivo que cubría el trayecto desde Resistencia hasta la Ciudad Autónoma del Buenos Aires.
La comunicación con ellos parecía imposible: los gendarmes les pedían sus pasaportes y los tres jóvenes solo atinaban a gesticular que no comprendían lo que les decían. Hasta que señalaron hacia el fondo del colectivo, específicamente a un hombre que viajaba unos asientos más atrás. Scagliola reaccionó nervioso y cuando los gendarmes le pidieron su boleto, les contestó que lo había perdido.
Pero el ticket apareció tirado unos asientos más atrás y los agentes notaron algunos datos que les llamaron la atención: había sido comprado en la misma boletería que los pasajes de los tres jóvenes asiáticos, en la localidad correntina de Mercedes; que el número de talón era correlativo a los tres pasajes presentados por los ciudadanos chinos, con diferencia de un número; y que el pasaje de Scagliola había sido comprado el mismo día, pero con una diferencia de diez minutos respecto de los tres anteriores.
La investigación logró determinar que los tres jóvenes eran oriundos de la provincia de Fujian, que habían salido de su país los días 3, 6 y 24 de marzo y que ninguno tenía ingreso ni egreso legal de Brasil, como tampoco registraba la entrada a la Argentina.
Scagliola, en tanto, había salido del país por última vez el 29 de marzo, aunque registraba ingresos y egresos frecuentes.
Su defensor intentó explicar que las personas que tienen residencia en Paso de los Libres transitan libremente por la frontera y que por eso no tenía registro de entrada. Sin embargo, el hombre tiene domicilio en la provincia de Buenos Aires.
En el expediente consta también que el adolescente de 16 años tenía en un bolsillo un boleto de pasaje de la empresa Pluna, con origen de viaje en San Pablo y destino en Uruguayana, el día 3 de abril a las 22:30, y que había sido emitido el día anterior. Scagliola tenía en su billetera un pasaje similar, con idéntico origen, destino, horario de viaje y fecha de emisión.
El ingreso al país se habría producido en forma ilegal, en un bote, por Paso de los Libres, publicó Prensa 20.