Agmer volvió a rechazar el aumento por decreto y anunció cinco días de paro

Luciano Peralta 

Lo sucedido la semana pasada en Gualeguaychú marca el humor del sector docente de la provincia. El gobernador Rogelio Frigerio fue blanco de críticas, cánticos, cartelería y todo tipo de manifestación por parte de un nutrido grupo de docentes que hicieron guardia en la puerta del Centro de Convenciones, donde se hizo entrega de escrituras de viviendas del IAPV. 

La reunión que -antes del acto oficial- le concedió el gobernador a cuatro representantes de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer) no fue suficiente, ya que la posición del gobierno se mantuvo: aplicar, por decreto, la última oferta realizada, que ya había sido rechazada por tres de los cuatro gremios docentes que discuten paritarias en Entre Ríos. 

Esto no hizo más que acrecentar el malestar de los docentes, que terminaron escrachando a Frigerio y a otros funcionarios provinciales y locales cuando, ante la protesta, se retiraban por una puerta trasera del Centro de Convenciones ubicado en el Parque de la Estación. Aunque la violencia no pasó de lo verbal, existió. Situación que marcó, como ninguna otra, el gran malestar del sector en toda la provincia, tras meses de descuentos y salarios que no superan la línea de indigencia. 

En ese marco, este miércoles tuvo lugar en Paraná un nuevo congreso extraordinario del sindicato docente más grande de la provincia. Y, luego de más de seis horas, se resolvió rechazar la pauta anunciada por el gobierno provincial “de forma unilateral y por decreto”, sin contemplar las demandas que el gremio viene realizando en el marco de la paritaria. 

Los docentes, reunidos en la sede local de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), también se opusieron “de forma absoluta y taxativa” a cualquier intento de reformar el régimen previsional de la provincia de Entre Ríos y exigió el pago de la diferencia entre la inflación acumulada y la pauta salarial del primer semestre. 

Las posiciones asumidas en Paraná tienen que ver con las demandas que viene sosteniendo el sector hace semanas. En esta línea, volvieron a reclamar “un porcentaje de incremento para todo el escalafón que saque a los salarios docentes de la pobreza e indigencia” y “ningún monto en negro”, en referencia a los tres bonos de $40.000 (agosto, septiembre y octubre) contemplados en el decreto firmado por Frigerio días atrás. 

Asimismo, insistieron en que “toda suma o porcentaje alcance a la totalidad de los trabajadores, activos y jubilados” y el “incremento sin tope del Código 029”, que es el que se paga por traslado. Situación que viven miles de trabajadores y trabajadoras de la provincia. 

De mantenerse la posición oficial, desde donde se hizo trascender la posibilidad de la conciliación obligatoria, y de concretarse los cinco días de paro anunciados, Entre Ríos contará 11 días sin clases por medidas de fuerza gremiales en apenas seis semanas. 

El peor salario de la historia reciente

“El salario testigo estuvo congelado durante toda la década del 90 en $259 (259 dólares) y comenzado el siglo, en la época de (Fernando) de la Rúa, empezó a disminuir por inflación. En 2001, 2002, 2003 se mantuvo en ese valor y llegó a su peor valor histórico, en términos de capacidad de compra, cuando representó el 42% de la línea de pobreza, lo que es igual al 42% de la canasta básica”, explicó Víctor Hutt, quien es profesor de matemáticas, parte de Agmer Uruguay y especialista en salario docente, en una entrevista publicada por La Mala revista. 

“Ese ya dejó de ser el peor momento de la historia”, dijo. Y, como buen docente, desarrolló: “En este mes estamos en el 39% de la canasta básica. Por lo que estamos peor que en el peor momento de los últimos 40 años”.

El matemático explicó (antes de anunciarse el decreto provincial) que esta pérdida salarial comenzó en los últimos dos meses del gobierno de Gustavo Bordet, quien había tenido un 2023 decoroso en la cuestión docente, pero en los caóticos octubre-noviembre -efecto Milei de por medio- cortó unilateralmente relaciones con los sindicatos del sector. En esos dos meses el salario docente cayó 10 puntos. El mes siguiente, la devaluación del ministro de Economía, Luis Caputto, hundió los salarios a niveles del pre kirchnerismo.

Después, en marzo, con la quita del Fondo Nacional de Incentivo Docente (FONID), una conquista de la carpa blanca de los 90, el salario se hizo más raquítico aún. La Provincia lo pagó en dos oportunidades y no lo volvió a pagar. “El rol de Frigerio fue lamentable”, dijo Hutt, al respecto. “Porque en enero acompañó la decisión de traspasar a las provincias el FONID, está en la prensa, y lo pagó con fondos provinciales en enero y febrero, pero en marzo lo dejó de pagar, porque dijo que no le correspondía a la provincia”, cuestionó. Tras lo cual, volvió a argumentar con números las consecuencias de esta medida política: “El FONID representaba el 12% del salario”.

Recapitulemos: la pérdida de octubre-noviembre, del 10%; el mazazo de diciembre-enero, cuando la inflación superó el 45% entre ambos meses; la quita del FONID (12%) y ahora, en el marco del conflicto paritario, el descuento de los días de paro: “cada día parado significa un 4,7% de descuento, en los primeros cuatro días, y un 3,1%, en el resto”.

“Es un castigo tremendo que le pega a la panza de los hijos de los docentes. Son salarios que no llegan a mitad de mes y traen problemas alimentarios, es un golpe durísimo porque ataca el sustento familiar. Nos pagan salarios que no alcanzan y nos descuentan por reclamar porque los salarios no alcanzan”, expuso el referente de Agmer Uruguay.

Sadop también para 

El Consejo Directivo Provincial de SADOP Entre Ríos convocó a 48 horas de paro para los días jueves 22 y viernes 23 de agosto. Y solicitó al gobierno una nueva propuesta que atienda las demandas de colectivo de la docencia privada:

• Una recuperación de la diferencia entre los porcentajes de incremento salarial otorgados en el primer semestre (43%) y la inflación acumulada en el mismo período (79.8%). 
• Incrementos porcentuales por encima del índice inflacionario.
• Incrementos en códigos remunerativos y bonificables. Se rechaza cualquier aumento mediante montos no remunerativos ni bonificables.
• Una recomposición que impacte a todo el escalafón por igual, evitando distorsiones salariales.
• Rechazar cualquier reforma de la Ley N°8732 de Jubilación Provincial.
• Conminar a las entidades propietarias privadas a asumir su responsabilidad como garantes de sueldos que deben ser acordes a la importancia del trabajo docente.

Sintéticamente, el decreto de la Gobernación establece:  

• Un Incremento del mínimo docente a $450.000.
• Aumento del 5% para julio.
• Incremento que iguale la inflación de agosto.
• Tres bonos de $40.000.
• Convocar a una mesa técnica compuesta por gremios docentes y estatales.