Otorgan la libertad a Yari Sartori, con algunas restricciones de movimientos
Yari Emanuel Sartori admitió el 4 de septiembre pasado en el juicio oral y público que se realizó en Urdinarrain, que fue el autor de un robo a un comercio de esa localidad, delito que a su vez fue calificado como agravado por el uso de armas de fuego.
Ese hecho ocurrió el domingo 28 de abril de 2013 y por eso quedó condenado a seis años y ocho meses de prisión efectiva. Pero, la sentencia no se pudo materializar porque fue apelada y en consecuencia no está firme.
No obstante, Yari Emanuel Sartori se encontraba detenido desde el 2 de octubre, porque venía siendo señalado como autor de otros ilícitos perpetrados en Urdinarrain. En uno de ellos quedó registrado por cámaras de seguridad.
Aquel 2 de octubre, la Policía detuvo en Urdinarrain a Sartori, de 22 años de edad, por orden del juez de Transición y Garantías N° 1, doctor Arturo Exequiel Dumón.
Una vez apresado, Yari Sartori fue trasladado a Gualeguaychú donde quedó alojado en el penal de la Jefatura Departamental.
Pero, ayer a las 14:25, la Justicia de Gualeguaychú decidió conceder la libertad a Yari Sartori, aunque con algunas restricciones. La libertad implica que debe alojarse en el hogar de recuperación de adictos ubicado en Paso del Tala y Calle Tropa y que dirige el Pastor Néstor López. También la Justicia le puso otras limitaciones como el no salir del hogar, no ausentarse de Gualeguaychú y no concurrir a determinados domicilios en Urdinarrain.
Juicio oral y público
El 4 de septiembre pasado se realizó el juicio oral y público en el que estuvo acusado Yari Sartori por “robo agravado por uso de arma de fuego”. Ese juicio constituyó un hecho histórico para esa comunidad y la audiencia se desarrollaron en el Salón de Usos Múltiples de la Escuela Secundaria Nº 16, con el tribunal de Juicios y Apelaciones en pleno integrado por el presidente actuante, Eduardo García Jurado, y las vocales Alicia Cristina Vivian y Mariela Emilce Rojas.
Cabe recordar que en ese juicio oral y público, Sartori admitió el delito y en un gesto de arrepentimiento devolvió la suma de 600 pesos a la comerciante damnificada el domingo 28 de abril de 2013.
En ese marco se lo encontró penalmente responsable y en consecuencia se lo condenó a seis años y ocho meses de prisión efectiva. Pero la sentencia no se pudo materializar porque fue apelada por sus abogados defensores y no está firme.
No obstante, Yari Emanuel Sartori se encontraba detenido desde el 2 de octubre, porque venía siendo señalado como autor de otros ilícitos perpetrados en Urdinarrain. En uno de ellos quedó registrado por cámaras de seguridad.
Aquel 2 de octubre, la Policía detuvo en Urdinarrain a Sartori, de 22 años de edad, por orden del juez de Transición y Garantías N° 1, doctor Arturo Exequiel Dumón.
Una vez apresado, Yari Sartori fue trasladado a Gualeguaychú donde quedó alojado en el penal de la Jefatura Departamental.
Pero, ayer a las 14:25, la Justicia de Gualeguaychú decidió conceder la libertad a Yari Sartori, aunque con algunas restricciones. La libertad implica que debe alojarse en el hogar de recuperación de adictos ubicado en Paso del Tala y Calle Tropa y que dirige el Pastor Néstor López. También la Justicia le puso otras limitaciones como el no salir del hogar, no ausentarse de Gualeguaychú y no concurrir a determinados domicilios en Urdinarrain.
Juicio oral y público
El 4 de septiembre pasado se realizó el juicio oral y público en el que estuvo acusado Yari Sartori por “robo agravado por uso de arma de fuego”. Ese juicio constituyó un hecho histórico para esa comunidad y la audiencia se desarrollaron en el Salón de Usos Múltiples de la Escuela Secundaria Nº 16, con el tribunal de Juicios y Apelaciones en pleno integrado por el presidente actuante, Eduardo García Jurado, y las vocales Alicia Cristina Vivian y Mariela Emilce Rojas.
Cabe recordar que en ese juicio oral y público, Sartori admitió el delito y en un gesto de arrepentimiento devolvió la suma de 600 pesos a la comerciante damnificada el domingo 28 de abril de 2013.
En ese marco se lo encontró penalmente responsable y en consecuencia se lo condenó a seis años y ocho meses de prisión efectiva. Pero la sentencia no se pudo materializar porque fue apelada por sus abogados defensores y no está firme.
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