A un gran amigo
Querido Nene, tu partida nos ha dejado atrincherados en el dolor. Supiste hacer que tu presencia siempre fuera grata, con tu gesto amable, tu mano tendida y tu sonrisa amigable.
Cordial con todos, sin más pretención que ayudar y servir en una causa justa, dando tu tiempo en las frías madrugadas y los soles calientes, con tu respetuoso silencio aún en los peores momentos mantuviste tu gran “don de gente”.
Por eso ahora que ya no te veremos personalmente, pedimos a Dios que nos deje tu paz, que te abrace en su seno y dé la paz a tu familia
Nosotros siempre te recordaremos llegando con tu serenidad, tu sonrisa iluminando siempre el camino.
Hasta siempre Nene.
Grupo de los sábados a la noche
Por eso ahora que ya no te veremos personalmente, pedimos a Dios que nos deje tu paz, que te abrace en su seno y dé la paz a tu familia
Nosotros siempre te recordaremos llegando con tu serenidad, tu sonrisa iluminando siempre el camino.
Hasta siempre Nene.
Grupo de los sábados a la noche
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